Máxima tensión en Ciudadanos: la dirección acusa a Carrizosa de intentar “reventar” el acuerdo con el PP

Máxima tensión en Ciudadanos. La dirección nacional del partido acusa a su líder en Cataluña, Carlos Carrizosa, de "intentar reventar" el acuerdo con el PP para concurrir juntos a las elecciones catalanas del 12 de mayo, según explican fuentes de la cúpula naranja a Vozpópuli.

Estas fuentes consideran que por una "ambición personal" que no entienden, Carrizosa "está trabajando activamente por reventar el acuerdo a nivel interno". Y ese acuerdo, de producirse, debe ser refrendado por los afiliados de Ciudadanos en Cataluña

C's quiere coalición

El origen del conflicto está en las entrevistas que Carrizosa ha concedido este martes a diversos medios. El líder naranja en Cataluña sostiene que la única fórmula viable de pacto es una "coalición". Y que todo lo demás es inasumible. Este diario ya informó el fin de semana de las reticencias que había en Cataluña, cuna de Ciudadanos, a la integración en las listas del PP.

"Todo lo que no sea una suma. Todo lo que no sea una coalición es ir cautivos y desarmados al PP", decían desde Ciudadanos en Cataluña. "El PP tiene que entender que es la mejor opción, que hay un votante desencantado del PSC por la amnistía y las cesiones de Pedro Sánchez al que le puede seducir una fórmula en la que esté Ciudadanos y no sólo el PP".

Carrizosa, que fue cabeza de lista en la cita de hace tres años, obtuvo seis diputados. Y estas fuentes recuerdan que es el líder catalán "peor valorado" en las principales encuestas.

"El mandato de la negociación la tiene la dirección y la dirección no está hablando", explican estas fuentes. "Está hablando quién no tiene mandato para negociar".

Integración de Ciudadanos en el PP

El PP se ha marcado como objetivo resolver el acuerdo con Ciudadanos, que define como integración del partido liberal, y después plantearse la candidatura de Alejandro Fernández. Génova apuesta por un acuerdo electoral que supondría la inclusión de distintos perfiles naranjas en las listas del PP tanto en las catalanas de mayo como en las europeas del 9 de junio.

La dirección de Ciudadanos no ve con malos ojos la fórmula de integración que plantea el PP. Y reconoce que "no se puede vivir en un mundo que no existe". "La negación de la realidad (demoscópica y de expectativas) ya la hemos vivido en otras elecciones", aseguran.

Ciudadanos despareció del mapa en las autonómicas y municipales del 28 de mayo. La formación liberal no se presentó a las generales del 23-J, tampoco a las gallegas del 18 de febrero y no concurrirá a las vascas del 21 de abril.

La formación naranja, nacida en Cataluña en 2006, quiere salvaguardar su marca; la del C's con apostrofe. A pesar de su desaparición en toda España y su presencia residual en esta comunidad -6 escaños y 10 concejales en todo el territorio catalán-, el partido considera que todavía ejerce como polo de atracción electoral por lo conquistado en el pasado. Y más en estos momentos en los que Carles Puigdemont amenaza con regresar y existe una sensación de traición y orfandad entre los votantes constitucionalistas catalanes, también en el PSC.

Consulta interna en Ciudadanos

Cualquier acuerdo con el PP debe ser refrendado por los militantes catalanes de Ciudadanos. Y ahí es donde está el temor de la dirección nacional de la formación naranja. Una derrota haría peligrar el acuerdo europeo.

La desconfianza entre Ciudadanos y el PP en Cataluña viene de lejos. En primer lugar, por su origen. El partido naranja en esta comunidad es casi una escisión del PSC y sus cuadros en Cataluña han estado ideológicamente más alineados a la socialdemocracia que a la derecha. Los populares nunca vieron con buenos ojos al partido naranja porque, entre otras cosas, se atrevió a denunciar los pactos de Gobierno que José María Aznar o Mariano Rajoy ejecutaron con el nacionalismo catalán. El pico de este enfrentamiento tuvo lugar durante el procés, en 2017.