El señor A y el señor B son dos intrépidos exploradores a quienes todo eso de las redes sociales les pilló en la mediana edad, en mitad de una crisis existencial en la que averiguaron que su vida no había sido para tanto. Eso despertó en ellos un espíritu aventurero del que informan frecuentemente a sus amigos, que los miran como a dos adolescentes con canas en la barba, una hipoteca y un divorcio complicado. Para este agosto, han planeado una ascensión al Pico Aneto. Con el verano y el deshielo, “se puede subir perfectamente”, dicen, subrayando el adverbio. Mientras tanto, los equipos de rescate hacen horas extra para salvar la vida a los tontos de cuarenta y pico y equipo completo de Decathlon. Helicópteros recorren toda España durante los fines de semana para lanzar una manta térmica, vendar el brazo o llevar al hospital a quienes luchan contra la desesperación de la aburrida rutina con hazañas de dominguero panzudo.
La representación más extrema de este fenómeno se encuentra en las maratones populares y en las agencias de viajes especializadas en lugares inhóspitos. A Núria Giménez y a sus amigas se les ocurrió hace un tiempo que sería buena idea el viajar a Etiopía este verano. El Ministerio de Asuntos Exteriores desaconseja pisar determinadas zonas del país ante el riesgo de ser víctima de las escaramuzas de los insurgentes. Pero a Núria -con tilde en la ú- y a su grupo no les importó. La vida es corta y los conflictos a veces se eternizan. Había que practicar el turismo de aventura para comprobar de primera mano que entre las noticias terribles que llegan del Cuerno de África también hay espacio para la esperanza. Es el que se percibe al mezclarse con sus gentes, aunque sólo sea para hacerse fotos.
Porque nunca falta la fotografía de los intrépidos aventureros con los niños del lugar, que miran a los visitantes con la ilusión de quienes piensan que les van a dar algo y que se quedan en la estacada cuando los blancos se marchan de allí. “Son felices con nada. Mucho más felices que nosotros”, escribirán junto a esa imagen, en Instagram. No hace falta ser muy agudo para adivinarlo. Esa deducción es muy habitual en el paleto cosmopolita que obvia el drama de quienes tendrán una mucha menor esperanza de vida que sus hijos y las pasarán canutas para conseguir comida y agua; y no digamos educación. Pero, “sonreíd, nenes, decid patata”.
Llantos en RAC1
La expedición de 2023 del grupo se torció cuando las excursionistas catalanas se vieron atrapadas entre los disparos de una batalla. Tuvieron que recluirse en un hostal sin agua corriente ni aire acondicionado, lleno de pulgas y de precariedad, cuentan. La propia Giménez ha concedido una entrevista a RAC1 en la que relata su dramática experiencia: "Me gustaría difundir que nos hemos encontrado muy abandonados, tanto por la embajada, como por el consulado, como por el Gobierno y la Comunidad Europea, y Naciones Unidas, que tampoco ha hecho nada". Otros de los viajeros niegan la mayor sobre la dejadez del cónsul y del embajador. Pero en la radio del conde de Godó se escuchó este testimonio, que dejaba mal al cuerpo diplomático español. Suficiente.
Cuesta comprender el motivo por el que unos ciudadanos llegan a deducir que el Estado debe afrontar el coste de sus imprudencias. Núria Giménez no lo sabe, pero todo eso es consecuencia de su adolescencia inconclusa o de su peculiar concepto de la Administración, que es similar al del crío consentido que piensa que su padre le debe salvar de todos los apuros con velocidad y sin quejare. A lo mejor, los Indiana Jones, los coroneles Tapiocca y las baronesas Karen Blixen deberían pensar que el servicio diplomático no es una guardería ni el Estado la niñera de los aventureros en apuros. Sus exigencias son ridículas. Son victimistas y desmesuradas. Cabe lamentar la experiencia que vivieron, pero las declaraciones de Giménez son fruto de una hipertrofia mental severa. El Estado no está para salvar a los imprudentes.
