El expresidente de Indra crea una empresa de asesoramiento tecnológico

Javier Monzón ha constituido recientemente la empresa Wabisabi Inversión y Servicios, que tiene como objeto social la "prestación de servicios de asesoramiento y consultoría en general especialmente en el campo tecnológico e ingeniería". Según consta en el Registro Mercantil, la sociedad, que además tiene como objeto social la adquisición de inmuebles, está domiciliada en Madrid, y tiene también como administradora a la esposa de Monzón.

Monzón fue destituido de su cargo como presidente de Indra, 22 años en el puesto, en enero de 2015 tras la entrada en el capital de Telefónica, siendo sustituido por Fernando Abril-Martorell; entonces fue nombrado presidente de honor de la multinacional tecnológica española.

En enero el expresidente de Indra fue designado consejero de Ferroglobe, la compañía surgida de la fusión entre Ferroatlántica, de Juan Miguel Villar Mir, y la estadounidense Globe Specialty Metals.

El pasado mes de noviembre Monzón fue sometido a la humillante retirada de su cargo como presidente de honor de Indra, al desvelarse que había empleado durante su etapa como presidente un avión privado costeado por la compañía sin el conocimiento del consejo de administración.

La salida de Monzón supune un desembolso para Indra de 15,75 millones de euros en total. El expresidente de la multinacional tiene el derecho contractual a percibir de la aseguradora con la que está externalizado un Plan de Prejubilación y Ahorro a Largo Plazo de 12 millones de euros. La compañía explicó en su informe de Gobierno Corporativo del ejercicio 2014, presentado en abril de 2015, que está obligada a dar un preaviso de tres meses a la finalización de un contrato laboral con ejecutivos, sujeta al pago de determinada retribución de no hacerlo, que en el caso de Monzón ascendió a un millón de euros. Además los contratos de los consejeros ejecutivos con la empresa contemplan un pacto de no competencia por un periodo de dos años a partir de la finalización del contrato, compensado con una cuantía que para Monzón supuso otros 2,75 millones.