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Opinión

El peor bloqueo es el mental

Elías Bendodo junto a Alberto Núñez Feijóo
Elías Bendodo junto a Alberto Núñez Feijóo Alberto Ortega / EP

Seguro que conocen el famoso microrrelato de Augusto Monterroso: “Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí”. Representa con perfección la tendencia humana a huir de la realidad hostil remitiéndola al baúl de los malos sueños. Los anglosajones tienen otra expresión parecida para referirse a esta huida: elephant in the room, ese elefante en la habitación que nadie quiere ver. Estas formas de negación evasiva forman un bloqueo mental, la incapacidad de confrontar realidades desagradables esperando que se esfumen cambiando de tema.

La Constitución y detente-bala

Pondré un ejemplo que conocí en persona. Durante los años de plomo vascos dediqué mucho tiempo y esfuerzo a tratar de explicar por toda España lo que pasaba y pasábamos los constitucionalistas vascos y víctimas de la banda. Una vez me invitó un amable grupo de jueces y magistrados; tras la exposición habitual de las agresiones, atentados y amenazas cotidianas, uno de ellos dijo cándidamente: “pero eso que ha contado usted no puede pasar, es ilegal”.

La fe en las leyes como mágicos talismanes capaces de convertir en mal sueño al dinosaurio del delito está muy extendida (por ejemplo, prohibir la violencia para que desaparezca). Hay muchos convencidos de que la Constitución es, por sí sola, el detente-bala capaz de impedir todos los desmanes; al fin y al cabo, es una creencia extremadamente cómoda que justifica la inacción, la pasividad y la siesta perpetua. Recuerden a Mariano Rajoy insistiendo en que no habría referéndum separatista en Cataluña simplemente porque era ilegal, y sobre todo un verdadero fastidio. Punto.

Estos días abundan los análisis políticos que insisten en que Sánchez no podrá dar nada más a los separatistas porque sería ilegal. Lo dicen a pesar de los actos inconstitucionales del Frankenstein y su manipulación de las leyes: dos estados de alarma y un cierre del Congreso inconstitucionales (que en una democracia seria habrían derribado inmediatamente al gobierno), más la colección de cambios legales que abarcan desde la derogación de los delitos de sedición y malversación a la creación de impuestos arbitrarios por decreto.

Cuando despertó, el bipartidismo ya no estaba allí

Los que sueñan el dinosaurio de Monterroso siguen aferrados a negar que el viejo bipartidismo haya muerto. También esperan que los separatistas hagan favores a Feijóo, en justa retribución a regalos como el ayuntamiento de Vitoria y las diputaciones vascas. Pero el enemigo sí entiende de modo inmisericorde el aviso de Virgilio: “timeo danaos et dona ferentes” (“teme a los griegos cuando vengan con regalos”, en alusión al caballo de Troya). Entre tanto, esa derecha monterrosiana sigue soñando dinosaurios, creyendo posible resucitar los viejos y buenos tiempos del turnismo alternativo y del hoy por ti y mañana por mí; también los viejos socialistas que, como niños esperando a los Reyes Magos, se niegan a admitir el fin del partido de González y Guerra.

Para desgracia de todos, Sánchez sí ha comprendido a la perfección el fin del bipartidismo y su vieja política, que ha sustituido por una política todavía más degenerada, destructiva y perversa

Cierto, es un bloqueo político, pero consecuencia de un bloqueo mental previo. Puede resumirse en el rechazo de la división política de la sociedad en dos bloques muy poco permeables (tres, si añadimos ese 30% que se abstiene de votar incluso si nos va la vida en ello). Esta división desmonta los cuentos del tipo “esperamos al PSOE bueno (o a sus votos)”, que cultivó el PP del bloqueo mental y que muchos siguen cultivando. Pero, para desgracia de todos, Sánchez sí ha comprendido a la perfección el fin del bipartidismo y su vieja política, que ha sustituido por una política todavía más degenerada, destructiva y perversa. Y se sabe a salvo mientras la oposición, política y social, siga en el bloqueo mental que le impide admitir el fin del viejo mundo político y la necesidad de pensar uno nuevo.

Hablar solo con quienes piensan como tú

Cierto, superar los bloqueos mentales no es algo fácil. La única manera de hacerlo es asumiendo que si las viejas ideas impiden cambiar las cosas, hay que cambiar de ideas porque las cosas no cambiarán solas. Repetir siempre lo mismo, hablar solo con quienes piensan como tú, buscar el confort del falso consenso rodeándose de conformistas y demás hábitos de pensamiento sesgado no son solo inútiles, sino perjudiciales. Sin embargo, es posible superar el bloqueo mental.

