Pasado Halloween, los grandes comercios entran sin sonrojo y con total descaro en campaña navideña. No seré quien los critique, soy más vanguardista todavía: desde hace tiempo me siento en carnaval, todo lo que nos rodea es una gran farsa. Si ante lo sucedido el pasado lunes y martes no lo ven así no serán unos cuantos argumentos e imprecaciones mías los que les hagan caer del guindo. Nunca le hizo más falta a España unas cuantas catilinarias y nunca cayeron más en saco roto que ahora. Por lo visto, nuestra derecha sólo despierta cuando se queman iglesias y conventos y las monjas son violadas. Iba a decir que los fachas ya no son lo que eran, pero en realidad nunca fueron nada hasta que no hubo más remedio que defenderse por la fuerza.
Hablar de la fuerza es como nombrar la soga en casa del ahorcado para la mayoría de liberales y conservadores. A mí tampoco me gusta en absoluto el concepto, de la misma manera que me asustan las sequías, los huracanes, las peleas y las guerras. Apoyamos desde fuera estas últimas, como ocurre con Ucrania, pero nos estremece ver sus consecuencias. No las quisiéramos para nosotros. El problema es que hasta los conceptos más puros y elevados necesitan ser defendidos. La mayoría de las naciones europeas hemos solucionado este problema dejando el monopolio de la violencia en manos del Estado, sin plantear cuál es la alternativa cuando los gobiernos son los que perpetran los golpes contra este ordenamiento.
Si los ciudadanos se saltan por el forro la invitación de Abascal -que es lo que va a ocurrir- seguiremos -sin prisa, pero sin pausa- hacia la república bananera en la que Sánchez lleva años convirtiendo España
¿Qué hacer entonces? En la manifestación del pasado domingo, Santiago Abascal invitaba a todo funcionario del estado a impedir que se perpetre ese autogolpe que parece ya inevitable. La lógica del argumento era impecable: si el gobierno se salta las leyes, ¿por qué no podemos hacer nosotros lo propio? ¿debemos? El problema radica en que cualquiera de las posibles respuestas de la ciudadanía a esta llamada de Abascal resulta deprimente. Esto es así, no por culpa del dirigente de Vox, sino porque es una propuesta que responde a una realidad más que grave y preocupante. Si los ciudadanos se saltan por el forro la invitación de Abascal -que es lo que va a ocurrir- seguiremos -sin prisa, pero sin pausa- hacia la república bananera en la que Sánchez lleva años convirtiendo España. Ahora bien, ¿qué pasaría si los funcionarios -en especial aquellos encargados de detener por la fuerza a quienes perpetran golpes de estado- recogen el guante del bilbaíno? Volveríamos a la retórica del ”¡que vienen los fachas!”, algo que en el fondo anhelan todos los que quedan a la izquierda del PP (o incluso dirigentes mismos del PP). La ansían porque es la única forma que tienen de legitimarse, la única vía que poseen de mantenerse en el poder a pesar de que estén dejando en la ruina institucional, económica, política, social y hasta moral de nuestra nación.
Los vanos esfuerzos del PP
La derecha está atrapada en el mismo callejón sin salida que aquellos a quienes acusamos de mentir. Si es verdad que mienten, usarán la mentira para defenderse. En consecuencia, aunque sean sinceros, presupondremos que es falsa cada palabra que salga de sus bocas. Esto explica los esfuerzos constantes y vanos del PP por caer bien a la izquierda, en lugar de atender a quienes depositan en ellos su confianza. Lo malo es que gran parte de estos acaba por caer en ese mismo síndrome de Estocolmo que nos ha llevado a este punto de muerto del que resulta imposible salir ileso. Disculpen el pesimismo, pero la realidad es la que es, y una princesa valiente y bien preparada como Doña Leonor no nos va a sacar de ésta. Princesita que vienes al mundo, te guarde Dios. Las dos Españas te rompen el corazón: una por activa y otra por pasiva. A mí me dolería mucho más esta última, ¿a ustedes?
