Si se quiere echar a perder un país y propagar la pobreza, nada mejor que eliminar toda zona de sombra, todo espacio a la espontaneidad, e imponer la tiranía del burócrata.

Tras una de las legislaturas más duras que se recuerdan, el colectivo de inspectores de Hacienda (IHE) reconoce estar recomponiendo las buenas relaciones con la dirección de la Agencia Tributaria y el propio Ministerio. La presencia de los dos principales altos cargos de la AEAT ilustra el nuevo tiempo de paz en la agencia.

La Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) ha pedido al Ministerio de Hacienda "claridad y firmeza" ante las demandas de cualquier colectivo que pretenda forzar decisiones de corte político y legislativo para favorecer intereses particulares de cualquier gremio. O lo que es lo mismo, pretende evitar que, presionado por la huelga, el Gobierno tanga la tentación de suspender las inspecciones fiscales a los futbolistas.