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Economía

El Gobierno legisla contra los algoritmos de Amazon y Uber que 'vigilan' a los trabajadores

A partir de ahora, las organizaciones que utilicen algoritmos tendrán que informar a sus trabajadores de los términos en que se usan

Imagen de archivo de un repartidor de Deliveroo.

El Gobierno ha modificado el Estatuto de los Trabajadores para adaptarlo a los nuevos tiempos, en los que la Inteligencia Artificial y los algoritmos comienzan a estar cada vez más presentes en la vida y en el trabajo.

Se trata de soluciones que utilizan generalmente empresas con una carga tecnológica muy alta, caso de Amazon, Derliveroo o Uber, por citar algunas. A partir de ahora, las organizaciones que utilicen algoritmos o Inteligencia Artificial tendrán que informar a sus trabajadores de los términos en que se usan y de qué manera se rigen, para tener claro cómo les afectan.

Y será así por un cambio en el Estatuto de los trabajadores que refleja que "se modifica el artículo 64, relativo a los derechos de información y consulta de la representación legal de las personas trabajadoras añadiendo un nuevo párrafo d) a su apartado 4, en el que se reconoce el derecho del comité de empresa a ser informado por la empresa de los parámetros, reglas e instrucciones en los que se basan los algoritmos o sistemas de Inteligencia Artificial que afectan a la toma de decisiones que pueden incidir en las condiciones de trabajo, el acceso y mantenimiento del empleo, incluida la elaboración de perfiles".

Hace un par de meses la autoridad italiana de Protección de Datos (el equivalente en ese país a la Agencia Española de Protección de Datos) sancionó a la compañía británica de reparto de comida Deliveroo por no ser transparente con sus trabajadores en lo referente al algoritmo utilizado.

Operaciones en Reino Unido, Francia y más países

Deliveroo mantiene operaciones en Reino Unido, Países Bajos, Francia, Bélgica, Irlanda, España, Italia, Australia, Singapur, Emiratos Árabes Unidos y China. La multa fue de 2,5 millones de euros y, en concreto, se alude en la resolución a la falta de transparencia de los algoritmos para asignar las órdenes de reparto y reservar los turnos de trabajo -de estos dos factores depende la remuneración de los riders.

Deliveroo efectúa un minucioso control sobre la prestación laboral de los riders mediante la continua geolocalización de su dispositivo, que "va más allá de lo necesario para asignar al orden (por ejemplo, detección cada 12 segundos de la posición, conservación de todos los pasos por 6 meses) – y mediante la conservación de una elevada multitud de los órdenes, entre cuales también las comunicaciones con la protección del cliente. El sistema recoge de hecho datos relativos a desviaciones de poco minutos respeto a los tiempos estimados (por ejemplo, retirada de la comida desde el restaurante o entrega al cliente) o predeterminados (por ejemplo, el tiempo de movimiento del rider desde el lugar en el cual ha aceptado la entrega)", asegura Gonzalo Oliver Martín, asesor jurídico en materia de Privacidad y Protección de Datos, en Ozonia Consultores. Además, es socio de la Asociación Española de Delegados de Protección de Datos.

En el caso de Amazon, hace sólo unos meses un empleado de la empresa norteamericana declaró a Bloomberg que el gigante del e-commerce había decidido prescindir de sus servicios mediante un correo automático, generado después de que la Inteligencia Artificial de la compañía considerase que su trabajo no se desarrollaba correctamente. No le van mejor las cosas a Uber, que el verano pasado recibía dos denuncias de trabajadores que querían entender mejor los algoritmos para conocer de qué manera determinaban su trabajo y condiciones laborales.

Algoritmos que discriminan

El Gobierno ha realizado la modificación en el Estatuto de los Trabajadores para tratar de evitar problemas como los antes expuestos. “Es importante ese cambio del Estatuto de Trabajadores, ya que pone límites al uso de algoritmos e inteligencia artificial por parte de grandes empresas como Amazon, Uber o Glovo”, subraya Oliver, que añade que “el desarrollo exponencial en el uso de algoritmos e Inteligencia Artificial a la hora de tomar decisiones ha derivado en todo tipo de problemas legales: discriminación, decisiones injustas, o denegaciones de un servicio o producto por parte de una máquina. En el Reglamento General de Protección de Datos los ciudadanos tienen una gran defensa, concretamente, en su artículo 22”.

Oliver finaliza animando a denunciar situaciones injustas. “En cualquier momento, cuando el trabajador o representantes sindicales vean que las medidas adoptadas a través de algoritmos e Inteligencia Artificial no cumplan con las normativas ni con el triple juicio constitucional; juicio de proporcionalidad, idoneidad y necesidad, pueden y deben de acudir a la autoridad de control, Agencia Española de Protección de Datos, para denunciar los hechos, como ha ocurrido en Italia con Deliveroo“.

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