La exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, insiste en querer convertirse en Defensora del Pueblo. Carmena está intentando convencer a Pedro Sánchez y a los socialistas para que desbloqueen la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) renunciando a la candidatura del juez Ricardo de Prada. Según el entorno de Carmena, sin De Prada el PP de Pablo Casado pactará con los socialistas la renovación de la cúpula judicial y aceptará que la exalcaldesa se haga con el control del Defensor del Pueblo. Todos los rumores sobre una candidatura de Carmena a la presidencia de la Asamblea de Madrid son, según varias fuentes, "puro artificio".
Carmena no está en ninguna ecuación electoral. De ello están seguros fuentes del PSOE de Madrid y de Más Madrid. El PSOE, de hecho, confirmó el viernes la exclusiva de este diario que aseguraba la repetición de Ángel Gabilondo como candidato a la presidencia de la Comunidad. Gabilondo había manifestado sus reticencias pero finalmente dio el visto bueno a la petición de la Moncloa. Mientras que en el caso de Carmena las fuentes socialistas se permitían incluso ironizar: “Nadie se imagina a Carmena de gira de pueblo en pueblo con ochenta años en la campaña electoral ni después de las votaciones”.
Gabilondo aspiraba a ocupar el prestigioso cargo de Defensor del Pueblo, y según algunas fuentes socialistas el profesor no ha renunciado a su proyecto. Fuentes gubernamentales daban la operación ya casi cerrada hace meses. “Tiene el despacho ya listo”, afirmaban para explicar que solo faltaba formalizar un acuerdo que debía contar con el visto bueno del Partido Popular en el Congreso.
Cabe señalar que el actual defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, lleva cuatro años de interinidad, y se trata de una figura muy cercana a Alfonso Guerra, por lo que Sánchez tiene mucha voluntad de solucionar ese capítulo en los próximos meses. En este sentido no se puede descargar que Sánchez haya pactado con Gabilondo que repita como candidato, a cambio ya de un pacto en firme para el defensor del pueblo, aunque Carmena insiste con los suyos en que tiene una oportunidad para volver a postularse para el cargo.
Del olvido a volver a jugar
La exalcaldesa cree que para que se desbloquee su nombramiento hace falta que PSOE y PP acerquen posturas. Así que está empujando a través de sus contactos para que los socialistas renuncien definitivamente a nombrar al ex juez De Prada en el CGPJ, puesto que sobre él los populares han puesto un veto. De Prada fue el juez que añadió a la sentencia sobre la Gürtel unas conclusiones que desembocaron en la moción de censura a Mariano Rajoy y que luego el Supremo obligó a corregir. "Lo está intentando y con fuerza", explican fuentes socialistas conocedoras de los movimientos de Carmena.
En septiembre de 2019, como desveló Vozpópuli, Sánchez se acercó a Carmena dejando entender que para la exjueza se abrían oportunidades en el ministerio de Justicia o defensora del Pueblo. Aquello fue una acción táctica que dinamitó por dentro al partido de Íñigo Errejón, después de que el exnúmero dos lanzara su artefacto electoral de Más País tras la fundación de Más Madrid.
Sin embargo, el ministerio de Justicia se entregó a Juan Carlos Campo, y la alcaldesa vio cómo Sánchez aceptó la petición de Pablo Iglesias de no dejar para Carmena el cargo de Defensor del Pueblo. Entonces PSOE y Unidas Podemos estaban pactando un gobierno de coalición después de la repetición electoral de noviembre, y Carmena salió de todas las quinielas.
Más de un año después, sin embargo, la situación en el Ejecutivo ha cambiado. El PSOE se ha hecho con el control del Gobierno, y Podemos intenta ganar espacios de poder y sobre todo mediáticos para lanzar la idea de que están empujando a la izquierda a Sánchez. En ese embrollo, y ante la candidatura de Gabilondo a la Asamblea, la alcaldesa cree que puede volver a jugar sus cartas para recuperar protagonismo y alcanzar un cargo de proyección y nobleza institucional.
