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Cebrián se embolsó 692.000 euros por objetivos en un año en el que Prisa perdió 68 millones

El presidente ejecutivo del Grupo Prisa, Juan Luis Cebrián

Juan Luis Cebrián se mantuvo en 2016 como uno de los ejecutivos mejor pagados dentro del sector de los medios de comunicación, pese a las abultadas pérdidas registradas por Prisa, de 67,9 millones de euros. El presidente de la editora de El País percibió 1.762.000 euros durante el pasado ejercicio (2 millones en 2015), de los que 692.000 le correspondieron gracias al cumplimiento de objetivos. Su sueldo no fue mucho menor que el de los consejeros delegados de las televisiones privadas, unas empresas que obtuvieron beneficios multimillonarios. En concreto, Silvio González (Atresmedia) ganó 2,38 millones, mientras que Paolo Vasile (Mediaset), 2,03.

Durante el pasado ejercicio, a Cebrián ingresó un salario fijo de 1 millón de euros y un variable de 692.000. Esta última cantidad le correspondió por el cumplimiento de los objetivos ligados al resultado de explotación, al flujo de caja y a la facturación que obtuvo el grupo a través de sus negocios digitales, según la información que ha proporcionado este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

A este montante, hay que sumar los 1,2 millones de euros anuales que le corresponden a Cebrián -entre 2014 y 2018- en concepto de complemento de jubilación. Este dinero lo cobrará a la finalización de su contrato “y será consolidable incluso en el caso de una extinción anticipada del mismo”, salvo que exista una causa “justa” de despido. En este caso, percibirá la parte del bono anual devengada en proporción al tiempo trabajado durante el ejercicio.

Cabe recordar que la relación de Cebrián con Prisa terminará el 31 de diciembre de 2020. No obstante, perderá el poder ejecutivo al finalizar 2018, tras lo que se iniciará un proceso de transición de poder en la compañía, según detalló en la última General de Accionistas.

El contrato de Cebrián indica que perderá el poder ejecutivo el 31 de diciembre de 2018.

Tal y como contó Vozpópuli el pasado verano, dentro del Consejo de Administración de la editora de El País han surgido voces críticas con su gestión –lideradas por el fondo buitre Amber Capital- que pretenden destronar al periodista y académico antes de que expire su contrato.

Además del montante fijo y variable que recibió Cebrián durante el pasado ejercicio, disfrutó del alquiler de una vivienda en la capital madrileña, pagada por Prisa, que ascendió a 48.000 euros, según se detalla en el informe anual sobre la retribución de sus consejeros.

El variable que ingresaron el presidente de Prisa, su consejero delegado, José Luis Sainz, y su vicepresidente, Manuel Polanco, fue un 30% inferior a lo que les correspondía, por acuerdo de la alta dirección. El sueldo total de Sainz fue de 1,29 millones, mientras que el del único miembro de la familia Polanco que permanece en el Consejo de Administración de Prisa, de 640.000 euros.

Durante 2016, las retribuciones de los consejeros de Prisa ascendieron a 5.753.000 euros. Al expresidente de México, Ernesto Zedillo, le correspondieron 149.000 euros, al empresario de ese país, Roberto Alcántara Rojas (Grupo Herradura), 175.000; al inversor catarí Khalid Bin Thani Abdullah al Thani (International Media Group), 102.000; y al ‘levantisco’ dueño del fondo buitre Amber Capital, Joseph Oughourlian, 112.000.

Pérdidas de Prisa

La dueña de ‘El País’ y la Cadena SER cerró el pasado ejercicio con unas pérdidas de 67,9 millones de euros que acreditan su precaria situación financiera y la falta de signos de recuperación de sus negocios. Su deuda se redujo en este tiempo en 173 millones de euros y actualmente asciende a 1.486 millones de euros.  Los ingresos de explotación del grupo fueron de 1.358 millones de euros (-1,2), mientras que su EBITDA fue de 248,9 (+0,2%) y su resultado financiero, de -87,1 millones (+20%).

La facturación de su división de educación disminuyó el 0,8% durante el pasado ejercicio, mientras que la de sus radios, el 4,4%; y la de su área de prensa, el 0,6%. Sus cadenas de radio perdieron 1,6 millones de oyentes, mientras que la difusión de sus principales periódicos, El País y As, se redujo en casi 35.000 ejemplares diarios, de media.

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