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Economía

El plan económico de Sánchez contra la guerra: medidas viejas e insuficientes

Para paliar la crisis económica, que se agravará con la guerra en Ucrania, los economistas creen necesarias medidas adicionales a las anunciadas por el presidente Pedro Sánchez este miércoles en el Congreso

Pedro Sánchez
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. EP

Medidas viejas que se prorrogan o se anuncian como nuevas y que además son insuficientes. Es la valoración de los economistas y expertos a los que ha consultado Vozpópuli del plan económico que ha presentado Pedro Sánchez este miércoles en el Congreso. La mayoría coinciden en que más allá de la prórroga de las rebajas fiscales a la luz, deberían implementarse reducciones de impuestos a trabajadores y empresas y medidas adicionales. Asimismo, alertan de que pedir moderación salarial a los sindicatos es claramente insuficiente y reclaman un pacto de Estado para que la inflación no se enquiste.

Así, Sánchez ha pedido moderación salarial a los sindicatos ante la escalada de la inflación y ha sacado pecho sobre el ERTE Red, ya en vigor pero todavía no probados por su complejidad. Prorroga las rebajas fiscales a la luz y las medidas para consumidores vulnerables hasta junio y ofrece incentivos al sector de la energía. También ha anunciado medidas para turismo y agricultura que no ha concretado.

José Félix Sanz, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid, lamenta que se trate de "medidas preexistentes que se prorrogan, no hay nada nuevo" y que cree "claramente insuficientes". "La situación de enfriamiento de la economía se puede exacerbar en el corto y medio plazo, lo que exigiría medidas más contundentes", advierte. Cree que en este escenario se debe "reestructurar la reforma fiscal mucho más allá de este paquete de extensión temporal de medidas ya escasas en su momento".

No cree que haya que tocar los hidrocarburos, ni bajar ni subir, sino que hay que hacer una "recomposición de la cesta de impuestos gravando más el consumo y menos las rentas y beneficios para empujar la actividad, lo que han hecho otros países europeos desde el inicio de la pandemia". En este sentido, plantea que "si antes era necesario, ahora es un plus. No hay nada que inventar, todo está inventando, a la reducción de impuestos por la pandemia, esta situación es una vuelta de tuerca. Lo que se tendría que haber hecho, el resto de países acertaron y están acertando".

Sanz, que ha calculado el impacto de la subida del IPC de 2021 en la Campaña de la Renta que va a pagarse ahora en 2022 desde el próximo 6 de abril, de 4.110 millones de euros más, considera que el pacto de rentas que ha propuesto Sánchez es una medida acertada, pero que debería acompañarse de una actualización de la tarifa del IRPF que precisamente elimine el sobrecoste de 4.110 millones.

Las rebajas fiscales no van a absorber las nuevas subidas en la inflación"

Por su parte, Miguel Cardoso, economista Jefe para España en BBVA Research, cree que las medidas anunciadas por Sánchez "no van a tener mucho impacto en la inflación" que se viene: aunque en el momento en que se implantó la rebaja fiscal tuvo sus efectos, ahora "no absorberá las nuevas subidas". Para Cardoso son necesarias nuevas medidas como, por ejemplo, "acuerdos con las empresas para intentar que se repartan de otra forma los márgenes entre los distintos tipos de emisión de energía para tratar de tener controlados los precios". 

Para el economista jefe para España en BBVA Research sí es importante la extensión del bono para proteger a los consumidores más vulnerables, subsidiando un consumo mínimo de energía, pues los precios se mantendrán más elevados y por un periodo de tiempo más largo como consecuencia de la guerra. Sin embargo, para el resto, Cardoso apunta a la necesidad de "racionar el consumo de energía directamente" o "dejar que el mercado funcione, se incrementen los precios, y las familias y empresas mejoren sus comportamientos de eficiencia energética". 

Antonio Pedraza, presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas, reclama rebajas en los impuestos especiales que gravan hidrocarburos, combustibles y gas. También propone "retocar" el IVA reducido de los bienes de primera necesidad. "Si la demanda interna (el consumo), principal componente del PIB, cae, el crecimiento puede perder más de un tercio de lo presupuestado, quizás más", advierte. Pedraza también opina que los salarios no deben subir por encima del 3%, pues un incremento más allá daría lugar a una inflación de segunda ronda "muy peligrosa" y "con un amplísimo componente estructural".

Un pacto de Estado para controlar la inflación

José Antonio Herce, profesor de Economía en la Universidad Complutense de Madrid y consultor en longevidad y pensiones en LoRIS, advierte de que "el plan repite lo que ya están en vigor" pero cree a la vez que hay poco margen de maniobra. "Esta desgraciada guerra va a complicar muchas cosas y no hemos visto nada, el reciente dato de inflación del 7,4% todavía no lo ha incorporado: escasez de materias primas, ruptura de cadenas logísticas, cierre de espacios aéreos...".

Como prevención para que la inflación no se enquiste y como garantía si los rentistas y otros afectados quieren recuperar el impacto, cree que Sánchez hace bien invocando moderación salarial, pero advierte de que "se queda muy corto": "Sería bueno que hubiera invocado los Pactos de la Moncloa, como en la transición, que lo instrumente con unos pactos con la oposición de ese calado".

El propio presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, pidió el pasado jueves, día en que estalló la guerra en Ucrania, un «pacto de Estado entre el partido de la oposición y el Gobierno» para salvar la economía. «El tema de Ucrania es muy complicado y es clave el diálogo y el sentido de Estado entre los dos grandes partidos llamados a gobernar», comentó entonces.

"Dejemos de indexar a precios o salarios, que no hace más que cebar el problema, y ya ha durando mucho. Ahora el riesgo es que se enquiste severamente, hay que descontar las escalas móviles, como se hizo con el precio del petróleo en el siglo pasado", reclama Herce. Todo esto, avisa, con el escenario de indexación a las pensiones y lo que puede suponer si no contenemos la inflación.

"Esperemos que no lleguemos a dos dígitos, como suceda y queramos repercutirlo, contribuiremos a la desgracia, qué menos que sufrir un poco de inflación y afrontar y asumir el coste", subraya e insta a "quitarnos lujos, cuando en Ucrania no pueden permitirse salir del búnker". "Sin los Pactos de la Moncloa habríamos destruido la democracia, con una inflación del 27%", insiste.

Sin embargo, José Antonio Herce no es partidario de bajar impuestos ahora: "Cuanto menos se desmonte la capacidad de recaudar, mejor, el Estado no se puede permitir renunciar a un sólo euro por si es necesario ampliar los ERTE", considera, lo que destaca que "paga la clase media". Sánchez ha reclamado a la Comisión Europea una revisión de las reglas fiscales, ya que aboga por un sistema más laxo de control de déficit, deuda y gasto para 2023 a la carta y en el que se tengan en cuenta las inversiones verdes.

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