Publicado: 03/04/2020 12:40
Si es cierto que vivimos en la sociedad de la imagen, una de las que sin duda perdurará en el imaginario colectivo cuando la epidemia del coronavirus haya remitido será una que hemos conocido hoy: un enorme parking de Barcelona atestado de ataúdes dispuestos en hileras. Y es que un aparcamiento de coches de tres plantas ubicado en el Tanatorio de Collserola se está reconvirtiendo en un depósito de féretros de personas muertas por la Covid-19 en los últimos días. La reconversión viene motivada por la saturación de los servicios funerarios de la ciudad, que no dan abasto a la hora de enterrar a los fallecidos.
Se trata de que, gracias a estos ataúdes —que ya ocupan un espacio considerable de los 5.000 metros cuadrados del parking y que se guardan a baja temperatura— se evite situaciones de colapso como las que se han vivido en Madrid. El objetivo que se persigue es que los cadáveres no tengan que quedarse en los centros sanitarios a la espera de poder trasladarlos a las diferentes funerarias de la ciudad.
Evitar una situación excepcional como la “acontecida en Madrid”
La iniciativa parte del Grupo Mémora, que, junto a otros operadores como Áltima y en coordinación con el Ayuntamiento de Barcelona, pretende disponer de un gran depósito refrigerado y, de paso, “acondicionar el Tanatorio de Collsera para una posible situación excepcional que pueda recordar lo acontecido en Madrid”. Así, para llevar a cabo las tareas de acondicionamiento, el tanatorio ha cerrado sus puertas al público.
Por otra parte, en el comunicado en el que ha dado a conocer la medida, Mémora ha subrayado la “voluntad de aunar esfuerzos de todos los agentes implicados” y se congratula de haber monitorizado y adaptado los protocolos de seguridad al nuevo escenario originado por el coronavirus. También ha destacado que ha movilizado a todo su equipo de “profesionales para trabajar en virtud de evitar el colapso” del sistema de Salud, descongestionados de esta forma hospitales y residencias.
El impacto de tan extraordinaria medida —que recuerda a la que se adoptó en Madrid cuando reconvirtió el Palacio del Hielo en una gran morgue— se ha hecho patente en las redes sociales, en las que numerosos ciudadanos están publicando fotografías o vídeos de los féretros del parking del Tanatorio de Collserola.
Desolador.
El aparcamiento de 3 plantas del tanatorio de Collserola de Barcelona, depósito para ataúdes de fallecidos por coronavirus.
Ni al Gobierno, la Generalitat y sus palmeros les gustará que se vea, pero esas muertes no deben caer en el olvido.
D.E.Phttps://t.co/0imDY3Y3fE— Guaje Salvaje (@GuajeSalvaje) April 2, 2020
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