El magistrado Manuel García Castellón ha denegado a Ignacio Sánchez-Galán que declare el próximo martes 18 de enero por videoconferencia. El presidente de Iberdrola, que está citado en calidad de investigado por los contratos de la compañía con José Manuel Villarejo, lo solicitó apelando a la crisis sanitaria ocasionada por la covid, si bien el instructor rechaza la petición, obligándole de esta forma a acudir de manera presencial a la Audiencia nacional, según confirman fuentes jurídicas a Vozpópuli.
En un escrito presentado el pasado 4 de enero, su defensa explicó que el presidente de Iberdrola pertenece a un grupo de riesgo y que además, reside en Bilbao. "El empleo de la videoconferencia permite, en este sentido, compatibilizar la debida atención del requerimiento judicial con todas las
garantías procesales", expuso su abogado, el cual además indicó que la alta incidencia de los contagios por la variante Ómicron hace necesario "minimizar el riesgo".
El magistrado, por contra, no libra del paseíllo judicial a Sánchez Galán que tendrá que comparecer en persona el próximo 18 de enero. Junto a él está citado también el expresidente de Iberdrola España, Fernando Becker. Con todo, la ronda de interrogatorios acordada por el instructor que investiga los contratos de Villarejo arrancará un día antes. El lunes 17 tienen previsto comparecer el actual director general de negocios de la eléctrica, Francisco Martínes Córcoles, y el que fuera jefe de gabinete de Presidencia Rafael Orbegozo. El miércoles comparece el representante legal de Iberdrola Renovables, también imputada como persona jurídica.
Todos ellos fueron imputados en la causa el pasado mes de junio por los delitos de cohecho activo, contra la intimidad y falsedad en documento mercantil. El instructor considera que, de las diligencias practicadas en esta pieza número 17 del caso Tándem, existen indicios que apuntan a que conocían de la existencia de los encargos que la compañía efectuó a las empresas del comisario jubilado entre 2004 y 2017. Anticorrupción sostiene al respecto que se trata de hechos irregulares ya que Villarejo era funcionario en activo y se apoyaba, además, en bases de datos privadas para sacar adelante sus trabajos.
No hay razones personales
Aunque en un primer momento se fijó como primera fecha de declaración el 8 de julio, García Castellón decidió dejarlo en punto muerto para resolver antes el grado de implicación de Iberdrola. Ya entonces Sánchez Galán propuso recurrir a la vía telemática para rendir cuentas por estos hechos, pero el magistrado le denegó la solicitud, de manera que tendrá que entrar andando del mismo modo que hicieron otros grandes del IBEX salpicados por el caso Tándem como Francisco González, Isidro Fainé o Antonio Brufau.
Ahora el instructor responde tanto a Sánchez Galán como a Orbegozo (que también pidió no acudir presencialmente) que no hay motivos reales que justifiquen esta medida. "En los escritos presentados no se aprecia concurrencia de presupuestos de utilidad para la causa que justifiquen la declaración en el modo que se interesa en condiciones que garanticen su eficacia y validez, ante todo lo cual no puede estimarse la petición", responde en un auto de este mismo viernes.
No obstante, explica que siempre queda la posibilidad de que aleguen razones personales de su salud u otras de orden público para justificar su incomparecencia. "En ese caso, de cursarse la petición, se valoraría la oportunidad de la realización de la declaración por medio de videoconferencia, en condiciones que permitan garantizar la salvaguarda del derecho a la defensa", responde.
Cruce de versiones
Así pues, se espera un desfile de altos cargos de Iberdrola la semana que viene en la Audiencia Nacional. Su declaración se produce, por un lado, en pleno cruce de reproches con Florentino Pérez (personado en calidad de acusación particular) y, por otro, tras los recursos presentados por Sánchez Galán tratando de tumbar su imputación. El presidente de la eléctrica ha mantenido en todo momento que él estuvo al margen de estas contrataciones y que, además, no es cierto que ejerciera cargo alguno de responsabilidad en Iberdrola Renovables.
El magistrado, a petición de la Fiscalía Anticorrupción, imputó a la filial el pasado mes de julio dado que fue la que costeó los pagos por el último encargo girado al Grupo Cenyt (proyecto Wind). La matriz no tendría que responder por los anteriores porque hasta 2010 no cabía la posibilidad de imputar a las personas jurídicas por su responsabilidad penal. Pese a ello, Florentino Pérez ha pedido al juez que también actúe contra Iberdrola ya que los servicios se prestaron para la matriz. El magistrado está pendiente de resolver sobre esta diligencia.
Con todo, Ignacio Sánchez-Galán será preguntado expresamente en relación a uno de los documentos estrella de este procedimiento que presentó el exdirector de Funciones Corporativas de Iberdrola, José Antonio del Olmo. Este exempleado -que paradójicamente está citado a declarar el mismo 18 de enero en Plaza de Castilla por otra causa contra Iberdrola- puso contra la picota a toda la cúpula de la eléctrica vasca al apuntar que eran conocedores de que el primero de los encargos a Villarejo (proyecto Arrow) se costeó a través de su proveedora de seguridad mediante operaciones triangulares.
A todo ello se añaden los últimos informes presentados por Asuntos Internos a la causa y relativos a las escuchas que obran en el sumario. En los audios, el propio Villarejo hace alusión a Sánchez Galán como 'el presi', 'Ignacio' o 'el jefe'. El comisario jubilado pretendía que sus trabajos llegaran al presidente de Iberdrola y pedía a su interlocutor (el entonces director de Seguridad Antonio Asenjo) que le trasladara sus pesquisas sobre proyectos como BlackBoard (que se centró en un espionaje a Manuel Pizarro en plena OPA de Gas Natural a Endesa).
