Quiero que Cataluña sea un lugar próspero, feliz y abierto a Europa y al mundo, innovador, fascinante, y lleno de vida. Creo sinceramente que para que eso suceda, debe seguir siendo parte de España, tanto por motivos económicos como culturales. Es imposible entender Barcelona, la ciudad en la que se editan más libros en castellano del mundo, fuera de España. Es imposible entender a Cataluña sin Barcelona.
Durante la última década, sin embargo, es indudable que Cataluña se ha quedado atrás. Lo que había sido siempre una región cosmopolita, inquieta, siempre buscando, siempre mirando a Europa y América, siempre intentando de buscar lo más nuevo o inventarlo, se había quedado ensimismada, perdida, cerrada en si misma. Una cultura oficialista cada vez más provinciana, arrogante y reaccionaria ahogaba su viejo espíritu anarquista, irónico y decadente. Su burguesía, antaño debatiéndose entre el orden y la estética, se había perdido en un mar de agravios, resignación y derrotismo.
La región más activa, rica, y vibrante del país se convirtió en el lugar más antipático y provinciano de Europa. El resultado ha sido un desastre tanto para la misma Cataluña como para el resto de España
El procés, la locura política colectiva por la independencia, ahogó a Cataluña, sumiéndola en debates interminables, divisiones profundas y malgastando la energía y sentir colectivo del país en un esfuerzo tan estúpido como inútil que nunca llegó a ser mayoritario entre los catalanes. La región más activa, rica, y vibrante del país se convirtió en el lugar más antipático y provinciano de Europa. El resultado ha sido un desastre tanto para la misma Cataluña como para el resto de España.
Soy de la opinión, entonces, que una de las prioridades de cualquier político tanto en Cataluña como en España es poner fin a este lastre pesado, absurdo y derrotista que ha sido el procés. Es algo urgente, imprescindible, tanto por el bienestar económico del país como por nuestra propia salud mental. Cuanto antes nos saquemos de encima este día de la marmota de agravios, protestas, desatinos, algaradas y jugadas maestras que no llevan a nada mejor. Es hora de mirar hacia adelante.
Los acuerdos de investidura que el Partido Socialista y los nacionalistas catalanes, por lo tanto, me despiertan miedos y esperanzas considerables. Y aún con los abundantes reparos que me producen varias de sus provisiones, creo que pueden ser, potencialmente, una forma de cerrar esta era tan idiotizada y autodestructiva de la política catalana, y quizás, a medio plazo, un punto de partida hacia un país mejor.
Empecemos por la parte negativa, porque no es en absoluto despreciable. Muchos comentaristas se han quejado sobre cómo los acuerdos han hecho que el PSOE acepte el “lenguaje” o el “marco” del independentismo. Es cierto que ambos textos con a menudo insoportablemente ampulosos y recargados en la retórica circular del procesismo, pero ese me parece un problema menor. Como señalaba hace unas semanas, una de las principales obsesiones del nacionalismo catalán es usar esta palabrería farragosa y altisonante de bilateralidad, soberanía, nación o conflicto para decir banalidades, simplemente para provocar escándalo e indignación en Madrid. Los acuerdos incluyen copiosas cantidades de este trolleo para los fieles, simplemente para irritar.
Sobre soberanía, autodeterminación, libertad, revolución y demás no hay nada substancial. Todo está escrito en condicional, todo está supeditado a acuerdos, y no hay compromisos cerrados
Ofuscado entre tantas tonterías, la parte substancial de ambos pactos incluye sólo dos propuestas concretas y tangibles, sin condicionales. Primero, los partidos nacionalistas catalanes votarán a favor de la investidura. Segundo, el Congreso aprobará una ley de amnistía para los implicados en los disturbios y algaradas del procés. El resto del acuerdo, con la única excepción del traspaso de Cercanías (al que le dedicaré otra columna más adelante) es una montaña de vaguedades, indefinición y condicionales, sin apenas detalles concretos. Hay múltiples mesas de diálogo que hablarán sobre cosas, hay una “agenda de reformas y transferencias” y una serie de principios sobre el sistema de financiación. Pero sobre soberanía, autodeterminación, libertad, revolución y demás no hay nada substancial. Todo está escrito en condicional, todo está supeditado a acuerdos, y no hay compromisos cerrados en ningún tema concreto.