Portugal y España superaron el bloqueo del prejuicio medieval cuando decidieron llegar a las Indias por vía marítima, en vez de mandar cruzadas a estrellarse en Tierra Santa. Copérnico, Galileo y Kepler rompieron el bloqueo mental de los errores cosmológicos cuando ajustaron la teoría a los datos observados, en vez de empeñarse en cambiar los datos. La Ilustración puso las bases de la democracia liberal cuando enfocó la humanidad y sus problemas como un todo universal, en vez de como grupos religiosos enfrentados, estamentos desiguales innatos, o bárbaros y civilizados. Adam Smith revolucionó la economía cuando desmontó el prejuicio de considerar al oro y la plata las fuentes de la riqueza de las naciones y trasladó el foco al comercio, el mercado, la industria y el trabajo.

Romper los bloqueos mentales es posible, y además necesario: hay que cambiar de ideas porque las viejas ya no sirven para cambiar nada

En fin, Darwin dio con la evolución de las especies cuando hizo lo mismo con la naturaleza, investigando la extraña realidad del cambio permanente y su explicación razonable. Artistas, poetas, filósofos, científicos, inventores y descubridores relevantes no fueron otra cosa que personas capaces de cambiar de ideas, hábitos y procedimientos, superando el confort de los consensos inmovilistas del bloqueo mental. En política la regla es la misma. Hanna Arendt fue capaz de ir más allá de atribuir el nazismo a la maldad de ciertos monstruos inhumanos para encontrar la causa en la maligna banalidad del conformismo moral de la mayoría y la irresponsabilidad absoluta de las élites, sin las cuales no es posible el estado totalitario.

En fin, y para bajar a la tierra: la inventora de la tortilla de patatas creó su plato rompiendo el bloqueo mental que juzgaba patatas y huevos productos separados por la naturaleza. Supongo que el vino nació del valiente que osó beber un sospechoso y turbio zumo fermentado. Y podríamos seguir así miles de páginas. Romper los bloqueos mentales es posible, y además necesario: hay que cambiar de ideas porque las viejas ya no sirven para cambiar nada. Salvo que queramos seguir así per saecula saeculorum, claro está.

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  • C
    Clearco

    En mi opinión no solo es el bloqueo.

    Al igual que el nazionalismo se defiende solo, (los de aquí contra los de fuera) oponerse a ello supone un desgaste mucho mayor que el acomodaticio "yo, ni con unos ni con otros", "tenemos que convivir" etc .

    Para romper el bloqueo mental hay que tener ideas propias y no camuflarte ante las del contrario.
    ¿Ustedes creen que la sr. Ibarra, si callera del caballo camino de Cáceres y rompiera su bloqueo seria capaz de enfrentarse con los que se ha mimetizado todos estos años.?
    ¿Creen que Cayetana AT dudará un solo momento en dejar el verano azul y centrarse en el invierno bolivariano que tenemos?

    A un político no le basta con querer, tiene que valer.

  • W
    Wesly

    Diria que és difícil salir del bloqueo mental cuando recibes continuos mensajes demonizando a unos y exaltando a otros desde la gran mayoría de medios de comunicación públicos y privados (subvencionados).

    Salir del bloqueo mental requiere capacidad de análisis, requiere sentido crítico, requiere pensar por uno mismo, requiere ser capaz de identificar y rechazar los mensajes manipuladores o directamente falsos.

    Y hay que reconocer que los socialistas son maestros en el arte de mentir, manipular, dividir, fanatizar y sectarizar a la sociedad.

    La razón, la verdad, los hechos objetivos no existen para los socialistas. Son cosa de fachas.

    Su objetivo es colar su "relato" basado en mentiras, en medias verdades y en el olvido exprés de verdades objetivas que lo desmienten. Pretenden anular la razón y avivar las emociones negativas (odio, envidia, rencor) para apuntalar su “relato”.

    Disponen de una potente y bien engrasada maquinaria manipuladora (pagada con
    dinero público) que hace muchísimo daño en las mentes débiles y crédulas (que,
    desgraciadamente, son demasiadas).

    Por todo ello es muy difícil superar el bloqueo mental, razón por la cual los gobiernos "democráticos" son elegidos por la suma de los votos de las mentes bloqueadas, que, desgraciadamente, son mayoría.

