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España

Nuevo frente para Abengoa: una empresa aviva una batalla legal por un proyecto en Angola

La Audiencia de Madrid estudia si reabre una causa que impulsó Canalizaciones Ebro contra la multinacional sevillana, a la que acusa de torpedear una obra común en Angola y de intentar asfixiar su negocio

Una de las imágenes del proyecto de obra en Angola

Una empresa de Aragón da la batalla en los tribunales a Abengoa. La firma Canalizaciones Ebro mantiene un pulso judicial contra la multinacional sevillana por un proyecto común en Angola hace ahora 11 años. Tras varias idas y venidas, la Audiencia Provincial de Madrid ha estudiado esta semana si reabre o no la causa que se siguió en los juzgados de Madrid a expensas de esta firma aragonesa, que sostiene que les ocultaron información clave del proyecto en el país africano y, además, trataron de hundir su negocio.

El asunto se remonta a diciembre de 2011, cuando esta empresa suscribió un contrato para impulsar un proyecto en Angola con una UTE integrada por Befesa Agua (adquirida por Abengoa) y Roigersa S.A. En concreto, se trataba de ejecutar la instalación de las tuberías para el abastecimiento de aguas entre las ciudades de Xangongo y Ondjiva.

La empresa denunció que los trabajos debían comenzar en enero de 2012 pero se retrasaron dos meses por la falta de material (que achacan a la UTE) y porque el director de construcción dio la orden de que no arrancaran hasta su vuelta de vacaciones. Canalizaciones Ebro comenzó las obras y soldaron hasta 30 kilómetros de tubería pese a que contaban con menos máquinas de las previstas y que no podían enterrar las tuberías una vez soldadas por falta de zanjas.

Pulso contra Abengoa

Las dificultades acaecidas llevaron a la UTE a resolver el contrato en noviembre de ese año responsabilizando de ello a la empresa aragonesa a la que acusó de "reiterados incumplimientos". En respuesta, esta firma acudió a la Justicia. Demandó a la UTE por la vía civil y le reclamó poco más de 1 millón de euros por todo lo invertido en el proyecto. La Justicia estimó parcialmente la demanda y condenó a las herederas de Befesa y Roigersa a pagarle 632.232 euros.

El asunto podría haberse terminado aquí, pero la empresa decidió abrir también la vía penal. En 2019 interpusieron querella contra Eurofinsa (que absorbió Roigersa), Abengoa Agua S.A (antigua Abeinsa) y los responsables del proyecto angoleño por un delito de estafa agravada. En su querella les acusa de ocasionarle un grave perjuicio patrimonial alegando que cuando firmaron el contrato entre las partes todavía no se había aprobado el proyecto de ejecución de obras, circunstancia que conocerían y la habrían ocultado deliberadamente.

La empresa sostiene que cuando firmaron el contrato no estaba aprobado el proyecto de obra y que se les ocultó deliberadamente para ahogarles material y económicamente

Según alegan, ello impidió que ejecutaran correctamente la obra, máxime teniendo en cuenta que no contaban tampoco con un plan de seguridad e higiene en el trabajo. Todo esto, unido a la falta de material que le debían suministrar, tendría como fin último "ahogar material y económicamente" a esta empresa con el objetivo de quedarse con su capital humano y material desplazado a Angola.

Este nuevo frente judicial para Abengoa se investigó en el Juzgado de Instrucción número 50 de Madrid. Tras tomar declaración a los imputados, testigos y adherir varias periciales, la Fiscalía de Delitos Económicos pidió el archivo de la causa en diciembre de 2022, tal y como consta en las actuaciones a las que ha tenido acceso Vozpópuli. El Ministerio Público razonó que las sospechas de la empresa querellante no habían quedado lo suficientemente acreditadas. Aunque no descarta que el proyecto no se hubiera aprobado antes del inicio de la obra, sostiene que ello no imposibilitaba empezar con el trabajo.

Imagen de las tuberías del proyecto

"De todos es conocido que la aprobación de proyectos en no pocas ocasiones se produce una vez iniciada la ejecución de estos", reza la petición de archivo de la Fiscalía, la cual también descartó que Abengoa ocultara adrede esta información a su socia y que buscara su asfixia económica con este proyecto. "No existe elemento fáctico alguno que soporte tal manifestación", apuntó. El instructor de la causa atendió el reclamo de la Fiscalía y dio carpetazo a las actuaciones en enero de 2022.

Testigo sorpresa

Canalizaciones Ebro recurrió ante la Audiencia Provincial de Madrid pero los magistrados tampoco vieron motivo para mantener la causa contra Abengoa. Así, en junio fallaron en idéntico sentido que el juez instructor indicando que "nadie contrata con otro con la intención de que no pueda ejecutar su prestación o de que no pueda realizar el pago". Y además, le atribuye a la querellante "poca diligencia" en tanto accedió a firmar el contrato e iniciar estas obras de tubería "sin ni siquiera contar con el proyecto aprobado".

Con este pronunciamiento la batalla judicial entre las partes parecía quedar zanjada definitivamente. Sin embargo, la firma zaragozana volvió a la carga y pidió al juzgado instructor que se reabriera la causa para incorporar la declaración ante notario de un testigo de los hechos, que vendría a provocar un nuevo giro al caso. El juzgado se negó alegando que el asunto esta información no era nueva y la firma volvió a recurrir ante la Audiencia de Madrid.

En este nuevo recurso, interpuesto en febrero, dan completa validez a lo expuesto por este testigo, que responde a las iniciales de C.L y que fue trabajador de Abeinsa, filial de Abengoa. En concreto elaboró dos declaraciones juradas; una en abril del año pasado y otra en enero de 2023. En la primera expuso que fue jefe de producción de la obra en Angola y que el jefe de la misma le dio órdenes de no firmar ninguna parte del trabajo que presentara la empresa aragonesa.

Máquinas empleadas en la obra

"También me pidieron que hablara con todos los trabajadores de la plantilla de Canalizaciones Ebro con el fin de que abandonaran esta empresa y pudieran ser contratados por la UTE directamente (...), lo cual recibí siempre una respuesta negativa", expuso. En su segunda declaración, también unida al recurso, detalló que en los dos meses que estuvo en el terreno pudo constatar cómo la falta de materiales que tenía que facilitar la UTE hizo imposible ejecutar la obra.

Para la empresa querellante se trata de pruebas que demostrarían su tesis inicial y "la nula voluntad" de las querelladas de ejecutar la obra. Según sostiene, el dinero que consiguió al ganar a Abengoa en la vía civil solo reconocía los mínimos pactados por lo que dicha condena no resarcía el conflicto por la obra no ejecutada. Además, rebatió al juez asegurando que cuando firmaron los contratos pidió toda la información necesaria a la UTE, la cual les habría trasladado que sí tenían el proyecto de obra aprobado.

El asunto está ahora en manos de la Audiencia Provincial de Madrid. Los magistrados de la Sección número 29 son los que tienen la última palabra sobre este nuevo intento de Canalizaciones Ebro de actuar contra Abengoa. Se da la circunstancia de que se trata de la misma Sección que ya resolvió sobre el archivo el año pasado y lo hizo precisamente desestimando la pretensión de la empresa zaragozana.

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