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.
Debo reconocer que, habida cuenta de la historia de este país, y, tanto más, viendo el posicionamiento político que manifiestan las organizaciones sindicales policiales, uno experimenta cierta inquietud ante escritos como este, más común estos días de lo que sería recomendable en pro de la salud democrática del estado, u oyendo palabras como las de Aznar.
El silogismo es impecable: si la amnistía vulnera la ley, vulnerémosla nosotros aún más violentamente para conseguir lo que nos niegan las urnas. Porque yo lo valgo.
En fin, supongo que Sánchez ni por casualidad llegará a leerlo, pero, si lo hiciera, imagino que no podría contener su regocijo: qué no le permitiremos antes de que demócrata-constitucionalistas de este pelaje puedan gobernar el país? No parece que, esta vez, el amigo americano esté a favora de permitir en España una 'predrocastillada'.
Otra columnista de VozPópuli (y ya van mil) que aboga por un golpe de estado y una guerra civil. ¡Vaya pedazo de "demócratas" que hay en la redacción! Goebbels, de seguir vivo, estaría feliz viendo que bien han asimilado sus tácticas en el "periodismo" hispano. https://diario-de-un-ateo.blogspot.com/2023/07/ahora-que-vox-ha-encontrado-su-nicho.html
Abascal no es de Bilbao, sino de Amurrio (Álava)
El artículo está confuso y deslavazado, no me ha gustado nada.
Aunque no quiera manifestarse por aquello del qué dirán, mucha gente opina que, ante un golpe de Estado de estas dimensiones, la posición ha de ser la de la lucha, calle a calle. Y que cada uno entienda lo que quiera. Con claveles no impediremos que ese comunismo rancio y sus terminales separatistas lleguen a su fin. Hoy-aunque metidos de lleno en el otoño de España-, debería ser julio y con gente preparada para impedir el golpe. Ha de ser un golpe contundente. Así aprenderán porqué se produjo lo que se produjo un 18 de julio. Aquello, tristemente, lo provocaron los mismos que hoy quieren acabar de nuevo con España. Unámonos por comunidades, por pueblos, por barrios. No dejemos que avancen o acabaremos en las checas millones de españoles. Muévase el Rey no firmando, muévase el ejército, la policía y la Guardia Civil. Y detrás, toda la gente de bien, de Ley y de Orden.
Apreciada, le recuerdo una frase celebre:
Los valientes solo mueren una vez
Los cobardes, muchas.
ahora, sólo escoja
El resumen del artículo es Resignación para la derecha. Todo lo que no sea resignarse es arriesgarse a que les llamen fachas...y eso sí que no!
Yo no sé si esta doctora confunde la derecha con la izquierda en su vida ordinaria o sea sufre de dislexia espacial.
El párrafo angular de su artículo “Volveríamos a la retórica del” ¡que vienen los fachas!”, algo que en el fondo anhelan todos los que quedan a la derecha del PP (o incluso dirigentes mismos del PP). La ansían porque es la única forma que tienen de legitimarse, la única vía que poseen de mantenerse en el poder a pesar de que estén dejando en la ruina institucional, económica, política, social y hasta moral de nuestra nación” yo solo lo entiendo si se cambia derecha por izquierda.
De cualquier forma veo un artículo con muy pocas ideas pero todas muy confusas y hasta mal redactadas, como sin haberle dado un mínimo repaso.
Tiene Ud. razón, Mariona, la derecha se deja pisotear y no se defiende por dos razones:
- Aún existen muchas personas temerosas de que se les califique de "fachas" por discrepar de los mantras irracionales y sectarios que la izquierda pretende imponernos.
- A la derecha no le van las manifestaciones violentas, las algaradas callejeras, la quema de contenedores, que con tanto desparpajo exhibe la izquierda.
