Tras el veto de Google, ¿pueden reclamar los usuarios de Huawei una compensación económica?

La noticia saltaba durante la noche (hora española) del pasado domingo. Lo que Huawei llevaba sospechando un tiempo, se hacía oficial: Google terminaba de vetar a los teléfonos móviles de la enseña china, lo que se sumaba al bloqueo de Donald Trump al desarrollo de redes 5G con la compañía. 

A nivel usuario, este veto supone que el sistema operativo Android dejará de actualizarse en los teléfonos móviles de la compañía (lo que supone, entre otras cosas, una seguridad más vulnerable y una ralentización que terminaría dejando obsoleto el terminal). Además, los nuevos terminales que se fabriquen, no tendrán acceso a la tienda de aplicaciones, Play Store y no contarán con Gmail o Youtube.  

Entre los usuarios de Huawei -recordemos que es la segunda firma a nivel mundial y la primera en España- el desconcierto estaba servido. Los telediarios de la mañana y de la noche emitían imágenes de tiendas de teléfonos móviles en las que se veía a los ciudadanos con numerosas incógnitas. Hay una, en concreto, que ya ronda la cabeza de muchos y es sobre la reclamación.

¿Puedo reclamar a Huawei?

Según advierte FACUA-Consumidores en Acción, los usuarios de Huawei "tendrían derecho a reclamar compensaciones económicas" si sus dispositivos móviles "perdiesen prestaciones como consecuencia de la ruptura de Google". 

Cabe recordar, que los equipos ya vendidos y que están en stock seguirán teniendo acceso a Google Play y seguirán proporcionando actualizaciones de seguridad. 

En cualquier caso, si hubiese cambios que privasen a los usuarios del acceso a parches de seguridad en la versión de Android instalada, la legislación española y europea establece un marco de protección de sus derechos. Explica FACUA en este sentido que "si el terminal afectado estuviera dentro de los dos años de garantía, la pérdida de prestaciones conllevaría el derecho a reclamar una compensación al vendedor. 

¿Y si he comprado el Huawei hace más de dos años? Podría haber derecho a una compensación ante la existencia de un posible incumplimiento contractual.