Quantcast

Opinión

A la salud de las putas

Íñigo Errejón y Yolanda Díaz
Íñigo Errejón y Yolanda Díaz Europa Press

La ideología de género lleva muchos años pico y pala, pico y pala socavando nuestra libertad individual. Allá por 2016, siendo alcaldesa Manuela Carmena, el Ayuntamiento de Madrid publicó una Guía de recursos para periodistas cuyo objetivo era enseñar —o imponer— la neolengua a esos plumillas descarriados que, pobres, no sabían lo que hacían y a las prostitutas… ¡las llamaban prostitutas! Ante el hecho de que el consistorio ejerciera de policía de la moral, escribí entonces: «Así, cuando un periodista vea una prostituta, debe escribir que hay una “mujer en situación de prostitución”. Y donde vea un cliente, dirá que hay un “putero”. Lo cual no deja de ser un sinsentido lingüístico: si no hay putas, ¿cómo va a haber puteros?». En 2019, Manuela Carmena se fue a hacer magdalenas a su casa y el link a la guía dejó de funcionar; supongo que cuando los de Almeida hicieron limpieza, meterían aquel panfleto en la trituradora de documentos. (¿Será eso lo que M.A.R. quiere hacer con eldiario.es?).

En 2020, Pedro Sánchez le dio el Ministerio de Igualdad a Irene Montero, quien lo dirigió como si tuviera el mandato divino de erradicar el sentido común de la faz de la tierra. Imagino que en estos días de holganza bien pagada junto a su piscina-lago, la pareja del famoso tabernero madrileño estará disfrutando de lo lindo viendo sufrir a su archienemiga a manos del mismo PSOE que la aisló a ella. Últimamente, Yolanda de las gentes no termina de encajar un golpe cuando ya está recibiendo otro: fracasó hasta el ridículo en su tierra y ahora Ada Colau le ha dicho que, por mucho que se arregle, en Cataluña no pinta nada. Toma adelanto electoral, maja. Por eso Sánchez ya no se deja besuquear y ha dado orden a los suyos de hacer el vacío a la gallega, que cuando está de promoción va de blanco redentor y ahora lleva varios días acudiendo al Congreso vestida de Doña Rogelia. Hasta le cuesta aplaudir cuando el disco rayado de su jefe exige a Feijóo que exija la dimisión de Ayuso, y ni siquiera es capaz de sonreír cuando Marisú —tú, cuidao—amenaza a diputados del PP.

No sólo me parece un insulto a mis amigos gais —que ganan mucho más que yo—, sino que, además, todos sabemos que el INEM no ha encontrado trabajo a nadie desde los años 80


En su lucha por la supervivencia, la lideresa de Sumar hace todo lo posible para volverse viral: que si los algoritmos no andan solos por la calle, que si hay que cerrar antes los restaurantes, que si hay que prohibir los indultos a políticos corruptos mientras amnistiamos a políticos corruptos para mantenernos en el machito… Y todo ello, sin soltarse de la manita de la ideología de género: para portavoz de Feminismo, Igualdad y Libertades LGBT+  eligió a Elizabeth Duval, que es un Errejón vestido de señora con un discurso tan pedante y soporífero que hasta a Urtasun le cuesta soportarlo. La última ocurrencia de nuestra rubia de bote es que el colectivo LGTBI tendrá atención prioritaria en los servicios públicos de empleo como otros desfavorecidos: jóvenes con baja cualificación, desempleados de larga duración, mayores de 45 años o personas con discapacidad. No sólo me parece un insulto a mis amigos gais —que ganan mucho más que yo—, sino que, además, todos sabemos que el INEM no ha encontrado trabajo a nadie desde los años 80.

Hasta hace unos días, a Yolanda Díaz le podía quedar el consuelo de haber adelantado al Podemos menguante en ideología de género. Pero ahora ha venido el PSOE a recordarle que en España no sólo hay gais, lesbianas, bisexuales, transexuales y demás: también están los puteros. Y el martes registraron por sorpresa una proposición de ley contra la prostitución que, según ha dicho Errejón, a los de Sumar les ha pillado en bragas. Al parecer, el feminismo que él y Elizabeth Duval representan aún no sabe si están a favor de abolir, regular o tirarse a la vía.  

Andrea Fernández puso su guapa y angelical cara a este nuevo trile socialista, pero cuando el campechano Patxi anunció la buena nueva,  no sé por qué me vinieron a la cabeza las fotos del Tito Berni y sus amigos con las señoritas que fuman.  Probablemente este hipócrita puritanismo sólo sea otra cortina de humo para desviar la atención de los negocietes de Begoña & Cía, pero oye, quién sabe: quizá el partido de la coca y las putas quiera redimirse y con esto alcance la santidad de género.

Ningún heterosexual sin castrar

En cualquier caso, estaríamos ante otra limitación de la libertad individual; los acuerdos íntimos entre dos adultos son asunto suyo, no del Estado. Por supuesto, hay que perseguir a traficantes y explotadores, pero no hay que estigmatizar a los hombres porque tengan necesidades distintas a las de las mujeres. Aunque eso es, precisamente, lo que hace la ideología de género, que no dejará ningún heterosexual sin castrar.

La mayoría de los socios del gobierno no están a favor de esta ley, y Patxi López ha dicho que esperan contar con el apoyo de Feijóo. Capaces serán los peperos de ayudar para demostrar que a progres no les gana nadie.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.

  • E
    Elfachapobre

    Las de ,los volquetes de las cacerías del PP/VOX, supongo

  • M
    marqueslinchado

    La ilustración gráfica del artículo no está mal, dous curuxas son dous curuxas, pero una foto reciente de las desfenestraditas, condenadas al alivio garibaldiano, sería mucho mejor.

  • J
    José

    Otro artículo impecable de Marisol, como todos los suyos. ¡Enhorabuena!

  • Z
    Zafariche

    Si los socialistas (PSOE) cierran los prostíbulos a golpe de decreto, yo me pregunto: ¿Dónde piensan acudir a la hora de reclutar consejeros para las empresas del Estado que tengan la "homologación y curriculum" que el PSOE necesita?

  • V
    vallecas

    No entiendo a los Hombres que pagan por tener sexo con mujeres que les desprecian. No entiendo, no me cabe en la cabeza, que las Mujeres acepten dinero por mantener relaciones sexuales, se dejen "penetrar" por extraños, varias veces al día, durante años y años.
    No entiendo que los que dicen ser de izquierdas e incluso feministas estén a favor de esta aberración. Esta "trata" debe prohibirse ¡¡ya¡¡, el Estado no puede respaldar esta "profesión".

    ¿Qué van a hacer entonces estas mujeres profesionales del sexo??
    Te lo diré en voz baja para que nadie me oiga. Que se hagan autónomas, masajistas, cuidadoras, acompañantes, secretarias..........ya sabes.