Los incendios en Navarra entran en fase de estabilización y ya no hay desalojados

Todos los incendios forestales que afectan a la Comunidad Foral han entrado en fase de estabilización, gracias al trabajo de los equipos de extinción y a las lluvias registradas durante la pasada noche. Lo que ha permitido desactivar el Plan Territorial de Protección Civil de Navarra (Platena). Esta mejoría ha permitido que los vecinos Amatriain, Maquirriain Olleta y Sansoáin, las cuatro localidades que continuaban evacuadas, regresen a sus casas; por lo que, no queda ninguna población desalojada.

Igualmente está previsto que los dos monjes del monasterio de Leyre, que por su situación de vulnerabilidad habían sido evacuados ante el incendio declarado en las proximidades, en suelo aragonés, retornen al mismo. Según ha informado la directora general de Interior, Amparo López, quien ha sostenido que se está "en el buen camino. Buenas noticias, vamos hacia el control de los incendios". Respecto a la situación actual de los fuegos, ha comentado también que en la zona de Ujué es "donde menos agua ha caído y donde puede haber algún tipo de humo, de rebrote".

"Estamos en proceso de estabilización, la evolución es la adecuada, pero la temperatura es alta, todavía las circunstancias son inestables", ha remarcado la directora general. Quien ha puntualizado además, que, como en la recta final de cualquier cosa, "no se pude bajar la guardia, hay que estar ahí trabajando sobre el terreno desescalando de forma coherente".

Tras desactivar los recursos llegados de otras comunidades, ahora sobre el terreno permanecen los efectivos de Navarra, dos helicópteros del Ministerio de Transición Ecológica y recursos de la UME. Y, a partir de las 14:00 horas, si "todo va bien, se irá desescalando para bajar al nivel 1" del Plan de Prevención de Incendios Forestales. Y es que "juntos todos somos más fuertes y podemos con esta excepcionalidad, con esta situación francamente extraordinaria, compleja e histórica", ha aseverado.

Incendios en fase de estabilización

Anoche ya se pasó a nivel de preemergencia, ha recordado López, quién ha resaltado que había un número "histórico" de efectivos, más de un millar trabajando sobre el terreno y 17 medios aéreos para combatir un incendio de "magnitudes históricas", con más de 10.000 hectáreas afectadas. Pero el pronóstico meteorológico, con previsión de lluvias y bajada de la intensidad del viento, hacía prever una "evolución favorable y merecía bajar el nivel de emergencia". Así, "sobre las tres o cuatro de la mañana el pronóstico se ha consumado, ha sido favorable, ha caído agua en la zona en la que se necesitaba, ha humedecido el terreno y la situación evoluciona muy favorablemente", ha agregado.

A primera hora de la mañana se ha reunido el comité técnico, antes del comité de crisis, para analizar la situación y a las 9 de la mañana se ha desactivado el Plan Territorial de Emergencias que se había activado el sábado "para poder dar cobertura a cualquier tipo de actividad". Con su desactivación se levanta la prohibición de realizar labores agrícolas y forestales que empleen maquinaria susceptible de generar incendios, como cosechadoras, empacadoras o trituradoras.

En cuanto a las hogueras de San Juan, al volver a la situación de normalidad, su celebración deja de estar en la esfera de Interior y vuelve a ser competencia por un lado de Medio Ambiente en terreno interurbano agrícola y por otro de los ayuntamientos en terreno urbano. En el caso del Ayuntamiento de Pamplona ayer ya anunció su prohibición. En todo caso ha hecho un llamamiento a la responsabilidad y ha instado a evitar el "turismo de desastre" y ha pedido que no se acuda a ver las zonas afectadas por los incendios porque la situación es "inestable, hay árboles que pueden caer, ha caído agua, puede haber barro y balsas".

"Hay que ser responsables y trabajar en la autoprotección, cada uno es responsable de su vida", ha aseverado, destacando que el trabajo que realizan tiene como objeto "salvar vidas, proteger personas". Al respecto ha destacado que dentro del operativo de más mil personas que ha trabajado directamente en la extinción, solo cinco han resultado heridas de carácter leve.