Los niveles de indefinición son casi hilarantes. El acuerdo con Junts recoge que Junts propondrá una reforma de la ley de financiación autonómica, y el PSOE “apostará por medidas que permitan la autonomía financiera”. Es un pacto donde las dos partes acuerdan proponerse cosas distintas. El de ERC dice que se “abordará la manera en que los acuerdos puedan ser refrendados por el pueblo catalán”, que es la forma rebuscada de decir que si pactan algo se comprometen a negociar como aprobarlo. Hay tres mesas de negociación distintas actuando en paralelo, algo que parece una receta para que nadie acabe pactando nada relevante.
La cláusula más importante, sin embargo, está medio escondida en el acuerdo con Junts. En el texto dicen que Junts propondrá la celebración de un referéndum de autodeterminación amparado en el artículo 92 de la Constitución, es decir, consultivo y autorizado por el Congreso de los Diputados a propuesta del Presidente del Gobierno. En esa cláusula el PSOE no se compromete ni a considerar esa solución; sólo dice que desarrollarán el estatuto de autonomía del 2006.
Los dos partidos que reventaron la convivencia en Cataluña y dieron poco menos que un golpe de estado para intentar romper el país han decidido acatar el sistema constitucional, y lo han hecho sin rechistar
Es decir: tenemos un partido independentista que ha renunciado por escrito a la vía unilateral hacia la secesión que era el problema central de procés, y lo ha hecho a cambio de que el Gobierno español siga implementando el marco legal vigente. Detrás de todas esas grandes palabras y aspavientos, los dos partidos que reventaron la convivencia en Cataluña y dieron poco menos que un golpe de estado para intentar romper el país han decidido acatar el sistema constitucional, y lo han hecho sin rechistar.
Si lo que queríamos era cerrar el procés y hacer que la política catalana y española vuelva a su tradicional (y perfectamente normal en sistemas federales) negociación de presupuestos, leyes y competencias, aquí lo tenemos. Esto es lo que este acuerdo está haciendo.
Quedan dos puntos por comentar. Sobre la financiación, uno de los problemas endémicos de nuestro sistema institucional es que las autonomías pueden gastar dinero, pero no recaudarlo. Un acuerdo que fuerce a los gobiernos regionales a pagarse sus intentos es muy necesario; veremos si el acuerdo con ERC va en ese sentido, y si la reforma de la LOFCA extiende este principio a todas las comunidades.
Segundo, queda la amnistía. No estoy seguro de que sea constitucional, pero tampoco estoy seguro de que no lo sea; los que dicen que es obvio e imposible aprobar creo que están hablando más desde el dogmatismo que desde la interpretación legal seria. Moralmente, la amnistía me parece una solución incómoda. Lo que sucedió en Cataluña el 2017 (un golpe de estado) fue extraordinariamente grave, y todo lo que vino antes y después tuvo consecuencias negativas profundas en la sociedad catalana. Es tremendamente injusto que un cretino como Puigdemont y su banda de demagogos y fanáticos pudieran hacer tanto daño al país y no sufrir consecuencias.
¿Volverán a las andadas?
Si ese es el precio de “cerrar” el procés de una vez, sin embargo, quizás este sea un precio que debamos estar dispuestos a pagar. Las algaradas independentistas fueron muy graves, pero no hubo muertes ni víctimas. Creo que, como país, deberíamos estar dispuestos a ser magnánimos, si eso soluciona el conflicto, o al menos lo convierte en la tradicional batalla partidista insoportable dentro de las instituciones, no un golpe de estado.
¿Me fío de que los independentistas no vuelvan a las andadas? Por supuesto que no, y el estado debe estar dispuesto a enchironar con entusiasmo si deciden romper otra vez el marco constitucional. Creo que es hora de ser pragmáticos, y aceptar que cualquier conflicto político como el catalán sólo podrá cerrarse en falso, con soluciones a medias e imperfectas que no satisfacen del todo a nadie.
Estos acuerdos son, potencialmente, la mejor solución para Cataluña y España ahora mismo. Creo que es un riesgo que vale la pena correr.
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.
