Ni operación bikini ni dietas exprés: ocho consejos para llegar al verano en forma y sin hacer daño a la salud

Las dietas exprés no son recomendables en ninguna época del año aunque pensemos que quizá son una buena opción cuando se acerca el verano. Lo ideal es cuidar nuestra alimentación y hacer ejercicio físico durante todo el año para llegar a la temporada estival sin tener que hacer esfuerzos que luego puedan perjudicar y mucho a nuestra salud general.

¿Por qué no es bueno hacer operación bikini? “Porque ese concepto de hacer dietas extremas para poder ponernos ese bikini puede dar lugar a tener una mala relación con la comida y ocasionar problemas graves de salud. Tenemos que ayudar a la gente a ser consciente de que hay que comer saludable durante todo el año, que no sirve hacer dietas exprés porque el posible peso que se pierda será principalmente agua y masa muscular y cuando se vuelva a comer “normal” es muy probable tener un efecto yo-yo”, nos explica Marina Domene, coordinadora del departamento de nutrición de SHA Wellness Clinic.

¿Qué problemas pueden traer para la salud las dietas exprés? Como hemos dicho antes, “desarrollar una mala relación con la comida, tener conductas compensatorias y sabemos que esto no es nada bueno. Además, en un proceso de pérdida de peso, se debe tener en cuenta otros aspectos de la composición corporal como la masa muscular, la masa grasa, grasa visceral etc. Haciendo estas dietas exprés mal distribuidas, carentes de nutrientes importantes como ácidos grasos omega 3, proteínas adecuadas para el mantenimiento de la masa muscular conlleva al debilitamiento, cansancio, mal estado anímico o riesgo de sufrir lesiones durante la práctica de actividad física debido a la falta de nutrientes”, añade la experta.

Nada de dietas, cuida tu alimentación

¿Cómo debemos cuidar la alimentación en primavera para llegar perfectos al verano sin dietas extremas? La alimentación se debe de cuidar en cualquier época del año, independientemente de la estación que nos encontremos. Deberíamos ante todo “asegurar un aporte adecuado de vitaminas y minerales, tan sencillo como que la base de nuestra dieta sean verduras y frutas de temporada, incluir fibra añadiendo aparte de esas verduras, proteínas ricas en fibra como son las legumbres, también podemos tomar hidratos de carbono complejos como el trigo sarraceno, la quinoa etc.”, recomienda la coordinadora de nutrición de SHA Wellness Clinic.

En cada ingesta deberíamos asegurar “un aporte adecuado de proteínas, intenta priorizar más opciones vegetales derivadas de la soja fermentada como el tempeh, consumir pescado idealmente de pequeño tamaño, como las sardinas, anchoas o caballa por su alto contenido en omega 3 y asegurarnos de consumir frutos secos y semillas, y alimentos fermentados, como el chucrut y el miso, para ayudar a mejorar tu microbiota intestinal”. 

¿Qué alimentos son los que deberíamos incluir en estos meses previos al verano? ¿Cómo deberíamos comer para evitar dietas exprés perjudiciales para nuestra salud general? Lo ideal es añadir en cada comida verduras con un efecto más diurético tipo la alcachofa, el espárrago o el pepino. Y además es bueno “preparar la piel con los betacarotenos que encontramos en la zanahoria, el boniato y la calabaza”.

Ejercicio y calor

¿Cuáles son los deportes más aconsejables cuando empiezan a subir las temperaturas? Siempre que se pueda lo ideal es realizar una combinación de entrenamientos de fuerza junto con actividad cardiovascular (natación, salir a correr, caminar rápido...). Sobre todo busca deportes que te gusten y estés motivado para hacerlo, ya que las cosas por obligación tienden a desaparecer de nuestros hábitos.

¿Debemos cambiar nuestra rutina de entrenamientos según se acerca el verano? ¿Cómo hacerlo? Si el deporte que practicamos se realiza al aire libre, “debemos tener especial cuidado con las altas temperaturas para evitar un golpe de calor y sus problemas asociados. Es esencial mantenerse bien hidratado. Puede ser una buena estrategia añadir a nuestra botella de agua un suplemento de electrolitos o sales minerales para evitar desvanecimientos. Y estar muy bien nutrido, aporte adecuado de verduras y frutas, proteínas e hidratos de carbono complejos que nos ayuden a mantener la energía sostenida en el tiempo”, explica Domene.

Consejos para llegar al verano en forma 

1. Dieta equilibrada, variada y antiinflamatoria. Como explicábamos anteriormente, apuesta por frutas y verduras de temperatura ahora que además apetece comer más fresco y saludable. Olvídate de los snacks procesados e incluye en tu merienda zanahorias, algo de hummus o una pieza de fruta. Más saciante y saludable cien por cien. Olvídate de dietas que te hagan pasar hambre.

2. Buen estado de hidratación. Beber agua con la llegada del calor es más importante que nunca. Incluye un par de vasos grandes en cada comida principal. 

3. Consumir alimentos ricos en vitamina E y A (betacarotenos) para reducir el daño de la piel debido a una mayor exposición solar. Las zanahorias son el perfecto aliado para que tu piel luzca perfecta en esta época. Aplica demás siempre protección solar antes de salir de casa, incluso si el día está nublado.

4. Mantener la microbiota intestinal es un estado de equilibrio (eubiosis), aportando fibra a través de verduras, cereales integrales, proteínas vegetales como las legumbres. 

5. Correcto manejo del estrés y del sueño. En verano debido a las altas temperaturas en algunas personas les cuesta más conciliar el sueño y sabemos que la deficiencia del sueño nos hace estar más cansados y ello conlleva también a tomar malas elecciones en nuestra comida, se tienda a consumir más alimentos procesados, azúcares etc. 

6. Haber realizado actividad física de forma regular (y no querer en un mes conseguir lo que se debe hacer en más tiempo). Plantéate una rutina semanal y entrena siempre a la misma hora para que la pereza no pueda contigo.

7. Haber tenido una buena exposición solar en invierno para que nuestros niveles de vitamina D estén en un rango saludable o en caso necesario haber toma un suplemento de vitamina D. 

8. Todos los cuidados que hayamos tenido antes del verano son esencial que los sigamos manteniendo, ya que a veces en el verano por estar de ‘vacaciones’ solemos descuidar esos hábitos. Es importante flexibilizar la dieta y el deporte, pero no podemos olvidarlo por completo.