  • G
    Gorrono52

    me parece tremendo que se pueda admitir lo que es ilegal,como algo..normal
    Se ha admitido no solo como algo normal no cumplir la ley,solo en determinadas autonomias,como en cataluña..incluso incumpliendo sentencias de tribunal Supremo!..y aqui no pasa nada!…esto es el comienzo de una pendiente resbaladiza infernal.O se cumple la ley en todos los territorios,con la fuerza necesaria
    O..esto es la Anarquia..y vale todo!
    Este gobierno siempre intentando saltarse la Ley,invadiando los mecenismos de control
    Alguientiene que romper esta dinamica mafiosa

  • Y
    yomemitutite

    Hace unas semanas, cuando el PP quería derogar el Sanchismo proponiendo pactos a Sánchez el Sr. Gorriarán escribía en VozPopuli un artículo titulado “Porqué voy a votar al PP”, en el que, de forma valiente, hay que reconocerlo, decía ingenuamente “les votaré para que se vaya Sánchez y deshagan sus peores disparates” y sobrevalorando sus conocimientos demoscópicos nos explicaba que “con nuestro sistema actual de conversión de votos en escaños” el “voto útil” al PP era la única posibilidad de conseguirlo. Parece que esa era su forma de enterrar el bipartidismo al que reconoce como muerto aunque sólo Sánchez lo haya visto así. Para acabar definitivamente con el bipartidismo muerto nada como votar al bipartidismo por argumentos de “voto utilidad”.

    Han pasado las elecciones y ya hemos visto el resultado de la “voto utilidad” cuando hay un partido de por medio que no es capaz ni siquiera de recoger las nueces ya maduras si otros no le sacuden el árbol como en Andalucía y en Madrid, cosa que parece que no va a volver a pasar.

    Y en su nuevo discurso la idea fuerza ante el bloqueo producido por las apelaciones al voto útil es que “El peor bloqueo es el mental” y “que no se puede repetir siempre lo mismo y hablar sólo con quien piensa como tú” y que por tanto “hay que cambiar de ideas porqué las cosas no cambiarán solas”, aunque no especifica a quien va dirigido tal mensaje

    ¿Tal vez al PP para instarles a que hablen con ese partido que le da tanto miedo al Sr. Bonilla y del que tan alejados se sienten y al que durante toda la campaña han demonizado? ¿Igual cuando dice que “hay que cambiar de ideas porque las cosas no cambiarán solas” se está refiriendo a que en Murcia, ya sólo queda Murcia, el PP debería olvidar definitivamente ese “derecho de por nada” que creen tener sobre VOX para que les regale sus votos y empezar a hablar en igualdad de condiciones como dos partidos independientes y diferentes?

    ¿O Tal vez al PP que por medio del Sr. Tellado, miembro de su equipo de campaña, ha sugerido que hay que “hablar” con los separatistas catalanes de JUNTS y de ERC, con los que últimamente creo que no se hablaba?

    ¿O lo que propone es un Gobierno de salvación nacional bipartidista entre PP y PSOE, con veto a Vox incluido, como en Ceuta?

    ¿O se dirige a Vox para que le regale una vez más al PP sus votos en la sesión de investidura apelando al mencionado “derecho de por nada” del PP?

    Este discurso cándido, como el del juez que menciona, es sin duda válido y se podría aplicar a muchos partidos pero para poder evaluarlo habría que conocer primero a quién va dirigido, porque si a lo que apela es al bipartidismo me temo que la respuesta será como en Ceuta. Y ese es el quid de la cuestión.

  • P
    Perhaps

    Siempre había creído que la existencia de un partido bisagra era una opción interesante en democracia. Desde la experiencia de Ciudadanos y con los partidos-taifa de hoy, empiezo a opinar lo contrario

    • B
      Beeblebrox

      Es una opción interesantísima en una democracia. El drama de España es que falta un partido que tenga asumido que su rol es defender un programa (decente) pero no alcanzar la Moncloa, de forma que sus votos estén "a la venta" para poner en la Moncloa a otro partido a cambio de reformas. UPYD consiguió muchas cosas de esas porque era ese partido (por ejemplo la malversación más estricta para dificultar la corrupción política que el PSOE lógicamente ha derogado tras la lógica petición de Jx3% y ERC. El problema es que Cs nunca lo fue porque Rivera también quiso la Moncloa y hasta ahora los únicos partidos con ese rol son independentistas hipercorruptos