Asuntos Internos logra acceder a los archivos blindados de Villarejo tras 5 años de causa

Avances en el caso Villarejo. La Unidad de Asuntos Internos de la Policía va a poder acceder a numerosos archivos hasta ahora protegidos del comisario jubilado. Los agentes han trasladado a la Audiencia Nacional que disponen de la tecnología necesaria para poder estudiar el contenido de estos documentos, que en su mayoría consisten en correos electrónicos del Grupo Cenyt; el entramado desde donde cometió todos sus espionajes.

Se trata de un golpe de efecto en esta macrocausa ya que los investigadores han tenido problemas para analizar una parte importante del material incautado a Villarejo tras su detención en noviembre de 2017. Ahora, más de cinco años después, la unidad policial adscrita a la causa da por superadas las dificultades técnicas para acceder a archivos en formato .pst. Se trata, en palabras de Anticorrupción, de "compleja documentación en formato digital" que "sin duda es de notable interés para la causa".

El magistrado Manuel García Castellón, por su parte, también se hace eco de este avance y explica que Asuntos Internos va a proceder a su "inmediato análisis", según consta en la nueva documental del caso a la que ha tenido acceso Vozpópuli. En concreto, alude a este avance policial en el marco de la línea de investigación relativa al espionaje que afecta a los hermanos navieros Ángel y Álvaro Pérez-Maura.

Correos con contraseñas

El instructor acuerda prorrogar medio año más esta pieza cuarta de la macrocausa a tenor de la documental que falta por recabar y las diligencias pendientes de practicar. No obstante, también advierte que este avance de Asuntos Internos es determinante y "resulta probable que pueda haber aspectos relevantes en esta pieza separada". A falta de proceder a su análisis, lo único que se sabe es que se trata de correos electrónicos del Grupo Cenyt y que estaban protegidos con contraseñas.

La Policía dispone de la tecnología necesaria para acceder a los archivos en formato .pst, relativos a correos de Cenyt. Se trata de una gran cantidad de documentación e información Auto del juez

Así pues, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 da alas a esta investigación y la prorroga hasta el 29 de julio de este año en aras a esclarecer los pormenores de este encargo. El trabajo en cuestión fue uno de los más ambiciosos que se investigan en el procedimiento y es el único que ha derivado en una investigación internacional, en concreto en Guatemala; país del que se está pendiente recabar información.

En este caso se indaga el pago de más de 7 millones de euros de los hermanos cántabros al agente encubierto por neutralizar el proceso de extradición de Ángel Pérez-Maura que llevaba la Audiencia Nacional. Además, también se le pidió frenar la investigación vigente en Guatemala por presuntas mordidas de 30 millones de dólares al expresidente Otto Pérez Molina a cambio de que su empresa resultara adjudicataria para explotar una terminal en Puerto Quetzal

Medio año más de investigación

Así pues, el magistrado accede a prorrogar medio año más la conocida como pieza 'Pit'. Lo hace a petición de la Fiscalía Anticorrupción, que sostiene que hay pruebas de calado que practicar. En primer lugar, están a la espera de una pericial de la Agencia Tributaria en relación a un informe previo que apunta a la comisión de delitos fiscales por parte de Ángel Pérez-Maura y otros seis delitos más de la mercantil familiar Pérez y Cía.

Hacienda alertó a la Audiencia Nacional en septiembre de 2020 de irregularidades en el pago de los más de 7 millones que canalizaron tres firmas de Villarejo: Cenyt, Stuart&McKenzie y Adessan. De hecho, se abrió una vía administrativa que está en punto muerto a la espera de avanzar en esta causa penal. Los investigadores consideran que esta pericial es "fundamental" y no descartan que de la misma surjan más diligencia de prueba.

En segundo lugar se justifica la prórroga por la necesidad de tener que adherir la documental que resta de la comisión rogatoria librada a Guatemala en abril de 2021 y, en tercero, en que todavía no se ha tomado declaración a Pérez y Cía. La firma está imputada como persona jurídica por los pagos al comisario jubilado para efectuar el espionaje más internacional de todos cuantos se le investigan al comisario jubilado.

"Cohecho de 30 millones"

Tanto es así, que esta línea de investigación se abrió por los delitos de organización criminal, cohecho internacional, asociación ilícita, estafa agravada y fraude, entre otros. Anticorrupción habla de la "complejidad" del asunto teniendo en cuenta que se investigan pagos millonarios al antiguo presidente guatemalteco y más funcionarios, para lo que se habría utilizado un complejo entramado societario en distintos países.

Los audios y archivos incautados a Villarejo sobre este encargo ponen de manifiesto que el comisario, en colaboración directa con otros imputados (como Adrián de la Joya) convencieron a los Pérez-Maura de que frenarían la extradición de uno de ellos gracias a su cercanía con el entonces magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón (a quien apodaban 'el mago') y también de la exfiscal general del Estado, Dolores Delgado.

Precisamente, las alusiones a la exministra de Justicia llevaron al juez a ofrecerle personarse como perjudicada en el caso Villarejo. El comisario 'vendió' a sus clientes que frenaría la investigación internacional gracias a un plan infalible. El mismo pasaba por aupar a la presidencia de Guatemala al entonces embajador Julio Ligorría para torpedear la investigación abierta en la Comisión Contra la Impunidad en Guatemala (CICIC). Para ello contaban con el apoyo de Paul Manafort, exjefe de campaña de Donald Trump.

Villarejo alardeó de contactos al más alto nivel -implicó incluso a Felipe González, a quien se refería como 'pelo blanco'- pero la realidad fue bien diferente. De los audios de la causa se desprende que el policía y sus socios (el abogado Enrique Maestre o el empresario Armando Flandorfer) engañaron a los Pérez-Maura, a los que se referían a sus espaldas como "ratones" y "miserables". Los navieros, por su parte, aseguran haber sido víctimas de un engaño y niegan que se le pidiera frenar la extradición que se seguía contra uno de ellos en la Audiencia Nacional.