El nuevo Impuesto de Bienes Inmuebles tendrá carácter nacional, se revalorizará cada año según el mercado y su importe deberá ser algo inferior al 1% anual del nuevo valor catastral de la vivienda. Los expertos piden que esa nueva valoración catastral supere el actual límite legal del 50% del valor real de mercado. Es decir, un nuevo catastrazo a sumar a las alzas de este tributo.