El Polisario se desliga del caso Ghali ante el juez: "Lo desconocemos totalmente"

La Delegación del Frente Polisario en España se desliga del caso Ghali ante el juez que mantiene abierta la investigación por su llegada a Zaragoza en abril del año pasado. El ente ha despachado toda una batería de preguntas del juez sobre las condiciones de este viaje y sobre el hijo de Brahim Ghali en una escueta frase en la que dicen desconocer este asunto. En respuesta, una de las acusaciones ha pedido que se les vuelva a formular esta petición apercibiéndoles de la comisión de un posible delito de desobediencia a la autoridad judicial.

A finales de mayo, apenas un día antes de la que la Audiencia Provincial de Zaragoza archivara la causa para la exministra Arancha González-Laya, el magistrado Rafael Lasala se dirigió a la delegación del Polisario en España en plena búsqueda del hijo de Brahim Ghalim. El instructor les pidió información acerca de su entrada secreta en el país para ser tratado de covid, así como de su ingreso en el hospital San Pedro de Logroño.

En lo referente a las preguntas formuladas le comunicamos que desconocemos totalmente este hecho

En concreto, reclamó que se le informara de si conocían los motivos por los que se eligió España para ser asistido así como si hubo personas del Polisario que estuvieron con él en el momento de su ingreso hospitalario. Del mismo modo el juez se interesó específicamente sobre si esta delegación participó en la gestión del viaje (cuya filtración en prensa provocó una auténtica crisis con Marruecos) y si se tenía conocimiento de que, en el momento de su llegada a España, Ghali tenía dos causas penales abiertas en la Audiencia Nacional.

El Polisario, al margen del caso Ghali

La Delegación del Polisario en España respondió el mismo día que el juzgado le envió este requerimiento. Apenas cinco horas después de recibir la comunicación del juzgado, este ente contestó lo siguiente: "En lo referente a las preguntas formuladas y dirigidas a esta delegación le comunicamos que desconocemos totalmente este hecho".

Su escueta respuesta ha llevado a una de las acusaciones populares a reclamarle al juez que vuelva a mandar este requerimiento pero esta vez dirigido específicamente a Abdulah Arabi, delegado saharaui en España, según consta en la nueva documental adherida a la causa y a la que ha tenido acceso Vozpópuli. El abogado Antonio Urdiales solicita en su escrito que se les dé un plazo de dos días hábiles para contestar a todas las preguntas requeridas por el Juzgado de Instrucción número 7 de Zaragoza.

Según razona, las explicaciones facilitadas por el ente que lidera Ghali en España no son suficientes y demostrarían que no están dispuestos a colaborar con la Justicia. Por ese motivo insiste en que se requiera de nuevo esta información por parte del juzgado apercibiéndoles, además, que de no hacerlo podrían incurrir en un delito de desobediencia a la autoridad judicial.

Desobediencia a la autoridad judicial

El juez Lasala se dirigió a la Delegación en pleno proceso de búsqueda de Luali Brahim  sid el Mustafá, hijo del activista saharaui. Su intención es citarle en calidad de testigo para que responda acerca de todo el operativo de entrada y asistencia médica de su padre. Sus requerimientos a la Policía Judicial y a la Ertzaintza no han dado sus frutos, motivo por el cual se dirigió a la delegación en España del Polisario para que informara sobre su paradero.

Su nombre empezó a cobrar especial protagonismo después de que una empleada del hospital de La Rioja le identificara como la persona que posiblemente registró a Ghali. La descripción que ofreció parecía encajar con la figura de su hijo, el cual le acompañó en este viaje junto con un tercero que presumiblemente era su médico personal. A su llegada al hospital, Luali aportó un pasaporte falso a nombre de Mohamed Benbatouche.

El juez Lasala quiere saber por qué registró con un nombre ficticio al líder del Frente Polisario si, tal y como defendió Arancha González Laya en sede judicial, la entrada furtiva en España se ciñó a motivos políticos y, por tanto, ninguna ilegalidad había en que no se le identificara ni a su llegada ni a su retorno a Argelia. Al hilo el magistrado también quiere esclarecer si era el hijo de Ghali la persona que realmente enseñó este documento y si durante aquellos días les acompañó en La Rioja algún miembro de la Delegación del Polisario en Madrid.