Los secretarios provinciales del PSOE han multiplicado sus llamadas a las agrupaciones para animar a la participación de las bases en la consulta que debe ratificar los pactos de Pedro Sánchez para su investidura. Ferraz ha ordenado a los territorios que multipliquen los esfuerzos ante el temor a una abstención alta de la militancia, según ha sabido Vozpópuli.
Más de 178.000 afiliados socialistas están llamados a refrendar el acuerdo de coalición alcanzado con Sumar y “lograr el apoyo de otras formaciones políticas” (sic). La consulta telemática se abrió el lunes y finalizará el viernes al mediodía. El sábado se podrá votar de forma presencial en las agrupaciones y el domingo se harán públicos los resultados.
Los primeros compases de la votación, sin embargo, no han registrado los números que esperaba la dirección. La victoria del sí se da por supuesta. Pero Ferraz no quiere una sombra de duda sobre el resultado, que no menciona la amnistía para Carles Puigdemont pero que recoge de forma implícita porque Sánchez la ha defendido ante el comité federal del partido.
Poca movilización en la consulta
Esta situación ha provocado que los secretarios provinciales hayan tenido que descolgar el teléfono para demandar un esfuerzo a los afiliados. Las personas que han recibido la petición son los responsables de las agrupaciones. En las llamadas, según ha sabido este diario, se ha trasladado que había poca movilización en general. Y que era necesario “dar un empujón entre todos”. El propio Sánchez ha enviado una carta a toda la afiliación pidiendo su apoyo.
La victoria del sí a favor del acuerdo no está en entredicho. Y también se da por hecho que el porcentaje de noes será escaso. Según fuentes socialistas, los militantes que reniegan de la amnistía –que haberlos, haylos- se han decantado por abstenerse. Y Ferraz no quiere que se haga esa lectura cuando se den a conocer los resultados.
El margen de participación razonable que estima la dirección del PSOE está en la consulta de similares características que se realizó para ratificar el pacto de coalición con Unidas Podemos en 2019. En aquella ocasión votó el 63% del censo. El apoyo al acuerdo fue del 92%.
El PSOE, también bajo mandato de Sánchez, convocó un referéndum similar en 2016 sobre el acuerdo de Gobierno con Ciudadanos. La participación fue once puntos más baja en relación al pacto con Pablo Iglesias –el 51,7% del total de afiliados-. El sí obtuvo el 79% de los votos.
Amnistía para Puigdemont
La pregunta que Sánchez ha trasladado a la militancia dice literalmente: “¿Apoyas el acuerdo para formar un gobierno con Sumar y lograr el apoyo de otras formaciones políticas para alcanzar la mayoría necesaria?” Los militantes conocen el acuerdo con la formación de Yolanda Díaz pero no los pormenores el resto de pactos de investidura.
En cualquier caso, el presidente del Gobierno, como parte de las exigencias de Puigdemont, ha hecho suya la bandera de la amnistía. Y ya se sabe que hará esa concesión para lograr el apoyo de los siete diputados de Junts per Catalunya (JxCAT), que son imprescindibles para la investidura.
El ‘número tres’ del PSOE, Santos Cerdán, se entrevistó el lunes con Puigdemont en Bruselas. Un encuentro necesario para rehabilitar políticamente al ex presidente catalán, prófugo de la Justicia española desde el golpe a la democracia en Cataluña del 2017.
Además de JxCAT, el PSOE negocia pactos de investidura con ERC, EH Bildu, PNV y el BNG. Su contenido podría conocerse en los próximos días. El Gobierno ha dejado entrever que confía en celebrar la investidura de Sánchez entre el martes y el miércoles (7 y 8 de noviembre) de la semana que viene.