Si no se supera el marco mental en el que la derecha se encuentra encerrado, el golpe de estado que está perpetrando Pedro Sánchez seguirá su curso, acabará culminando con todo el poder en manos del sátrapa, y los que se opongan serán calificados de fachas e incluso de golpistas y antidemocratas ya que el Tribunal Constitucional (ocupado por los peones sectarios y obedientes que Pedro Sánchez ha colocado en él) se encargará de dictaminar que todas las tropelías que Pedro Sánchez perpetre son perfectamente constitucionales y democráticas.
La derecha está aletargado desde hace años
Usted expone que la derecha hace llamamientos a los funcionarios públicos para que se salten la Ley, ya que el Frente Popular se la salta en su actuar diario y se auto-perdonan sus delitos por conveniencia política. Se auto-amnistían.
Y de ahí, pasa advertirnos de las nefastas consecuencias que policía y militares, se saltaran la Ley.
Y de ahí usted deduce que como la derecha sabe de estas nefastas consecuencias, en realidad nos está mintiendo tal y como hace la psoe. Todos mentirosos.
Y a partir de ahí: se enreda en ¿la mentira del mentiroso es la verdad? ¿O no?.
La cosa es menos Alicia y su madriguera: Las élites nacionales no nos van a sacar de esta, pero necesitamos algún Daoiz que pinche el suflé, porque los votantes de la psoe no disminuyen ni arruinándolos.
Unas pruebas que Marruecos chantajea al autócrata, algunas conversaciones de los golpistas burlándose, los contratos de Illa por el COVID....... cualquier cosa ahora, provocaría tal terremoto que reventaría el Frente Popular.
Lo que no acaban de entender es que Feijóo no tiene armas para luchar contra Sánchez.
La Ley, la Constitución tiene grietas del tamaño del Cañón del Colorado y el felón, falso y trilero Sánchez las ha descubierto.
La Ley está de su parte y acabamos de descubrir que permitir que los enemigos de España estén en el Parlamento es un suicidio.
Para empeorarlo todo, el PSOE nos ha dicho que "harán todo lo necesario para permanecer en el Poder" o sea, que solo se le podrá echar por la fuerza.
Y ademas tiene un armario lleno de "muertos" a disposicion de sanchez
Por cierto... que tal tito Berni?
Duele mucho más la derecha pasiva.
Ni estado, ni derecho, ni España, Sánchez ha destruido la democracia, la libertad, la justicia y la igualdad de los españoles. Y sólo un par de manifestaciones, se puede hacer mucho más y la ocasión lo justifica. Falta un paso adelante en la movilización, faltan concentraciones frente a Ferraz pidiendo democracia, faltan escraches frente a las viviendas de gobernantes, faltan acampadas por la libertad frente a la moncloa, nada nuevo que ya hizo la izquierda, pero ahora más justificado que nunca, y para defender la unidad de España, la igualdad entre españoles, y el fin de los privilegios de los políticos de izquierda.
A ver "Mariona Rebull", te han cortado el brazo derecho y no lo sientes. O sea que tú ves las barbaridades de la izquierda y lo único que te ofrecen es arremeter contra la derecha.
Este visto que eres joven y no tienes idea de lo que pasó en este pais en los ochenta y noventa.
Creo que todavía no has alcanzado la mayoría de edad para ocupar una columna de opinión.
Desconozco si la derecha tiene salida, pero la gente corriente sí que tiene posibilidad de manifestarse, y seguir una HUELGA GENERAL.
Esto ya es el colmo. Basta ya.
Sánchez se piensa que gobernar es tener la mitad de los votos +1, aunque a ese 1 haya que regalarle todo, y perdonarle todo, y tener sometidos a su antojo a los jueces.
Huelga general ya, y no parar hasta que esto cambie.
Como bien apunta, vamos a tener que defendernos por la fuerza. El Estado está atrapado por el frente popular y va en contra de la mitad de los ciudadanos. O nos defendemos o acaban con nosotros.