Laporta pide margen a CVC para cuadrar cuentas y pujar por Haaland

No sería suficiente pero, a estas alturas, lo mínimo necesario. Así se manifiestan las fuentes consultadas sobre un eventual acuerdo entre el F.C. Barcelona y el fondo CVC Capital Partners como socio inversor de La Liga, y su vinculación con el fichaje del noruego Erling Haaland este verano.

"El Barça está muy complicado, necesita liquidez con urgencia, y la opción de pactar con CVC ya no se puede descartar", enuncia una de las fuentes consultadas. Otra de ellas incide en que la operación, por su impacto en el margen salarial, abriría un pequeño hilo de esperanza para que el club consume la llegada de una estrella mundial como Haaland este verano, si bien "necesitarían más cosas a parte de entrar en CVC", según fuentes conocedoras de las conversaciones.

En cualquier caso, lo que parece claro a estas alturas es que la Ejecutiva de Laporta nunca estuvo tan cerca de pactar con el fondo de inversión. Como informó este diario, los culés enviaron ya la semana pasada una delegación a las primeras sesiones de trabajo de La Liga Impulso, la entidad que canaliza la alianza de La Liga con CVC. Así, el club blaugrana se desmarcó de la oposición frontal al acuerdo que lidera el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez.

La primera resolución de la jueza en el proceso de Madrid y Barça contra Tebas-CVC, oponiéndose a suspender cauteralmente el acuerdo, no estaba en los planes de los demandantes, que tendrán 20 días para decidir si apelan la resolución o no.

Florentino, como líder de la Superliga, perdió algo de confianza en el Barça desde la salida de la ejecutiva de (Ferran) Reverter

"Esperaban obtener las cautelares, claramente, ha sido un revés duro", señalan fuentes cercanas. "No obstante, las grietas vienen de algo más lejos. Florentino, como líder de la Superliga, perdió algo de confianza en el Barça desde la salida de la Ejecutiva de (Ferran) Reverter. Se sigue creyendo que seguirán en la Superliga. Key Capital -la firma de inversión de cabecera de Pérez-, les ha ayudado a desarrollar su plan de negocio, pero ya no se puede descartar que pacten ahora con CVC por sus urgencias, Laporta y Tebas se han acercado", añaden los mismos informantes. Otras fuentes cercanas al frente de Florentino han incidido en la relación de confianza entre el director deportivo culé, Mateu Alemany, y el presidente de la patronal de los clubes.

Lo cierto es que ahora las conversaciones se mantienen directamente entre el Barça y CVC, como ya sucediera en la antesala del pasado mercado invernal de fichajes. Con el acuerdo base del fondo con La Liga, el club blaugrana podría destinar, entre esta temporada y la siguiente, 190 millones a infraestructuras. Para reducir deuda solo podría usar unos 40 millones, al igual que para incorporar jugadores, una cifra que no alcanzaría para contratar a Haaland (con una cláusula de unos 75 millones este verano). Pero las cosas podrían cambiar dependiendo del impacto que se traslade al balance del club y, por tanto, al margen salarial -una cantidad que podría acabar siendo superior a los 100 millones-.

El Barça reclama que se ajusten sus obligaciones con La Liga y CVC a su propia naturaleza social y proyección comercial

Hasta ahora, la Junta de Laporta y, sobre todo, el equipo económico de Reverter, se han opuesto a la operación por entender que supondría valorar sus derechos televisivos muy por debajo de su valor a favor de casi el 10% para el fondo durante 50 años. El Barça ha venido reclamando además que se ajusten sus obligaciones con La Liga y CVC a su propia naturaleza social -no es una sociedad anónima/mercantil, como la mayoría de los demás clubes- y a su proyección comercial -exponencialmente superior-.

Según precisaron el periódico Sport de Barcelona y el portal 2Playbook, los culés negocian con el fondo articular la inyección no como un préstamo participativo a través de La Liga sino a través de una nueva sociedad a la que el Barça traspasaría la propiedad de sus derechos audiovisuales y dentro de la que se daría entrada al fondo. Esta operación permitiría a los blaugrana computar todo el dinero -270 millones- como ingresos extraordinarios ya de esta temporada. Así conseguirían salvar las cuentas del actual ejercicio, ahora expuestas a un roto de 100 millones de euros por la temprana eliminación de la Champions League, y aumentar de forma sideral un margen salarial que han venido recuperando parcialmente a base de reducciones y renovaciones.

Desde CVC negaron en el pasado que el equipo blaugrana fuera a entrar en condiciones diferentes a los demás clubes -desde la patronal se han remitido al fondo-, y ahora han preferido no hacer comentarios más allá de ceñirse a lo que estime oportuno comunicar finalmente el Barça. Como informó este medio, el propio CVC ha empezado a hacer uso de su peso en La Liga para tratar de conseguir que esta aligere los límites salariales, con especial atención a la competitividad de los clubes más grandes.

El sueño de Haaland post CVC-Liga

Las negociaciones entre Laporta y CVC-Liga no están cerradas, pero de cara a un hipotético fichaje de Haaland, existen ciertos argumentos a favor de una mínima ilusión blaugrana. El principal es la singular relación del presidente culé con el representante del noruego, Mino Raiola, con quien ha mantenido reuniones en los últimos meses.

El segundo está en un pequeño obstáculo a resolver por uno de los grandes competidores por el joven delantero, el propio Real Madrid. Los merengues tienen capacidad financiera suficiente para afrontar su fichaje en paralelo al del francés Kylian Mbappé, pero no están por la labor de negociar en exceso comisiones con Raiola y el padre de Haaland.

Además, fuentes cercanas al equipo blanco inciden en que la prioridad es el galo, con quien ya hay un pre-acuerdo firmado, y que una de las claves para su llegada pasa por la continuidad de su compatriota, el delantero Karim Benzema. Este extremo es otro factor en contra de la llegada de Haaland, también atacante, al Madrid en este verano. Lo que no quita que el equipo que preside Florentino Pérez sigue teniendo un margen de negociación cuantitativamente superior al del Barcelona.