Como patriota catalán llevo toda mi vida riñendo, en todas sus acepciones, con el separatismo y sus aliados de izquierda y les puedo asegurar que no existe análisis histórico, razonamiento político o evidencia empírica que les vaya a convencer de que están equivocados y deban rectificar. Pierdan toda esperanza, no hay 10 hombres justos en esa Sodoma, pero la derecha española ni es un Dios omnipotente que les pueda castigar por ello, ni está libre de pecado.
La amnistía es la sublimación del Pacto del Tinell que parieron Maragall y esa maldición bíblica conocida como Zp y este no fue más que una reedición de las alianzas que trajeron y condenaron la II República. Todo eso da igual, la correlación de fuerzas en 2023 es la que es y esgrimir “la razón” como si fuera kryptonita o señalar traidores no la alterara lo más mínimo. No queda otra que la conllevancia orteguiana. Al menos, de momento.
Como bien dice Senserrich, en lo fundamental nada irreparable muda sustancialmente. Incluso puede jugar a nuestro favor para articular de nuevo en Cataluña una alternativa no nacionalista. Existe un núcleo de asociaciones cívicas y seguidores patriotas movilizados, desinhibidos, a la que se debe dar forma, no necesariamente en forma de partido político, para reconfigurar una “realidad demoscópica” que no pueda ser ignorada ni en Madrid, ni en Barcelona. Cataluña es demasiado grande, tiene demasiado peso, para ser ignorada como el País Vasco; la solución al separatismo vendrá de Cataluña y para ello es necesario un proyecto de España que vaya más allá de “quítate tú para que me ponga yo” y así poder tirarse la razón a la cabeza.
No puedo leer tanta abyección en un periodista que se dedica a blanquear a los partidarios de trocear esta atribulada nación llamada España. Su salmodia a media voz me repele. No le leo nunca, pero hoy creía que debía hacerlo por si acaso se había caído del caballo. Nada de eso: Senserrich dice que la amnistía puede que no sea legal o puede que sí.
En la decadencia de VozPópuli en los últimos años este redactor ha tenido un papel destacado. Qué personaje.
¿Y si todo es tan bueno y tan bonito, por qué no llevaban en su programa electoral o al menos no decían que iban a hacer lo contrario? La realidad es que Pedro Sánchez ha cedido a un chantaje y los chantajistas son insaciables. A Junqueras y Puigdemont se les puede acusar de todo, pero mentir no han mentido. Han dicho que volverían a hacerlo y lo volverán a hacer.
Respecto a lo que ha conseguido Bildu ya le digo yo lo que es. En menos de dos años, todos los etarras estarán en sus casas y los que no hayan sido juzgados serán amnistiados
Roger aquí lo que se ha demostrado es que los poliicos controlaban a Tsuanmic y a los CDR. Y si ahora no tiran adoquines, pero se ha cerrado la brecha entre catalanes indepes y constitucionalistas? Puede estudiar un alumno la lengua española en un 25% de horas semanales? No amigo, ni olvido ni perdono. Y veremos a ver qué tirón tiene Silvia Orrios o Paluzie en las elecciones catalanas con los descontentos. Se adivina que el PSC gobierne en Cataluña e Illa de presidente. Puigdemont y Junqueras creen que no será así....veremos.
"Las algaradas independentistas fueron muy graves, pero no hubo muertes ni víctimas." El policía nacional IÁ tuvo que ser dado de baja en el cuerpo por no haber sido capaz de superar las lesiones que le causaron los defensores de los sediciosos de modo violento. Pese al casco, estuvo a punto de ahogarse en su propio vómito, sobrevivió de milagro con graves secuelas funcionales y alteraciones en el cerebro y órganos vitales como consecuencia del golpe que recibió por el impacto de un adoquín; por su parte, el coruñés ÁH, a los 45 años, también ha tenido que aceptar la baja en el cuerpo por su incapacidad física para las funciones policiales.
En total, en aquellos episodios, fueron heridos 280 policías, acusados luego de «violencia policial» y sufrieron el acoso de esas masas, para las que ahora se pretende total impunidad, y a quienes se arrojaron adoquines y piedras de hasta 20 kilos.
Por no olvidar quien tiró una bengala a un helicóptero de los Mossos que pudo acabar en tragedia.