A lo mejor, los Indiana Jones, los coroneles Tapiocca y las baronesas Karen Blixen deberían pensar que el servicio diplomático no es una guardería ni el Estado la niñera
Las abuelas suelen exagerar al evaluar los riesgos que implica el salir de casa y los insatisfechos tienden a sobrevalorar aquello de 'vivir experiencias'. Los medios pecan de estupidez en estas situaciones, para variar, así que hay quien ha aprovechado la circunstancia de los 17 aventureros para componer una historia dramática y hay algún tertuliano que ha desaconsejado viajar a África. En general. De norte a sur y de este a oeste (y qué gañanes quienes recomiendan no viajar). En la época del clicbait y los ladridos de tertulia, cualquier excusa es buena para deformar la realidad.
Hay quien incluso ha rastreado las redes sociales de los 'afectados' para buscar imágenes que atestiguaran su espíritu aventurero. Y ahí estaba la foto de la mujer blanca con los negritos. A lo mejor, a estas alturas, esos pobres niños ya sufren la desgracia del conflicto armado y lo libran o los mata. La visitante, desde España, aprovechará para recitar a sus amigos, en una terraza, con una cerveza en la mano, la frase más manida en estos casos: “Son felices con poco”.
Quizás en la mesa haya un neo-maratoniano de 55 o un alpinista que tras su separación, a esa misma edad, busca un 8.000. Seguramente, habrá leído noticias que avisan de que el Everest está lleno de basura por culpa de los grupos de turistas. "Es una vergüenza", dirá. Ellos no tienen derecho a ir. Él, sí. Él es un aventurero de verdad. De esos que lanzan gritos de SOS cada vez que se quedan solos en casa y, de vez en cuando, protagonizan titulares porque sus expediciones terminan en drama, ruptura, bronca o rescate.
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El Aneto pertenece a Aragón
Su lugar era Mongolia, Exterior por supuesto, se encontrarían como en casa.
Me recuerdan a otros catalanes,que se fueron de ong/vacaciones al sahel y les pilló el Isis y hubo que pagar rescate,yo lo hubiera pagado si se les hubieran quedado en África y si es por mi a estos descerebrados les rescató cuando Etiopía vuelva a ser un imperio
Muy bueno. Viejóvenes que no han pasado la adolescencia. Profes jubilados que pasaron del instituto al instituto. Egoístas incapaces de ver que "ellos" serían más felices tumbados en un buen sofá y viendo una buena serie después de una cena decente.
Yo cuando la oí , vi que se trataba de una mongola ...ni le hice caso mas allá de las primeras palabras , de paleta .
Que pena que Cataluña NO fuera ya independiente , y a ver a donde enviaba su ejercito de Mosqueteros a socorrer a nadie !!!
Creo que debería haber empezado por pedir ayuda a la embajada de Cataluña. Sería lo propio.
He visto sajones USA, tocar la guitarra en las zonas más humildes de Paraguay, donde los mosquitos, inundaciones, aguas fecales.. están por todas partes, tocar la guitarra para que esos humildes les den unas monedas para continuar con su aventura..
Cada día estoy más convencido de que los catalanes son idiotas de nacimiento. A ver si alguno espabila viendo cómo van las cosas en el único país del mundo que reconoce el derecho de autodeterminación.
Una cosa es criticar la actitud narcisista de esta señora, con lo que concuerdo, y otra es que para ello tengas que recurrir a algo como que "con 40 y pico años mejor quedarse tranquilito en casa... viendo la novela" "o que "sales al monte equipado de decathlon, para que luego tengan que venir costosamente el helicóptero de P.C. a rescatarte" o algo así, lo cuál es un disparate, una generalización innecesaria (para tu argumento) burda y hasta peligrosa. Con 40 y con muchos más se pueden hacer muchas cosas, con preparación e inteligencia, y además con autorresposabilidad, es decir, yo corro mis riesgos, conociendo mis límites y no exijo que nadie "venga a salvarme" porque ya soy mayorcito
El rescate de esas aventureras ¿lo paga el seguro, si lo contrataron, o lo paga el contribuyente? Si lo paga el contribuyente por ser unas destalentadas fíjese en el módulo prefabricado para clases, el barracón de toda la vida, y piense que está ahí porque el dinero que se iba a gastar en hacer la clase se dedicó al rescate en Etiopía, por ejemplo.
