Susana Díaz inicia una ronda de contactos para ver cómo se gestiona el PSOE después del 20D

Los presidentes de Castilla-La Mancha, Extremadura y la Comunidad Valenciana, Emiliano García-Page, Guillermo Fernández Vara y Ximo Puig, ya han contactado con Susana Díaz para estudiar el campo en el que el PSOE puede empezar a jugar en menos de dos semanas en caso de que se confirme el desplome que vaticinan las encuestas.

Los barones socialistas exploran el terreno ante la posibilidad de que su partido continúe en caída libre

La mayoría de los siete presidentes autonómicos del  PSOE depende para mantener el cargo de Podemos o de Ciudadanos, lo que complica aún más la situación. Entre ellos también se han cruzado llamadas a espaldas de Susana Díaz para intentar pactar la mejor forma de digerir los resultados del día 20, fecha en la que, según todas las encuestas, los socialistas pueden tocar un suelo histórico y situarse por debajo de los 100 escaños. La llave de qué hacer si estos resultados se confirman la tiene Susana Díaz, a quien otro barón regional la ha escuchado en privado hacer un diagnóstico que resume el ánimo de buena parte de la organización. “Pedro no está dando la talla, se ha devaluado como jefe de la oposición, colocándose al mismo nivel de los recién llegados”.

Los recién llegados a los que se refiere la baronesa son, lógicamente, Albert Rivera y Pablo Iglesias. Y lo que escuece en las filas socialistas es la habilidad que ha tenido este último, sobre todo, para apropiarse de casi toda la protesta del 15-M, un referente para el calendario del PSOE, entonces en el Gobierno, y también para los partidos emergentes. “Pero, ¿de verdad tenemos campaña?”, se preguntaba el pasado miércoles un dirigente regional, preocupado ante lo que se avecina para su partido el 20-D. Visto lo sucedido, la mayoría de los barones coinciden en que Pedro Sánchez y su equipo han hecho mal en aceptar la participación en los dos debates donde no ha comparecido Mariano Rajoy. “Un partido centenario como el nuestro no puede transmitir la imagen de que parte de cero, sobre todo porque durante más de tres años ha hecho en el Parlamento una tarea de oposición ingente contra las políticas del PP con propuestas alternativas. Nuestro contrincante es Rajoy, no es Podemos”, resume un parlamentario asombrado también por los vaivenes que su organización está dando en la campaña.

En opinión de Susana Díaz, Pedro Sánchez no está dando la talla en la campaña

El poder territorial conquistado por el PSOE el pasado mes de mayo, gracias al apoyo de Ciudadanos y Podemos -Castilla-La Mancha, Extremadura  y Aragón son algunos de los feudos donde recuperó poder- condicionará también bastante, según fuentes socialistas, la respuesta que podría darse desde Ferraz a un posible apoyo de Ciudadanos al PP para que gobierne, así como la conveniencia o no de compartir con Podemos una labor conjunta de oposición.

“Lo básico será conocer cómo respirará Susana Díaz desde Andalucía a un desplome electoral y también la opinión de Felipe González, pues es la que más sigue influyendo en ella”, aseguran fuentes de la ejecutiva federal, donde no se descarta que si, al final, Sánchez logra superar los 100 escaños, pueda disponer de una tregua temporal para rearmarse en la oposición, sobre todo si Mariano Rajoy encuentra dificultades para formar Gobierno y cuando lo consiga se respire un clima de legislatura corta.

Las mismas fuentes apuntan que en estos momentos la prioridad para Pedro Sánchez es frenar en la recta final de la campaña la sensación de que su partido está en caída libre, así como calentar el debate, éste sí que crucial, previsto con Mariano Rajoy en TVE para el próximo lunes. En el PSOE hay quien lo fía todo a este duelo televisivo, al menos para evitar que Podemos consolide su remontada en el sprint final de la campaña y Ciudadanos empuje también a los socialistas al descalabro situándoles por primera vez como tercera fuerza política desde el arranque de la Transición.

La puya que más le ha escocido al equipo de Sánchez: "Pedro, mandas poco, en tu partido mandan otros"

Sánchez encara este debate sin haber sabido reaccionar a una de las varas que más irritan en su entorno, por el calado que puede llegar a tener en la opinión pública: “Pedro mandas poco, en tu partido mandan otros”, le espetó el lunes Pablo Iglesias. Con posterioridad, Rajoy tardó menos de 24 horas en dar por amortizado al líder del PSOE, a quien anoche todavía le tocó pasar por “el calvario”, así se califica en su entorno, de compartir con Zapatero -otro de los principales aliados de la campaña del PP- un mitin en Gijón introducido con calzador en su agenda electoral.