Los fundadores de Codere calientan la Junta del grupo: "Habrá consecuencias legales"

Codere, la única compañía de juego española cotizada, celebra este martes Junta de accionistas con sus fundadores, la familia Martínez Sampedro, dispuestos a llevar hasta el final su cruzada contra los fondos estadounidenses que controlan la mayoría del capital.

Los fondos, liderados por Silver Point, han decidido traspasar la propiedad de la compañía a los principales acreedores del grupo, los bonistas, para asegurar la viabilidad del negocio, lo que supondrá que Codere será liquidada y excluida de Bolsa. Los Martínez Sampedro advierten a los accionistas de la compañía que dicha operación acabará en los tribunales.

Los fundadores de Codere llevan más de dos años requiriendo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que exija a los fondos el lanzamiento de una oferta por el 100% del capital, valorada en 900 millones de euros, al haber actuado, defienden, de forma concertada para tomar el control del grupo, lo que les obligaría a lanzar una OPA.

Los Martínez Sampedro requieren el informe de valoración que justifique la reestructuración acordada

El regulador del mercado español, como ha publicado Vozpópuli, ha archivado las demandas de los Martínez Sampedro quienes, a pesar de la negativa de la CNMV, han seguido aportando pruebas recabadas en Estados Unidos de esa supuesta concertación.

De cara a la Junta de accionistas que celebra hoy el grupo de juego español, los Martínez Sampedro advierten que la aprobación de los dos primeros puntos del orden del día, referidos a ese acuerdo de reestructuración, podría suponer una ilegalidad y que incurriría en responsabilidades ante la Justicia, de acuerdo a fuentes cercanas al consejo de administración de la empresa.

A través de Masampe, la sociedad mediante la que la familia española mantiene un 14% del capital, han solicitado el informe de valoración que justifique la ecuación de canje prevista. Esa operación, advierten, pretende acometer un canje de deuda por capital que, a la postre, supondrá la dilución del 95% de la deuda, capitalizando 350 millones de euros, y otorgando el control efectivo de la compañía a los acreedores.

El expresidente José Antonio Martínez Sampedro, advierte que el plan de reestructuración tendrá consecuencias legales

Además subrayan que los actuales administradores de Codere no han previsto solicitar medidas de aplazamiento de las obligaciones financieras del grupo con los acreedores por causas de fuerza mayor, debidas a la pandemia. Y señalan que la información legal sobre la Junta remitida por los gestores de la compañía a los accionistas utiliza el idioma inglés como único vehículo de comunicación.

Las mismas fuentes consultadas indican que el expresidente de Codere, José Antonio Martínez Sampedro, sostiene que la aprobación del plan de reestructuración diseñado tendrá consecuencias legales dado el perjuicio que supone para los accionistas minoritarios.

Conspiración civil

Los Martínez Sampedro iniciaron hace dos años en Estados Unidos un discovery, procedimiento que obliga a los demandados a presentar todo tipo de comunicaciones mantenidas entre ellos y sus abogados.

Los fundadores del grupo han incluido un punto en el orden del día para dar a conocer nuevas pruebas de concertación

Recientemente la familia española ha aportado el dictamen "de una prestigiosa firma de abogados estadounidense", según el cual "ha existido algún tipo de conspiración civil para organizar desde Estados Unidos la toma de control de Codere sin presentar una OPA forzosa".

Los fondos "en secreto, urdieron y planearon un esquema, presentado como un plan de transición que impulsó cambios fundamentales en la estructura y el negocio de Codere", aseguran los Martínez Sampedro. Esos cambios incluían la rescisión de José Antonio Martínez Sampedro como presidente de la Compañía, y de su hermano, Luis Javier Martínez Sampedro, como vicepresidente, así como el nombramiento de Vicente Di Loreto como director general de Codere.

En la Junta que celebra hoy Codere los accionistas españoles han logrado incluir un punto en el orden del día en el que se dará publicidad a esa nueva documentación conseguida en Estados Unidos.