¿La dama se indignó porque no le rescataron qué?, ¿a quién? Si fuera a ella misma se diría no LA rescataron.
pero como son tan torpes porque no acudieron a la EMBAJADA CATALANA ,igual le hubieran solucionado sus problemas,estos indepen. se creen mas listos que nadie y mecachis mira que no pedir ayuda a su EMBAJADA, esta gente son de lo mas esperpentico que puede hacer una persona critican y piden ayuda a los que odian,su forma de actuar es miserable como poco
No señora, no pueden acudir a su embajada porque son un país oprimido que no puede tener embajadas. Hasta donde razona el columnista está bien, la irresponsabilidad de unos mentecatos se convierte en argumento nacionalista, pero lo que usted dice refuerza su queja.
En estos tiempos de tanta "responsabilidad social empresarial" y "responsabilidad social medioambiental" donde todo es responsable de todo, hemos olvidado la responsabilidad PERSONAL la cual es personal, universal e intransferible... Si no tenemos dinero porque no trabajamos, el estado es responsable; si cometemos un delito, la sociedad es la responsable; si ocupamos una vivienda, los servicios sociales; si conducimos borrachos, la publicidad en los medios de comunicación; si no perdemos en un camino de cabras, el GPS; si caminamos por un barrio peligroso, los delincuentes...
Pero nadie se responsabiliza de la parte que, como individuos, tenemos en cada uno de esos casos... si la responsabilidad es individual, las consecuencias son personales. Si la responsabilidad es colectiva, las consecuencias son comunes, abstractas, difusas, inexistentes.
Hace tiempo que algunas administraciones (Cataluña y Asturias, creo) vienen proponiendo o aplicando el "quien la hace, la paga" mediante el instructivo modo de presentar la correspondiente factura por los servicios de rescate a aquellos "aventureros de domingo" que provocan rescates por su propia inconsciencia... Supongo que presentarles la factura únicamente del coste del avión (horas de servicio, combustible, derechos de sobrevuelo, derechos de aterrizaje, etc...) pueda servir de escarmiento.... aunque sólo incrementará el pataleo y el "MadriT ens roba" con un "eso en las películas americanas no pasa"...
"Son felices con poco"... como nosotros los españoles... con poco nivel de gestión política, somos felices.
a ver si lo entiendo pues no se explica usted. Núria con tilde pide desde RAC 1 en idioma de colonos castellanos que el estado represor español envíe a los legionarios españolazos a recatarla.
No al gobierno soberano de su país, que sean las fuerzas del ejercito del estado catalán, su país, aquesta es la nostre policía, que la rescate como el gobierno israelí hizo con los judíos etíopes
Es que la tal Núria ha visto el porte de los del CNI que se beneficiaron a sus coleguis indepes y ha tenido sueños húmedos con que vinieran al rescate unos legionarios o unos paracas fortachones. Pero no ha tenido suerte (le ofrecieron, como mucho, que fueran los mossos con la barqueta que se ocupan ahora de las tareas de la Guardia Civil) y se le cayó la líbido. Rabieta de despechá.
¿Conoce esa gran película de Buñuel llamada Simón del desierto? Pues aproveche las rebajas y cómprese la columna
Dicho lo anterior, está muy bien el artículo.
No LE rescataron.
A la catalana.
¿Tu quoque, fili mi, con lo bien que sueles escribir?
Quandoque bonus dormitat Homerus.
Bien traído, Zalacaín, pero es que parece detectarse cierta contumacia en el error porque en el artículo de ayer sobre "La broma pesada de Armengol" ya se cayó en lo mismo.
A menudo comento por aquí en tono de guasa que el Libro de Estilo de VP parece haber hecho los leísmos obligatorios, y que quizá se han propuesto un ejercicio de ingeniería social eliminando estas melindrerías gramaticales simplificando el español, al estilo batúa.
Tiene usted razón, Urente. En estos tiempos que corren parece haber desaparecido la diferencia entre el objeto directo y el indirecto. Al parecer (no he tenido la oportunidad de comprobarlo), es un vicio peninsular, ya que al otro lado del charco no es habitual ver el pronombre personal átono le como complemento directo. No obstante, demos un voto de confianza a don Daniel: sus artículos (pese al leísmo) ayudan a mantener una visión bastante equidistante de la realidad.