Guerra abierta entre CSD y ACB por la inclusión del Ourense en la Liga Endesa

Con el calendario de una temporada de Liga Endesa que empezaría el 10 de octubre ya publicado, el baloncesto español continúa pendiente de saber si su máxima división contará o no con el Ourense Baloncesto, protagonista de un ascenso de nunca acabar. 

Tras la firme negativa de la ACB a su inscripción, el presidente del CSD, Miguel Cardenal, ha criticado un dictamen que responde, a su juicio, a "intereses" por "cerrar" la competición. Cardenal, además, ha recordado que las competencias de la Asociación de Clubes son "delegadas" de la Administración, que es la garante del ejercicio de la legalidad.

El Consejo Superior de Deportes ha subrayado que el cumplimiento de los requisitos para el acceso a las competiciones "no se debe de resolver de manera asamblearia", sino a través de una decisión "de las competiciones, federaciones y ligas" previamente supervisada.

"De ninguna manera podemos consentir que quienes están dentro de una competición pretendan cerrarla para favorecer sus propios intereses e impedir que los equipos que ganan el derecho deportivo a ascender lleguen a ello", ha censurado Cardenal.

Ourense: admisión e indemnización o paralización de la liga

Los gallegos, por su parte, están decididos a pelear la inscripción en la élite con todas sus armas. Sus gestores saben que la Asamblea cuya decisión la ACB hizo pública como "unánime" no fue tal. Varios equipos se posicionaron a favor de admitir a los del Pazo Paco Paz en la Liga Endesa y el posterior lavado de cara no elimina esa realidad. 

El COB ha dejado claro en un comunicado su absoluta disconformidad con la resolución de la ACB y avisa de que hará todo lo que esté en su mano, medidas legales incluidas, para tratar de que se cumpla el fallo que en su día publicó el CSD, máximo garante y tutor del deporte español.

Los orensanos, que proclaman su total tranquilidad al estar "amparados por la ley", solicitarán "las responsabilidades que procedan, así como la indemnización por daños y perjuicios por aquellos quebrantos" que defienden que este largo proceso de arbitraje les está causando.