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Banca

El Gobierno sacrifica un puesto clave en el BCE para despejar el camino a Calviño en el BEI

El puesto que ha perdido Delgado tiene mucha más influencia que el BEI. El Ejecutivo también deja de lado la candidatura de Madrid como sede de la Autoridad Europea AntiBlanqueo

Calviño
Nadia Calviño, vicepresidenta primera del Gobierno. APIE

España se ha quedado este miércoles sin uno de los puestos más codiciados en el sector bancario europeo. El Banco Central Europeo (BCE) descartó a Margarita Delgado, subgobernadora del Banco de España, como la nueva jefa de supervisión del organismo monetario y eligió en su lugar a la alemana Claudia Buch, vicepresidenta del Bundesbank. La sensación más extendida es que el Gobierno no ha echado el resto para apoyar el salto de Delgado al supervisor único y así no entorpecer las aspiraciones de Nadia Calviño de presidir el Banco Europeo de Inversiones (BEI), como señalan a Vozpópuli distintas fuentes financieras y comunitarias.

"El Gobierno ha respaldado a Delgado. El problema ha sido que la candidatura de Calviño al BEI le ha restado capacidad de presión", resumen fuentes próximas al BCE. Delgado partía como favorita tras el apoyo unánime del Parlamento Europeo en julio. Se avalaba sobre todo su perfil técnico y su larga trayectoria en supervisión, con más de 30 años de experiencia.

"La candidatura de Calviño al BEI ha terminado de rematar a Margarita Delgado, señalan fuentes próximas al BCE

Aunque finalmente el equilibrio de fuerzas entre las potencias europeas había complicado su elección, con Alemania, Francia e Italia apoyando a la candidata alemana, como indican las fuentes. "La candidatura de Caviño ha rematado a Delgado", señala otro alto directivo conocedor de los entresijos del BCE.

Fuentes comunitarias mostraban sorpresa con la candidatura de Calviño para el BEI, designada por un Gobierno en funciones, lo que les parece que sobrepasa sus capacidades, y cuando España ya concurría al BCE y para albergar la sede de la Autoridad Europea contra el Blanqueo de Capitales (AMLA, por sus siglas en inglés). Una pugna por la que han trabajado el Ayuntamiento de Madrid y el PP. Y después de que Calviño pareciera descartarse a sí misma en junio.

"Estoy absolutamente comprometida con el proyecto que lidera Pedro Sánchez […] España tiene personas con un extraordinario talento y, por supuesto, presentaremos en tiempo y forma a un candidato óptimo para presidir el Banco Europeo de Inversiones", dijo el 15 de junio, con el Gobierno todavía en plenas facultades, pero ya en precampaña electoral.

Estas fuentes también han dado cuenta de que estos elementos, junto con el polémico intento de Calviño de colocar a su marido en Patrimonio Nacional, están siendo analizados por los ministros de Economía que van a debatir sobre las candidaturas a la Presidencia del BEI este viernes y sábado en Santiago de Compostela. Vozpópuli ha desvelado este lunes que Calviño colocó a su hijo recién licenciado en otro banco público, el BERD, del que es gobernadora.

En cualquier caso, el ascenso frustado de Delgado da más posibilidades a Calviño para liderar el Banco Europeo de Inversiones. Desde que arrancara la carrera por presidir el Mecanismo Único de Supervisión (MUS), el área de la autoridad monetaria encargada de supervisar a los 109 bancos más grandes de Europa, en los círculos financieros se dudaba del apoyo sin fisuras del Gobierno de Pedro Sánchez para no interferir en las aspiraciones de la vicepresidenta económica.

El BEI: con menos relevancia

"Se ha echado en falta más presión a favor de la subgobernadora. Calviño no podía presionar en exceso para que España se quedara con el puesto en el BCE porque, obviamente, le perjudicaría para el BEI", coinciden distintas fuentes financieras. En el sector financiero se lamenta que se haya perdido la oportunidad de que España ocupe un puesto clave en Francfort en detrimento de otro "con mucha menos importancia", como es la presidencia del BEI, indican las fuentes consultadas.

Otras voces subrayan la importancia de que Madrid consiguiera ser la sede de la Autoridad Europea contra el Blanqueo de Capitales, que ven en peligro.

Las aspiraciones de Calviñó se cruzaron con las de la subgobernadora en pleno agosto. El día 11 de ese mes el Gobierno en funciones anunciaba la candidatura de la vicepresidenta a presidir el BEI.

"Cualquier otro candidato hubiese supuesto dar la batalla por perdida", proclamaba Calviño tras el anuncio. Menos de dos meses antes, sugería que iba a nombrar a un candidato diferente a sí misma.

Dudas en el seno del Banco de España

Lo cierto es que tras la candidatura oficial de la vicepresidenta, Delgado ha ido perdiendo fuerza para suceder al italiano Andrea Enria al frente del brazo supervisor del BCE a medida que crecían las posibilidades de Calviño para el BEI.

Tras una vista preliminar a puerta cerrada para examinar a Delgado y Buch, la subgobernadora recibía el apoyo unánime del Parlamento Europeo. De hecho, como publicó este medio, Delgado transmitía a su círculo más cercano que se veía con "altas probabilidades" de dar el salto al BCE.

De todas formas, en el seno del Banco de España dudaban de las verdaderas intenciones de la subgobernadora y apuntaban a que aspira realmente a tomar el testigo del gobernador, Pablo Hernández de Cos, como advierten fuentes internas del supervisor nacional. Tanto Delgado como Hernández de Cos terminan su mandato el próximo año.

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