¿Adiós al Casino de La Toja? Los planes de Feijóo amenazan a la mítica sala gallega

En la isla de La Toja, en Pontevedra, apenas viven 49 personas. Pero tienen hoteles, restaurantes, balnearios y un famoso Casino. Ahora, los planes de la Xunta de Galicia complica el futuro de la mítica sala de juegos.

Fundado en 1978, el Casino de La Toja fue uno de los símbolos de los años de esplendor de esta pequeña isla de las Rías Bajas. Desde 2009, pertenece a partes iguales a las compañías del juego Cirsa y Luckia, aunque de la gestión sólo se encarga Luckia.

Además de las restricciones impuestas durante la pandemia, el casino no ha sido capaz de remontar el vuelo en los últimos meses, según viene informando el Faro de Vigo. La normativa que ultima el Ejecutivo gallego podría asestar el golpe final al salón de La Toja.

En concreto, el borrador de la nueva legislación establece para los casinos una concesión máxima de 15 años que empezarán a correr cuando la norma entre en vigor. En el caso de que la sociedad que gestiona el Casino decidiera disolverse, el salón cerrará de forma inmediata, sin posibilidad de reabrir.

El documento sólo permite autorizar un casino por provincia, y siempre que esté rodeado por más de 300.000 habitantes en un radio de 25 kilómetros. Este límite ya se recoge en el artículo 8 de la Ley 14/1985, la normativa actual. De hecho, no se ha realizado ninguna modificación en la redacción del borrador en este sentido.

La futura norma sí que permite la instalación de salas adicionales dentro de la misma provincia. El Casino de La Toja cuenta con una sala adicional en Vigo, que en los últimos años ha ganado más peso en Galicia. En todo caso, según la nueva normativa, las salas adicionales no pueden superar el 80% del número de mesas del casino matriz.

En la actualidad, se está tramitando el texto dictaminado por la Comisión del Juego, la Comisión Gallega de la Competencia y el Consejo Económico y Social. El borrador se encuentra en exposición pública en el portal web de la Unión Europea. Después de este paso, el Consello de la Xunta aprobará el proyecto de Ley y se presentará en el Parlamento gallego.

La Xunta ya ha presentado el texto a los representantes del sector y a los sindicatos. Desde Luckia rechazan valorar la normativa en público hasta que se conozca el texto final. La Asociación Gallega de Empresas Operadoras (AGEO) tampoco ha querido hacer comentarios.

La Toja: de las aguas termales a los 'años de oro'

A La Toja se llega en coche cruzando un puente de casi 360 metros. El pasado de la isla se conoce por el trabajo de personas como Francisco Meis Durán, investigador de la historia de O Grove. El interés por la isla, según contó al Diario de Pontevedra, comenzó a principios del siglo XIX gracias a sus aguas termales. Un grupo de empresarios fundó en 1941 la primera sociedad para explotar estas "aguas milagrosas".

La Toja fue ganando fama fuera de Galicia. El salto definitivo se dio a principios del siglo XX, cuando el empresario Laureano Salgado y el farmacéutico Fernando Rodríguez Porrero compraron las fincas de la isla y formaron la Sociedad Anónima La Toja. También entró en el negocio el marqués de Riestra como presidente del balneario. En los siguientes años se inauguró la Fábrica de Jabones, el Gran Hotel, el primer puente y el campo de golf.

El Casino, sin embargo, no llegó hasta 1978. Se instaló en una casa gallega de dos plantas y mil metros cuadrados con acceso a las principales zonas de playa de la isla. Según su página web se trata del "primer casino español". El salón pontevedrés quería cumplir las normas de juego. Sus responsables pidieron asesoramiento al casino de Estoril. Una ayuda que molestó a ciertos sectores que rechazaban las técnicas de los establecimientos portugueses.

El 2 de junio de 1978 fue el día del gran estreno. La noticia de El País destacó como la "tradición de juego encubierto de la isla, conocida ya de antiguo por los jugadores e incluso por algunos políticos que se hacían los sordos, hizo que aunque no se diera publicidad a la apertura muchos vecinos y extranjeros se reunieran" alrededor de las ruletas francesas, americanas o en torno a las mesas de baccara-chemin de fer. La sala arrancó con 120 empleados. La gran mayoría eran vecinos de pueblos vecinos, pero también contó con seis trabajadores portugueses.

Declive

El casino fue el símbolo de los mejores años de la isla. Pero la situación ha cambiado en los últimos tiempos. El comité de empresa lleva meses alertando en la prensa local que se está dejando morir la sala de La Toja en favor de la de Vigo.

Según el Faro de Vigo, en el Casino de La Toja quedan un puñado de máquinas tragaperras y de apuestas deportivas y un par de mesas de juego. También quedan menos empleados en plantilla debido a las jubilaciones anticipadas, la finalización de contratos y el traslado de trabajadores a la sala anexa de Vigo.

La situación no habría mejorado pese al impulso hotelero de este verano en Galicia y la comarca. Una empleada denunció que durante el último periodo estival apenas fueron diez trabajadores para atender el salón de La Toja, cuando "hace unos años" eran "unos 70 empleados, y entre 100 y 150 hasta hace una década". El Casino, además, cerraba en verano dos días a la semana, algo que en el pasado sólo ocurría "un par de días al año".

Preguntada por Vozpópuli, la empresa gestora prefiere no valorar ninguna de las informaciones sobre la situación laboral del Casino de La Toja.

Rajoy y González, en la isla

Cabe recordar que hace apenas unas semanas, entre el 29 de septiembre y el 1 de octubre, la isla celebró la III Edición del Foro La Toja. La cita se celebró en el centenario Gran Hotel de La Toja, que hoy gestiona el Grupo Hotusa, y que está situado a cinco minutos a pie del Casino.

La cita reunió a varios altos cargos políticos del país, como el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, los ministros Nadia Calviño (Asuntos Económicos) y José Manuel Albares (Exteriores) y a varios dirigentes autonómicos. También participaron los expresidentes Felipe González y Mariano Rajoy, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, o el primer ministro portugués, Antonio Costa.

Durante el Foro, presidido por Josep Piqué, se abordaron temas como la financiación de las autonomías, el futuro del empleo, la recuperación, la digitalización o la situación de Afganistán.