Bárcenas 'estafó' en dos años a Hacienda 1,5 M. de euros gracias a sus cuentas suizas

Las coartadas sobre sus ingresos esgrimidas ante la Justicia por Luis Bárcenas se desmoronan a golpe de informes periciales. El último es el que acaba de entregar la Agencia Tributaria al titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, Pablo Ruz, y en el que se concluye que el extesorero y su mujer, Rosalía Iglesias, también imputada en el 'caso Gürtel', dejaron de ingresar a Hacienda sólo en los ejercicios 2002 y 2003 cuotas por valor de 1,55 millones de euros en concepto de impuesto de la renta y del patrimonio. Esos años, la pareja consiguió incluso que el fisco les devolviera más de 21.000 euros en concepto de IRPF.

Las cantidades defraudadas en los dos periodos analizados constituyen un delito fiscal al superar el mínimo de los 120.000 euros

En concreto, el informe, fechado el pasado miércoles, concluye que Bárcenas y su mujer dejaron de ingresar 551.652,39 euros en concepto de IRPF del año 2002 y otros 862.236,05 euros por el del año siguiente. Sin embargo, aquellas dos declaraciones le salieron a devolver 7.586 euros y 14.209 euros. Además, el matrimonio, que tenía separación de bienes, dejaron de pagar 143.478,18 euros por el Impuesto de Patrimonio de 2003. Todas estas cifras superan los 120.000 euros que marcan la frontera para dilucidar si ha habido delito fiscal o no.

A esta conclusión llegan los expertos de la Agencia Tributaria después de analizar al detalle la última información remitida por las autoridades suizas sobre varias cuentas suizas abiertas a nombre del propio extesorero, sus empresas fantasmas y su testaferro, el 'broker' Iván Yáñez. Esta información es la que ha permitido detectar 28 ingresos de dinero en efectivo entre el año 2000 y 2005 por un valor cercano a los 4 millones de pesetas, según destacó un reciente informe de la Policía. Ahora, sus colegas de Hacienda han cruzado esa información con los datos tributarios que poseen de las declaraciones que el matrimonio presentó en aquellos dos años para cuantificar las "ganancias de patrimonio no justificadas" ni declaradas.

Ingresos, dividendos y pagos Gürtel

En concreto, el nuevo informe destaca que según la documentación enviada por Berna, Bárcenas ingresó en 2002 en metálico en sus cuentas suizas 484.000 euros que el extesorero justificó ante el banco helevético Dresdner Bank-LGT como fruto de negocios inmobiliarios. Sin embargo, los expertos de la Agencia Tributaria concluyen que dicha cantidad no aparece reflejada como rendimiento en su declaración de aquel año. Además, tampoco declaró cerca de medio millón de euros que consiguió en dividendos gracias a los paquetes de acciones que cobijaba en el mismo depósito. Por ello, concluye que en ese periodo ocultó al fisco unos ingresos totales de 973.556 euros.

Un análisis que se repite en su declaración de 2003. año en el que el extesorero tributó de manera conjunta con su mujer. Según los cálculos de la Agencia Tributaria, ese año la pareja hizo ingresos en efectivo en sus cuentas de Ginebra por un total de 1.312.500 euros que intentó justificar de nuevo como las ganancias de sus negocios inmobiliarios y, además, dela  compraventa de obras de arte. En ese mismo periodo, el fisco considera probado que Bárcenas recibió de la trama Gürtel 492.000 euros, por lo que en total se olvidó de incluir en la declaración de ese año nada menos que 1.804.500 euros. El informe también recoge que en 2002, la pareja también dejó de tributar cerca de 80.000 euros por el Impuesto de Patrimonio. Sin embargo, dado que la cantidad no supera los 120.000 años, considera que en ese punto que no hay delito por este periodo impositivo y, por tanto, ya ha prescrito. 

Los expertos de Hacienda también concluyen que de la documentación remitida por las autoridades suizas se concluye que el titular de las cuentas abiertas en Dresdner Bank, SYZ y Bankia a nombre de la empresa panameña Granda Global no era, como se creía hasta ahora, el testaferro Iván Yáñez, sino que el propio "Luis Bárcenas Gutiérrez”. Un conclusión a la que ya amputaban en su último informe los agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía.