El príncipe Harry testifica en el juicio contra la prensa británica tras dar plantón al juez en la primera sesión

Londres vuelve a acaparar la atención de la prensa internacional al acoger un histórico juicio contra la prensa británica con el príncipe Harry a la cabeza. Así, el hijo del rey Carlos III de Inglaterra vuelve a centrar todas las miradas por su lucha contra los medios que, según asegura, durante años utilizaron métodos legales para obtener información suya. A primera hora de la mañana, el duque de Sussex llegaba al Tribunal Superior de Londres para testificar, en una jornada que se espera intensa, y tras haber dado plantón al juez en la jornada anterior.

Dispuesto a defender su derecho a la intimidad, el príncipe Harry interpuso una querella contra la empresa ‘Mirror Group Newspapers’ (MGN), propietaria de reconocidas cabeceras como ‘Sunday Mirror’, 'Sunday People’ o ‘Daily Mirror’, a la que acusa de conseguir información suya de manera ilegal, como pinchar teléfonos privados o contratar detectives. Algo que su abogado, David Sherborne, trata de demostrar que se llevó a cabo con el conocimiento y aprobación de los editores responsables.

El príncipe Harry testifica en Londres en el caso de las escuchas ilegales

Tal y como ha confirmado la Agencia EFE, a las 08:39 hora de Londres, el príncipe Harry llegaba en un coche negro a la corte británica donde le esperaban numerosos medios y curiosos. Algo que ya ocurrió en el día de ayer, cuando se esperaba la presencia del hijo del rey Carlos. Sin embargo, y para sorpresa del juez Timothy Fancourt, este no apareció.

Una ausencia cuestionada y criticada por el abogado de MGN que su letrado trataba de defender argumentando que aunque el Duque había volado desde Los Ángeles el domingo por la noche, después de celebrar el cumpleaños de su hija Lilibet, no estaba disponible para declarar el lunes: “Sus arreglos de viaje y de seguridad son tales que es un poco complicado”, apuntó Sherborne en la abarrotada sala del tribunal.

Así, tras las duras críticas recibidas por el plantón al juez, el príncipe Harry se ha personado en el Tribunal Superior de Londres para tratar de demostrar las medidas ilegales que supuestamente utilizaron los periodistas del famoso grupo mediático entre los años 1996 y 2010. Un total de 140 artículos que, de los que, tal y como apunta EFE, 33 serán tenido en cuenta durante este juicio.

Unas duras acusaciones que MGN, que al inicio de este proceso reconoció “algunos indicios” de recopilación ilícita de información puntual, por lo que pidió disculpas asegurando no se volvería a repetir, niega.

Quinto en la línea de sucesión al trono, el príncipe Harry se convierte en el primer miembro de la realeza británica en declarar en un juicio desde 1891, cuando Eduardo VII, antes de convertirse en monarca, lo hiciera por difamación.

Pero este no es el primer paso de su batalla legal contra la prensa británica. El pasado mes de marzo, el príncipe Harry apareció por sorpresa en la vista preliminar de otro juicio por supuestas prácticas ilegales que mantiene con otro grupo mediático, 'Associated Newspapers', dueño de, entre otros, el famoso 'Daily Mail'. Una causa a la que se le han unido famosos como Elton John y Elizabeth Hurley.

Máxima expectación por la presencia del príncipe Harry en Londres

Como es de imaginar, la presencia del príncipe Harry en Inglaterra ha despertado mucha expectación. Y no solo por la gravedad de las acusaciones. Una vez más, el duque de Sussex regresa a Londres tras su polémica renuncia a sus obligaciones y privilegios como miembro de la familia real que le llevó a instalarse en Estados Unidos en 2020.

El pasado 6 de mayo, el príncipe Harry asistió a la coronación de su padre, el rey Carlos III. Lo hizo sin su mujer, Meghan Markle, y relegado a un discretísimo segundo plano que volvía a dejar en evidencia la mala relación que mantiene con su familia.

Aunque se desconoce el tiempo que pasará en esta ocasión en Londres, ni ha trascendido si se reunirá con alguien de la familia real británica, el príncipe Harry tendrá que testificar durante dos días, tras los que probablemente volverá a marcharse rápidamente junto a su mujer y sus dos hijos, y dejando en el aire su siguiente regreso.