Sería conveniente que antes de hablar de política se documentara correctamente sobre historia. La de Cataluña, creada por falsarios, tiene mucha tela para cortar por el volumen de mentiras sobre las que se ha levantado. Durante 7 siglos más o menos jamás han hecho ascos a ningún régimen ( monarquías, repúblicas de ignorantes y criminales, dictaduras de cualquier pelaje, fascismo) a cambio de asegurarse el sustento permanente la caterva de golfos que, al igual que los de ahora, han dirigido su destino. Sobre su utilización de los calificativos comunes y demasiado sobados ( emprendedores, competentes, cosmopolitas, región más rica, activa, etc.) le aconsejo el repaso de cómo se mantuvo, y a costa de quienes, el cinturón industrial y la zona franca de Barcelona. Le doy una pista para que no se estruje mucho la mollera. Infórmese sobre el INI franquista y la reconversión industrial de Felipe González con dineros de Europa.
España lleva pagando las tropelías de estos paletos más de lo deseado. Porque este episodio se repite de nuevo. En el siglo pasado ya tuvieron otra amnistía y al poco ya estaban de nuevo “cagando” el sembrado. Tenga en cuenta que lo más importante no es el perdón de los pecados sino el propósito de la enmienda. Que jamás lo han tenido. Desde donde usted nos deleita no se cual será el método para combatir las moscas “cojoneras”. Le garantizo que no es mover el rabo, como hace el toro. En el mismo catálogo pongo a los vascos “recogenueces”. No dejo de pensar como podría haber sido la España mesetaria, arruinada por la rapiña de gobernantes necios y periféricos sin vergüenza, si un gobierno con coraje hubiera conseguido negociar y abrir un corredor central por los Pirineos.
Está claro, que hay varios partidos en Cataluña que tienen un conflicto político con el estado Español, solo que todos estos partidos, agrupados: Antisistema- Comunistas, Comunistas- cuasiantisistema, Burgueses católicos- antisistema y comunistasnostalgicosdelaIIrepública, apenas logran llegar al 50% de la población y después, como hay un odio entre ellos semejante al que sienten por España, no consiguen hacer nada cuando gobiernan juntos... como si esto fuera poco esta PSC.... que baila al mismo ritmo que la tribu descrita y que, tal y como está ahora, está más del lado nacionalista que de la constitución. Está claro, tenemos un tremendo un tremendo conflicto político en Cataluña, no cabe dudas
Menos rollo, que para remediar los supuestos agravios de unos y otros ya se hizo la Constitución. Se cedió en muchas cosas para que ganaran todos. Ahora resulta que hay un conflicto histórico. Vaya jeta. Y los curas malmetiendo según costumbre.
No tienes ni idea de lo que dices amigo Roger.
El padrino Pujol , padre de la criatura, puso las bases para que el voto indepe fuera creciendo. Para ello parió la famosa inmersión que no es otra cosa que fabricar patriotas en la escuela.
“ Avui paciencia, demá independencia “ Esta es la consigna.
La solución es otra : Fuera autonomías, escuela en español, tener los mismos derechos y deberes que el resto de los españoles. A un drogadicto no se le da más droga, se reduce la dosis
El articulista asume el relato independentista y parte de la base de que existe un "conflicto político", cosa que es radicalmente falsa.
No existe ningún "conflicto político", existen unos políticos desleales que voluntariamente renunciaron a su obligación de cumplir y hacer cumplir las leyes en el marco de sus competencias legales, derogaron la Constitución en Cataluña, convocaron un referéndum ilegal y declararon la independencia unilateral de Cataluña. Dieron un golpe de Estado, vamos.
El gobierno central, obligado también a cumplir y hacer cumplir las leyes, no tuvo más remedio que aplicar el artículo 155 de la Constitución, de forma muy suave, por cierto.
En definitiva, aquí lo que hay por un lado son unos delincuentes que incumplen la ley y por otro lado un gobierno, unos jueces y unos policías que, cumpliendo con su obligación legal, hacen cumplir la ley.
Privilegiar a los delincuentes fomenta la delincuencia y humilla a todos aquellos ciudadanos honrados que cumplen la ley.
De "conflicto político" nada de nada, Sr. Senserrich.
