El Tribunal Constitucional ha avalado la constitucionalidad de la ley del aborto de José Luis Rodríguez Zapatero por siete votos frente a cuatro. El bloque progresista al completo ha mostrado su respaldo a todos los preceptos de la ley de 2010 que introdujo, entre otros aspectos, la posibilidad de interrumpir el embarazo en las primeras 14 semanas de gestación. De esta manera no ha prosperado la ponencia del conservador Enrique Arnaldo, que respaldaba la ley, pero no de manera integral.
Así lo confirman a Vozpópuli fuentes del tribunal de garantías que aseguran que ahora, tras renunciar Arnaldo, la ponencia la asumirá la vicepresidenta Inmaculada Montalbán. El presidente Cándido Conde-Pumpido le ha encargado el borrador de la sentencia a esta magistrada de corte progresista y con experiencia en la material en tanto fue presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica Doméstica y de Género.
Al no prosperar su borrador, que ha contado con 4 votos a favor y los 7 votos progresistas en contra, Arnaldo tenía la opción de volver a redactarlo de acuerdo con los argumentos de la mayoría o bien declinar el encargo, opción por la que ha optado. Ahora Montalbán asume la nueva redacción de una sentencia que respaldará sin fisuras la ley de Zapatero de 2010 y tumbará en su totalidad el recurso interpuesto por 71 exdiputados del Partido Popular contra algunos preceptos de la norma.
Fallo del aborto 13 años después
Se trata de una votación histórica en tanto el recurso contra la ley del aborto llevaba más de una década en el cajón. El recurso que planteó el Partido Popular ha pasado por las manos de cinco presidentes del TC (María Emilia Casas, Pascual Sala, Francisco Pérez de los Cobos, Juan José González Rivas y Pedro González-Trevijano) y tres ponentes (Elisa Pérez Vera, Andrés Ollero y el actual Enrique Arnaldo) hasta llegar a votarse en el Pleno.
El asunto, sin embargo, se convirtió en un tema crucial para Conde-Pumpido que le dio prioridad absoluta nada más jurar como nuevo presidente del órgano. Tanto es así que su deliberación se fijó para el primer Pleno de este nuevo Tribunal Constitucional que desde diciembre es de mayoría progresista.
Las deliberaciones arrancaron el martes con el estudio de la abstención planteada por Concepción Espejel. La que fuera magistrada de la Audiencia Nacional pidió apartarse de la deliberación alegado que, en su condición de antigua vocal del CGPJ, revisó la ley del aborto. El Pleno desestimó la pretensión y garantizó la votación del recurso del PP ya que, de haberla admitido, se abría la puerta también a la abstención de Inmaculada Montalbán, también exvocal del CGPJ que revisó esta norma.
A estos dos miembros se añadía también las recusaciones de Cándido Conde-Pumpido y Juan Carlos Campo. Una minoría de los diputados del PP que recurrieron la ley del aborto pidieron que se apartara a estos cuatro miembros de la deliberación. En el caso de Conde-Pumpido alegaron que dio su visto bueno a la ley en 2009, cuando era fiscal general del Estado. De Juan Carlos Campo sostienen que era secretario de Estado de Justicia en el Gobierno de Zapatero.
Aval de los progresistas
El Pleno, ya en la sesión de este miércoles desestimó todas las recusaciones. De no haberlo hecho la votación podría no haberse celebrado ya que no se habría obtenido el quórum mínimo de 8 magistrados para deliberar sobre el recurso. Fuentes del TC explican que en la jornada de este miércoles ya se comenzó a deliberar sobre el fondo del recurso del aborto. El primero en iniciar el debate fue Enrique Arnaldo y luego ya tomaron la palabra varios magistrados.
Miembros del tribunal de garantías confirmaron a este medio que la deliberación no iba a ser fácil ya que se trata de una material compleja y trascendente, en parte también por el tiempo que ha pasado sin resolverse. Algunos de los magistrados progresistas veían tachas a la redacción de la ponencia y advertían de que no darían su respaldo a la misma porque, aunque avala en su mayoría la reforma de Zapatero, le pone pegas en cuanto a la información que reciben las mujeres que quieren abortar.
Arnaldo, que ha trabajado en los últimos meses en el borrador de sentencia, respaldaba el sistema de plazos que introdujo la ley del Gobierno socialista y los preceptos generales de la norma recurrida. Algunos de los preceptos incluso no se llegaron a estudiar. Es el caso por ejemplo de la supresión de permiso paterno para las menores que quisieran interrumpir su embarazo. El PP recurrió esta parte de la ley pero el Gobierno de Mariano Rajoy lo recuperó en 2015, por lo que este aspecto decayó al declararse pérdida sobrevenida del objeto.
Nuevo borrador
Lo que no respaldaba Arnaldo era la parte relativa a la forma en la que reciben información las mujeres que quieren abortar (artículo 17 de la Ley Orgánica 2/2010). La actual ley precisa que la información debe ser "clara, objetiva y comprensible" y que la misma puede ser ofrecida "verbalmente si la mujer lo solicita". La ponencia, por su parte, sostenía que la gestante recibe información completa.
Estas valoraciones han llevado a los progresistas a no respaldar el borrador en tanto se busca dar un apoyo unánime a la ley del aborto. Así pues, tras esta primera votación, el borrador queda ahora en manos de Inmaculada Montalbán, la cual hará una ponencia completamente favorable a la ley y la misma saldrá adelante con el respaldo mayoritario de los progresistas del Tribunal Constitucional.
