La inflación y el tirón del consumo elevan un 36% el gasto de las familias en Navidad

Estas navidades se ha creado el cóctel "perfecto", con excepciones a la palabra, para el consumo. La subida de precios por la inflación unido a un paradójico buen ánimo de la sociedad dispuesta a gastar ha llevado a que el consumo aumente durante estas fiestas hasta un 36% más que el año pasado.

En 2022 las familias en España destinaron una media de 299 euros para las compras de Navidad. Este recién terminado año, en cambio, el presupuesto navideño ha llegado de media, y según los propios consumidores, a los 410 euros. Estos son los resultados que se desprenden una encuesta realizada por Milanuncios y Appinio, una agencia de investigación del mercado.

El gasto que más aprieta a las familias es el de la alimentación, al ser el sector más importante y de los que más ha subido sus precios. En el mes de noviembre de 2023, el último mes en el que se actualizaron datos, los alimentos habían subido un 9% con respecto a noviembre del año anterior. Los juguetes, otra compra muy típica en estas fechas, solo han subido un 0,3%; y la ropa un 2,2%. Teniendo en cuanta estos niveles de inflación y sabiendo que el que más ha subido es el sector de la alimentación, se deduce que gran parte de ese 36% de aumento de consumo tiene más que ver con una mejora en el ánimo social.

El alto gasto en consumo impide el ahorro

Sin embargo, este hecho choca con la poca capacidad de las familias españolas para generar ahorro. Desde que comenzara la pandemia, una buena parte de los españoles no ha parado de perder poder adquisitivo. La propia tensión económica que se generó por la covid, que llevó a miles de familias a tener que recurrir a ahorros, unida a la fuerte inflación que vivimos desde hace años, ha provocado que ahora menos de uno de cada cuatro hogares sean capaces de generar ahorro a final de mes. Así se desprende del 'Informe Europeo de Pagos de Consumidores' elaborado anualmente por Intrum.

Una de las preguntas que se planteaba en el estudio es si al final de cada mes los consumidores han gastado más, menos o igual que lo que han ingresado. La estimación es que el 48% de ellos gasta lo mismo que gana; un 28% tiene que recurrir a ahorros o a ayudas porque gasta más de lo que genera; y sólo el 24% de ellos es capaz de gastar menos de lo que ingresa.

Compramos más de lo que necesitamos

Por otro lado, este citado aumento del consumo tiene una consecuencia colateral: gastamos de más, no solo en términos de dinero, sino también en términos de cantidad. Según la encuesta de Appinio y Milanuncios, el 69% de los españoles afirma recibir algún regalo en Navidad que no quiere quedarse. Concretamente, ropa, complementos y perfumes son los regalos en los que menos aciertan los españoles.

De hecho, hasta un 49% de los consumidores consultados afirman haber revendido en alguna ocasión los regalos que no les gustaron después de las festividades. En cuanto a los motivos que les ha llevado tomar esta decisión, el 42% de ellos aseguran que no les servían los productos que han recibido o que no funcionaban bien y un 18% está dispuesto a hacerlo este año. Por su parte, el 37% afirma deshacerse del regalo ya que no iba a darle ningún uso.

"Hay una gran cantidad de regalos que se quedan guardados en un cajón sin ser utilizados nunca. Sin embargo, cada vez más personas deciden darle una segunda vida a esos productos y venderlos en aplicaciones de segunda mano", explica Íñigo Vallejo, portavoz de Milanuncios.

Se presenta así un bucle incoherente: compramos mucho más, pero sin acierto e impidiéndonos a nosotros mismos generar ahorro.