No coincido con el articulista, ojalá este paso sea el principio de la solución pero no lo creo... este pacto ratifica a los mismos actores que han llevado a Cataluña a esta ruina moral, social y económica... en mi opinión es un paso y una mirada, de nuevo, hacia atrás ... No es tampoco que se hayan dado pasos hacia adelante desde 2017... esta parece ser una región intelectualmente inamovible y no veo que este paso aporte nuevas ideas, sino lo contrario. Me parece mucho más grave que "una solución incómoda" la amnistía, no creo que lo más importante sea si es constitucional o no, la certeza es que es profundamente inmoral y vuelve a poner en el presente a actores, discurso e ideas de 2017.... no se ha avanzado nada, se les ha dado la razón a los pirómanos
Buenos días, he entrado porque he encontrado este artículo interesante. Está claro que no se ven las mismas cosas desde Cataluña que desde el resto de España... Pero ya se lo ha dicho algún forero. Para arreglar una parte de la tarta, se va a pudrir entera... Y eso no se puede tolerar. Este acto debería ser pactado con mucho tiento entre las derechas y las izquierdas, pero aquí solo quieren romper la baraja las izquierdas, con las ultraizquierdas de todo pelaje y la ultraderecha catalana y vasca. Y sin contar con el 50% de la población, que se dice pronto.
Habla del pacto con Junts y la Amnistía, y dice que lo demás es palabrería para volver a la senda constitucional... pero olvida los otros pactos con ERC, el PNV, etc. Yo entiendo que le duela la ruptura en Cataluña, pero es que Schz está dispuesto a romper España por seguir unos meses más en el poder. Esa palabrería lo que dice es que Puigdemont va a fiscalizar todo lo que se haga en España, que van a amnistiar no se sabe a cuántos ni por qué, saltándose a la torera todo el sistema judicial, hasta corrupción y terrorismo, aunque no hubiese muertos. ¿O los destrozos no es terrorismo callejero? ¿O hacerse fotitos con armas y explosivos no es terrorismo? Nos está diciendo que hay que perdonar, es decir, al abusón de la clase se le deben dar facilidades, pero sigue diciendo que lo volverá a hacer... Pues dígame que ganamos. Y por favor, mire a la cara a los andaluces, a los madrileños, a los gallegos, al resto de españoles y dígales que podemos saltarnos a la torera cualquier ley porque luego nos amnistiará Schz, y no se queje de las risas... O que aceptemos condonar deudas para seguir gastanto en embajaditas, aunque la Sanidad catalana parle molt bé el catalá, pero no dé el servicio que requieren los ciudadanos... Y los demás, que más o menos hacemos las cosas bien... ¿qué nos dan? ¿un mojón?
Y dígame: ¿no sería mejor que los na-zionatas catalanes que les han llevado a la ruptura sientan que toda acción mala tiene sus consecuencias?
Y lo peor es que Schz se ha metido y nos ha metido en este embrollo por 7 votos. Si no los hubiese necesitado, no estaríamos aquí. Si fuese cierta su postura, la habría explicado en la campaña claramente, hubiese tratado de convencer de las bondades de esto, pero no, solo necesita esos 7 míseros votos.
Dice el Sr. Senserrich que los independentistas han renunciado a la vía unilateral y que lo han hecho a cambio de que el Gobierno español siga implementando el marco legal vigente.
Ambas afirmaciones son falsas.
Los independentistas nunca renuncian a la vía unilateral, la pueden retrasar si consideran que pueden conseguir (como efectivamente hacen con las cesiones traidoras de Sánchez) avances que les faciliten alcanzar su objetivo.
El gobierno español no está implantando el marco legal vigente, el gobierno de Pedro Sánchez está implantando la arbitrariedad (prohibida por el artículo 9 de la Constitución) y la impunidad selectiva (prohibida por el artículo 14 de la Constitución). Además, Pedro Sánchez está colocando a sus peones más sectarios y obedientes en las principales instituciones del Estado, Gobierno, Parlamento, Fiscalía y Poder Judicial incluidos, evidenciando así su vocación totalitaria, todo ello con el único objetivo de que le validen sumisamente sus decisiones arbitrarias y sectarias con el fin de mantenerse en el poder como sea y a costa de lo que sea.
Estos acuerdos no son una buena solución para Cataluña ni para España. Estos acuerdos son nefastos para nuestra convivencia, para la igualdad (ausencia de privilegios ) y para la prosperidad de todos nosotros.
Y Ud., es perfectamente capaz de darse cuenta de todo ello, pero prefiere manipularnos a todos siguiendo las consignas del gabinete de agitación y propaganda del PSOE de Pedro Sánchez.
me olvido esa Lorena dijo eso al español "castellano parlante" en Miami delante de periodistas como Álvaro Nieto en agosto del año pasado.
