Publicado: 02/11/2022 04:45
Actualizado: 02/11/2022 04:50
El PP aprovecha los Presupuestos de 2023 para retomar la guerra contra la política hidráulica del Gobierno y los recortes al trasvase Tajo-Segura. El Grupo Popular ha registrado una serie de enmiendas exigiendo, entre otras cosas, un nuevo plan hidrológico nacional, el uso de fondos europeos para concluir las obras pendientes y un plan de choque contra la sequía.
Esta ofensiva de los de Feijóo empezó el pasado mes de septiembre, cuando el Ministerio para la Transición Ecológica anunció un recorte de hasta el 40% del citado trasvase. Una decisión muy aplaudida por la Confederación Hidrográfica del Tajo, el gobierno de Castilla-La Mancha y por los pueblos ribereños de la región, pero que levantó a los ejecutivos autonómicos de la Comunidad Valenciana (PSOE) y Murcia (PP).
Los populares, de hecho, llevan desde mediados de octubre moviendo una 'cumbre del agua', impulsada por el murciano López Miras y el líder del PPCV, Carlos Mazón, y apoyada por Juanma Moreno, para presionar al Gobierno. Paco Núñez, presidente del PP en Castilla-La Mancha, por su parte, se remite al Pacto del Agua sellado a nivel autonómico con Page, donde no se hace alusión al cierre del trasvase.
Un nuevo plan hidrológico
En plena polémica territorial por esta decisión del Ejecutivo central, el PP ha presentado una enmienda parcial a los Presupuestos en la que reclama la introducción de una disposición adicional (novena), que dice lo siguiente: “Durante el año 2023, una vez finalizado y aprobado el tercer ciclo de planificación hidrológica, se procederá a la elaboración de un nuevo Plan Hidrológico Nacional".
Ese nuevo plan hidrológico debe incluir, según el PP, un "estudio a nivel Nacional sobre las posibilidades del incremento de la capacidad de regulación; las medidas necesarias para la coordinación de los diferentes planes hidrológicos de cuenca; la solución para las posibles alternativas que aquéllos ofrezcan; la previsión y las condiciones de las transferencias de recursos hidráulicos entre ámbitos territoriales de distintos planes hidrológicos de cuenca; y las modificaciones que se prevean en la planificación del uso del recurso y que afecten a
aprovechamientos existentes para abastecimiento de poblaciones o regadíos".
Los populares defienden que, transcurridos más de 20 años desde la aprobación de la Ley 10/2001, de 5 de julio, del actual Plan Hidrológico Nacional, "se considera necesario una actualización de condiciones técnicas y administrativas que den seguridad jurídica a la actividad económica". Un proceso de planificación que "debe generarse desde el consenso social, económico y político".
El PP, además, en otra enmienda parcial, pide dejar sin vigencia, en 2023, los cambios introducidos en el Real Decreto 638/2021, que ampliaba los niveles de agua exigidos para el trasvase Tajo-Segura desde los pantanos de Entrepeñas y Buendía, dos de los más castigados por el trasvase, y que están a tan solo el 19% de su capacidad. Los populares, pese a ello, apuestan por volver a situar esos niveles exigidos a los valores aprobados en 2014 por el Gobierno de 2014.
Fondos UE y plan contra la sequía
En otra de las enmiendas presentadas, el PP pide que todas las obras contempladas en el Plan Hidrológico Nacional y en los planes de cuenca de segundo ciclo que no se hayan ejecutado, conforme a lo dispuesto en la Ley, sean consideradas prioritarias y reciban financiación procedente de los Fondos Europeos Next Generation.
De esta forma, los populares ven posible subsanar "el retraso injustificable en la planificación hidrológica por parte de este gobierno" y "atender a las demandas prioritarias de los territorios, de acuerdo con el papel coordinador que la Ley atribuye al PHN, respecto a los Planes Hidrológicos de cuenca, incluidas las transferencias entre distintos ámbitos de planificación".
El PP, además, propone en otra enmienda la creación un “Fondo de resiliencia en materia de agua”, con cargo al Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, para desarrollar infraestructuras hidráulicas, tanto destinadas a regadío como a prevención de avenidas e inundaciones, por su contribución a la lucha contra el cambio climático.
Finalmente, los populares reclaman un plan de choque conta la sequía que incluye limitar el precio de agua desalada para riego; un Plan Nacional de Recarga Artificial de Regadíos, también con cargo a los fondos europeos; y una elaboración de inventarios de cauces públicos, lagos, lagunas y embalses de dominio público hidráulico.
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Pues a ver si alguien se atreve a ponerle ese cascabel al gato... Como los pantanos los hacía Franco nadie quiere que le llamen facha.
Hay que evitar que los ríos se desborden y los pantanos suelten agua. Hay que rcogela en tubos y almacenarla. Hay que scer como los romanos. No hemos aprendido nada. Coya de incompetentes
Da pena ver el Ebro a su paso por Zaragoza como se desborda, y nos recuerda que cuando ya estaba aprobado el trasvase de este importante río Zapatero lo laminó perdiendo la financiación que nos daba Europa. Millones de metros cúbicos de agua dulce vertidos al mar a diario, no t iene sentido dejar que una vez que se convierte en agua salada, desalarlo con lo carísimo que es. El Psoe siempre ha hecho todo el mal que ha podido.
Los trasvases entre ríos de España que cada año llevan menos agua no van a soluciona la falta de agua para regar los campos de cultivo, lo que hay que hacer es construir una gran conducción que permita traer agua desde el Río Ródano a los embalses situados en las cuencas hidrográficas con mayor escasez de agua.