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España

Casado capea a los críticos: Feijóo pidió "humildad" y Ayuso obvió el congreso

El líder del PP comió con Mañueco antes del Comité Ejecutivo Nacional para blindar un discurso común avalado por los barones, aunque con matices. Juanma Moreno no se conectó

A quién le importa lo que diga la izquierda
Casado saluda a Mañueco antes del Comité Ejecutivo Nacional. // PP

Pablo Casado ha logrado mantener la imagen de unidad con sus barones que se vio en el acto de cierre de campaña en Castilla y León en la reunión en la que se analizaron los resultados del pasado domingo y la estrategia a seguir a partir de ahora. El presidente del PP coincidió con Alfonso Fernández Mañueco en apostar por un gobierno en solitario y recibió el respaldo de los líderes autonómicos, aunque con algún que otro matiz, como se esperaba en la jornada previa.

Antes de la reunión, convocada a las 17.30 de la tarde, el propio Casado y Mañueco comieron en Génova para blindar un discurso común, a ofrecer primero por el presidente en funciones de Castilla y León y, después, por el líder nacional del partido. Ambos, en su intervención ante el Comité Ejecutivo Nacional, dejaron abierta la posibilidad de pactar con Vox, pero solo para blindar la investidura y la gobernabilidad.

Casado, en todo caso, se mostró muy contundente contra los de Abascal. Afirmó que el PP es la "la alternativa a los populismos y radicalismos, a izquierda y derecha" y dejó caer que ni Vox logrará ocupar el espacio del Partido Popular ni entrar en el Gobierno.

Feijóo pidió "humildad"

Una vez concluido el discurso de Pablo Casado, barones y dirigentes del partido pidieron la palabra. Abrió ese turno de intervenciones Jorge Azcón, recientemente elegido presidente del PP de Aragón. En su primera comparecencia ante el Comité Ejecutivo Nacional, dio la enhorabuena a Mañueco, a la vez que destacó la victoria del PP en las elecciones: "Somos la única alternativa para gobernar".

Algo menos exultante fue la intervención de Alberto Núñez Feijóo. El presidente de la Xunta, que agradeció a los presentes el minuto de silencio al inicio del Comité Ejecutivo Nacional por las muertes de los tripulantes de un pesquero gallego en Canadá, hizo un breve pero completo análisis de la campaña y el resultado de las elecciones.

Destacó, en primer lugar, que "una victoria puede convertirse en una derrota, pero eso no ha pasado y hemos remontado". A pesar de "compartir" los discursos de Mañueco y Casado, sí quiso advertir que "debemos gestionar esta victoria con humildad".

Debemos gestionar esta victoria con humildad

Después del presidente gallego hablaron Manolo Domínguez, recientemente elegido presidente del PP de Canarias, Cuca Gamarra, Salomé Pradas y Edurne Uriarte. Todos ellos, coincidieron en destacar la victoria de Mañueco: Domingo afirmó que "no podemos pedir perdón por ganar" y Pradas pidió "no caer en el ruido" que perjudica al partido.

Ayuso no exigió el congreso

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, también pidió intervenir. Su solicitud se producía después de haberse reabierto la polémica por el congreso del PP de Madrid, con duras acusaciones por parte de cargos de Génova contra ella por haber roto la tregua después de las elecciones en Castilla y León, y tras apostar de forma clara por un pacto con Vox.

El discurso de la dirigente madrileña, sin embargo, se transformó totalmente al sobrepasar la puerta de entrada a Génova. Si justo antes de entrar había asegurado a los periodistas que, en caso de pactar, ella preferiría hacerlo "con aquellos que están en contra de los que secuestraron a Ortega Lara" y "no con el sanchismo", dentro de la sede nacional defendió casi lo contrario.

Afirmó, en ese sentido, que "ojalá" Mañueco pueda gobernar en solitario porque "los gobiernos de coalición son un infierno". Recordó, además, que Vox le había rechazado propuestas en la Asamblea de Madrid.

Sobre los resultados electorales, sí lanzó una advertencia a Casado y el resto de los líderes presentes, afirmando que el partido debe estar vigilante al auge de las plataformas provinciales de cara a las elecciones municipales.

Fuentes de la dirección nacional del PP consultadas por Vozpópuli afirman que la presidenta de la Comunidad no hizo mención alguna a la necesidad de celebrar cuanto antes el congreso del PP de Madrid. Los mismos cargos populares añaden, en ese sentido, que tampoco el secretario general, Teodoro García Egea, hizo referencias a la reactivación del calendario orgánico tras las elecciones en Castilla y León.

Moreno no se conectó

El presidente del PP de Murcia y de la Región, Fernando López Miras, cerró el turno de intervenciones de los dirigentes autonómicos del partido volviendo a ensalzar a Mañueco: "La alternativa es Alfonso y solo Alfonso puede ser presidente. Tenemos legitimidad para Gobierno en solitario. Todos querrían estar en nuestra situación".

La alternativa es Alfonso y solo Alfonso puede ser presidente. Tenemos legitimidad para Gobierno en solitario

El barón regional que no intervino, ni estuvo presente en el Comité Ejecutivo Nacional fue Juanma Moreno. El presidente de la Junta, máximo perjudicado por el resultado electoral en Castilla y León y un hipotético pacto con Vox, se quedó en Sevilla para participar en un acto de presentación de la marca de los productos andaluces organizado por el gobierno regional.

En la tarde del lunes, el entorno del presidente andaluz aseguró a Vozpópuli que trataría de conectarse de forma telemática en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional, pero fuentes de la dirección del partido confirmaron que finalmente tampoco participó por esa vía.

Fuentes de la dirección nacional del PP confirman que Moreno planteó esa conexión a través de Zoom. No obstante, destacan que se trataba de una reunión presencial del Comité Ejecutivo Nacional y que, por ese motivo, ni el presidente de la Junta ni ningún otro dirigente que no pudo asistir a Génova participó de forma telemática.

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