La UE certifica el fracaso del canon AEDE impulsado por el PP de Soraya

Europa ha alcanzado un acuerdo en los llamados trílogos en los que el Parlamento, la Comisión y el Consejo, debaten la futura ley de Copyright que deberá aplicarse en toda la Unión Europea. Un reglamento que pone en entredicho a su equivalente español, el canon AEDE. Soraya Sáenz de Santamaría se encargó en gran medida del canon, que se aprobó en octubre de 2014 con Mariano Rajoy como presidente.

La ley europea debatida en los trílogos contempla dos artículos, el 11 y el 13, que han enfrentado a gran parte de la comunidad internauta y los medios nativos digitales con los grandes lobbys periodísticos.

En concreto, el Artículo 11 pretende imponer la llamada tasa al enlace. Todo aquel agregador de noticias -como puede ser Menéame- que haga uso de informaciones de medios mediante enlaces o sus textos tendrá que pagar un canon a dichos medios de comunicación a través de las entidades de gestión -caso de CEDRO en España, la asociación de autores y editores de libros, revistas, periódicos y partituras-.

El Gobiermo español de entonces se equivocó y aprobó el canon AEDE de forma unilateral. Ninguna empresa o medio de comunicación ha cobrado el canon, nunca se ha redactado un reglamento, ni el Ministerio de Cultura ha fijado unas tarifas al respecto"

Muchos medios, especialmente los nacidos en Internet, se han mostrado en contra de esta medida porque ven amenazada su audiencia, dado que sus noticias no se compartirán de igual forma si los portales que las aglutinan han de pagar por ello. Se da la circunstancia de que, además, no se permite a los medios de comunicación renunciar al cobro del canon.

Esta regulación que hoy se debate en Europa se aprobó en España hace cinco años con el nombre de canon AEDE (en referencia a la Asociación de Editores de Diarios Españoles). Salió adelante de forma unilateral con el PP de Mariano Rajoy en el Gobierno, quien tuvo que hacer uso de su mayoría parlamentaria, puesto que no había consenso entre los partidos.

Soraya Sáenz de Santamaría fue la encargada de cincelar la regulación -con José Ignacio Wert como ministro de Cultura-. Se impusieron en ella dos de los conceptos más controvertidos: la imposibilidad de que los medios renuncien al cobro de la tasa y la prohibición de usar pequeñas porciones de los artículos periodísticos.

El canon AEDE fue aprobado por el PP gracias a su mayoría. El resto de partidos se manifestaron contrarios al mismo

Esos dos conceptos son precisamente los que se han tumbado en los trílogos llevados a cabo en Bruselas antes de la aprobación de la ley de Copyright. Aunque habrá tasa al enlace, los medios podrán renunciar a su cobro, y los agregadores podrán utilizar frases cortas de artículos periodísticos. Una decisión que pone en entredicho la aprobación del canon AEDE elaborado, en parte, por Soraya Sáenz de Santamaría.

"Europa se ha dado cuenta de nuevo de que no puede frenar la innovación, aunque a algunos grandes grupos mediáticos les vaya bien. Se intentó poner puertas al campo al no dejar a los medios renunciar al cobro de un canon. Cada medio debería ser propietario de sus derechos y decidir si quieres dar gratis su contenido o cobrar 5, 50 ó 500 euros por el mismo. Es la libertad de empresa", asevera Carlos Astiz, secretario general de la Asociación Española de Editoriales de Publicaciones Periódicas (AEEPP).

Google News dejó España

La aprobación del canon AEDE en octubre de 2014 provocó de forma automática la salida de España de Google News, el agregador de noticias de la compañía norteamericana.

"El Gobiermo español de entonces se equivocó. El mundo va por otro lado. Lo que  tenemos que plantearnos es por qué precisamente España y Corea del Norte son los países donde Google News no funciona. Hubo una gran movilización contra el Canon AEDE, todos los partidos políticos votaron en contra salvo el PP, que lo sacó con su mayoría. Ninguna empresa o medio de comunicación ha cobrado el canon, nunca se ha redactado un reglamento, ni el Ministerio de Cultura ha fijado unas tarifas al respecto.