Y nadie de los presentes con ella periodistas y generadores de opinión la dijeron ni mu, al escuchar sus palabras al español residente en Miami, pero es que el preguntado tampoco se inmuto.
Esto es ejemplo del problema.
Esto en Francia y Portugal no puede suceder por como lo tienen legalmente creado.
Anim Roger tu eres catalán
Este argumento es calcado a otros que he leído en otros medios. ¿Por qué será?
Porqué?. Pues porque asume el argumentariado diseñado por el gabinete de agitación y propaganda del PSOE de Pedro Sánchez.
Roger escribe QUE ESCRIBO, hablo, EN IDIOMA CASTELLANO y he dejado de leer.
Este periodista que ha estudiado en la universidad catalana y en catalán ha asumido que nunca ha existido el idioma español, aunque legalmente desde 1812 si pero como los de la RAE, la casa real, Cela el siervo del rey Juan Carlos escribió que si existe el idioma castellano, la consecuencia es que para Roger en Hispanoamérica son "castellanohablantes o parlantes" todos vivan allí o en España, es exactamente lo que dijo la presentadora Lorena del programa de esa Griso a un español, porque no castellano directamente, que vivía el año pasado en Miami como empresario ,"¿ que le dicen los castellano parlantes ?"
Pues si Roger como Lorena a sueldo de Griso y A 3.
Espero te alegres de la ley de lenguas que esta elaborada y falta aprobar en las cámaras.
Le tengo mucho respeto a las personas que se posicionan en un bando. Si además se juegan la vida aún mas.
Usted D. Roger pertenece al peor grupo, al de los blandos, pusilánimes, a los falsos equidistantes, al de los "alucinados" que se manifiestan con la bandera de Palestina en una mano y la bandera LGTB en la otra.
Son ustedes prescindibles, inútiles que no aportan nada.
Les tengo menos respeto que a un terrorista de Hamas.
Sr Roger, seguramente lo pactado sea bueno para Cataluña, a corto plazo. A largo ya veremos. Pero, para el resto de regiones y ciudadanos de España es nefasto. Para la democracia en España y para la igualdad entre españoles es devastador.
Para intentar mejorar la parte podrida de la tarta, se va a pudrir la tarta entera.
No hay nada que sea malo para el resto de regiones y ciudadanos de España y sea bueno para Cataluña, esto no existe... es decir solo existe en la mente rural y dogmática de los nacionalistas... y de los borregos que los votan pero no se engañe, a dura penas llegan al 50% de la región, el otros 50 padecemos las mismas penas del resto
Perdón por el término, pero hay que ser un poco tolai para creer que los lobos vuelven al redil.
O llevar 50 años con los ojos cerrados y la nariz tapada, que todo puede ser.
Según el articulista, para congraciar a los indepes debemos renunciar a ganar el debate de las ideas aunque sobradamente tengamos razón: histórica y legalmente. Es decir, poner los ingredientes para un desastre mayor donde ya habremos concedido la razón a los que no la tienen.
Brillante. Si señor.
Tengo tres hijos: Pere, Emiliano e Isabel.
Pere me debe 100.000€ y siempre me insulta; Emiliano me 100€ e Isabel no me debe nada porque se administra bien.
Por el bien de la familia y para que Pere deje de insultarnos todos los días he decidido perdonar a Pere 15.000€ (15%) y a Emiliano 15€ (el mismo 15%). A Isabel no le perdono nada porque nada me debe. ¿Lo pillan?
a) No tengo por qué soportar que mi contraparte me insulte y desprecie para congraciarse con su parroquia. b) Una vez amnistiados, volverán a hacerlo y está vez el Estado no podrá perseguirlos. c) Si consiguieran su nuevo país independiente empezando de cero, lo arruinarían en veinte años como corruptos, vagos e ineficientes que son. Y aún todavía sería culpa de España: "España no nos deja crecer, España nos impide entrar en la UE, España nos asfixia...". d) No veo defensa de los intereses no ya españoles sino de la mayoría catalana (triunfo de C's, triunfo del PSC) no nacionalista ni en el pacto ni en su artículo.
No sea usted ingenuo, don Roger.
El articulista toma a los lectores por idiotas