El PSOE ha perdido 54 diputados autonómicos desde el primer Gobierno de coalición de Pedro Sánchez en 2019 y sus alianzas con los separatistas catalanes y vascos. El Frankenstein le ha salido caro al socialismo en toda España, según estos datos recabados por Vozpópuli.
El único beneficiado de la mayoría que sostiene a Sánchez en el Congreso ha sido el PSC, que ha conseguido recuperar terreno perdido durante este periodo. La formación liderada por Salvador Illa ha ganando más de 16 escaños desde que el presidente decidió apoyarse en el independentismo para gobernar.
La debacle del PSOE en las elecciones gallegas ha abierto un debate sobre la estrategia autonómica del partido. Sánchez ha comentado ante su ejecutiva, reunida este lunes en Ferraz, que se necesitan consolidar liderazgos que trasciendan la marca. No ha detallado a qué se refiere exactamente, porque la mayoría de barones territoriales los ha elegido o cambiado él personalmente.
El PSOE pierde 54 diputados
En ese sentido, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha advertido que Galicia abre un ciclo electoral "difícil y hostil" para el partido. Y ha confiado en que no acabe convirtiéndose en un "ciclón" que lo arrase todo. La próxima cita será el País Vasco, probablemente en abril, y habrá elecciones europeas, que son de carácter nacional, el 9 de junio.
Los datos autonómicos desde que Sánchez consolidó sus alianzas de Gobierno han sido un desastre para el PSOE. El partido se ha dejado 54 escaños en todas las elecciones autonómicas celebradas desde el 2019 y hasta las gallegas del domingo.
La región más perjudicada por las legislaturas de Sánchez es Madrid, donde el PSOE ha perdido 10 diputados. Le siguen Cantabria y Castilla y León, donde el socialismo se ha dejado siete escaños respectivamente. En Extremadura y ahora en Galicia ha dilapidado seis en cada una de ellas. En Murcia ha cedido cuatro y en La Rioja, tres.
El epicentro de la catástrofe fue el 28 de mayo del 2023. El PSOE perdió los gobiernos de La Rioja, Cantabria, Aragón, Comunidad Valenciana, Baleares, Extremadura y Canarias. Los socialistas conservan actualmente Navarra -gracias a EH Bildu-, Asturias y Castilla-La Mancha. Además, forma coalición con el PNV en el País Vasco.
Cataluña, sostén autonómico
No todo han sido pérdidas para el PSOE desde que Sánchez emprendió este camino, que ahora incluye como nuevo socio a Carles Puigdemont. El partido ha ganado 21 diputados, si contamos como propios los 16 del PSC en Cataluña.
Illa ganó pero no pudo gobernar. Otras ganancias han sido irrelevantes, como el acta sumada en el País Vasco y los cuatro escaños ganados en Valencia que no pudieron frenar al Gobierno PP-Vox en la comunidad.
Una de las críticas recurrentes que ha enfrentado Sánchez en el PSOE es la constante injerencia de Ferraz en los territorios y como se supedita todo a los pactos que le sostienen en La Moncloa. En las generales del 23-J, sin ir más lejos, desautorizó a varias federaciones y a la libre elección de sus agrupaciones para imponer a los candidatos que quería en las listas.
La federación madrileña, por ejemplo, es una de las más castigadas por los ataques constantes del Gobierno a Isabel Díaz Ayuso. Esta confrontación no le ha reportado beneficio alguno al PSOE en esta comunidad. Más bien, lo contrario.
Madrid y Galicia son dos de las autonomías en las que el PSOE es tercera fuerza política, superado por Más Madrid y el BNG.
Tal y como ocurrió en Andalucía en las elecciones del 2022, el batacazo de Galicia no ha abierto un gran debate más allá de García Page y un tuit del ex presidente aragonés Javier Lambán. Ferraz ha cerrado filas para proteger a su líder del peor resultado en la historia del PSOE. Y se ha pretendido desligar lo ocurrido de la amnistía y otras decisiones controvertidas como entregarle la alcaldía de Pamplona a la izquierda abertzale.
La portavoz del PSOE, Esther Peña, ha rechazado que el líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, haya salido reforzado tras la mayoría absoluta obtenida por los 'populares' en Galicia
