Brendan Fraser no irá a los Globos de Oro pese a ser uno de los favoritos

La HFPA tiene una gran responsabilidad la próxima madrugada. Aunque por sus siglas no todo el mundo reconozca de quién se trata, lo cierto es que en la cúspide del cine es de sobra conocida. La Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood es la encargada de otorgar los Globos de Oro y se ha ido desmoronando los últimos años acusada de corrupción. Este año los premios vuelven y, pese a que la mayoría parece haber aceptado su promesa de solucionar los problemas, hay quien se niega en rotundo a acudir a la gala, pese a ser uno de los favoritos.

El actor Brendan Fraser desapareció de escena hace años. Tras vivir años de éxitos gracias a 'Gods and Monsters', la trilogía de 'La momia', 'The Quiet American' o 'George of the Jungle' a finales de los 90 y principios de los 2000, se diluyó. No aparecía en series ni películas. Se desvaneció.

Sin embargo, esta temporada Fraser ha resurgido protagonizando la cinta 'The Whale' ('La ballena'), cuyo emotivo y larguísimo aplauso en el Festival Internacional de Cine de Venecia suscitó las lágrimas de este actor. La ovación se debió a su papel como Charlie, un hombre de mediana edad de 272 kg que intenta reencontrarse con su hija de 17 años.

Pese a ser uno de los favoritos de los Globos de Oro y que podría llevarse el de mejor actor protagonista de drama, según ha asegurado a 'GQ', no estará en la ceremonia.

Los dos se separaron después de que el protagonista abandonase a su familia por su amante gay, quien murió más tarde. El dolor hizo que Charlie se refugiase en la comida para tratar de superarlo. Así se describe 'The Whale', un drama psicológico dirigido por Darren Aronofsky ('Réquiem por un sueño', 'Cisne negro') y con guion del dramaturgo Samuel D. Hunter, basada en su obra homónima.

Tras su paso por los certámenes y la acogida del público y la crítica llega a la cita de este martes como favorito para llevarse el galardón a mejor actor principal de drama -y, por ende, el Oscar-. No obstante, según ha asegurado a 'GQ', no estará en la ceremonia y no recogerá la 'estatuilla' en caso de ganarla.

Acusó a un expresidente y miembro de la HFPA de manosearle y agredirle

No es de ahora. Fraser hizo una entrevista hace cinco años con la revista. En 2018, el nacido en Indianápolis (Indiana, EEUU) denunció algo que nunca antes había dicho en público. Confesó que cumplir años le restó posibilidades en Hollywood, ya no era el chico joven que saltaba y podía interpretar a un héroe de aventuras. No obstante, esa no fue la declaración más sobrecogedora que hizo.

Fraser aseguró que un poderoso hombre llamado Philip Berk, ex presidente y miembro de la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood, le había manoseado y agredido en un almuerzo de 2003 en el Hotel Beverly Hills. En ese momento paró.

Aunque se concluyó que el Sr. Berk tocó inapropiadamente al Sr. Fraser, la evidencia respaldaba que se trataba de una broma y no algo sexual", decía el comunicado que la HFPA quería que firmara.

Tras las acusaciones vertidas por el actor, la Asociación encargada de los Globos aseveró que se oponía "firmemente al acoso sexual y al tipo de comportamiento descrito en este artículo". Debido a los hechos, la HFPA prometió iniciar una investigación. La organización le propuso emitir una declaración conjunta que, según el estadounidense afirmaba que "aunque se concluyó que el Sr. Berk tocó inapropiadamente al Sr. Fraser, la evidencia respaldaba que se trataba de una broma y no algo sexual".

Philip Berk siguió siendo un miembro votante de la HFPA. Fraser se negó a firmar el comunicado y así quedó la cosa. La organización continuó exactamente como hasta ese momento.

Así, Fraser, que en la entrevista muestra una redención y que ha recuperado ilusión y pasión por lo que hace, ha anunciado que no asistirá ni participará en la gala de este martes. "Mi madre no crio a un hipócrita", ha señalado en la entrevista.

Brendan Fraser no irá a los Globos de Oro

La visión de Fraser es contraria al resto de estrellas de Hollywood. El pasado año rostros más que conocidos en la industria alimentaron el boicot contra los Globos. Tom Cruise, Scarlett Johansson y Mark Ruffalo o plataformas como Netflix y HBO pidieron a sus colegas que abandonaran los premios e, incluso, se comprometieron a devolverlos si los ganaban.

Sin embargo, en esta ocasión, no ha habido rechazo al certamen. La NBC, que la pasada edición se negó a emitirlos -lo hacía desde 1996-, ha hecho las paces con la Asociación y sí lo hará este año. Tampoco ha habido ninguna campaña contra los premios. Todo ello puede deberse a que el pasado mes de julio, la HFPA se comprometió a impulsar una importante reestructuración.

El director general interino de la Asociación, Todd Boehly, acordó establecer una entidad con fines de lucro a través de su sociedad de cartera Eldridge Industries que tendrá la propiedad intelectual de los premios y supervisará la "profesionalización y modernización" de la ceremonia.

Preguntado por esto en 'GQ', Fraser se ha mostrado escéptico y, por el momento, no se cree las reformas pero aboga porque, por el bien de la Asociación y la prensa extranjera, cumplan con lo prometido.