El primer mes de Alves en prisión: firma autógrafos, compra comida a presos y niega la violación

Dani Alves se daba baños en sus primeros días en la prisión de Brians 2. Ahora "es un preso más" que incluso ayuda a los otros reclusos ya que les compra comida, según informan fuentes penitenciarias a Vozpópuli. El exjugador del Barça está cerca de cumplir su primer mes entre rejas mientras aún se decide su futuro en los tribunales.

La llegada del futbolista a la cárcel, el pasado 20 de enero, generó una gran expectación entre prisioneros y funcionarios que tenían ganas de conocer de cerca al jugador. Su paso por Brians 1 duró un fin de semana. El brasileño apenas salió de su celda esas horas. La curiosidad de sus compañeros no pudo ser colmada.

Esos tres días solo pudo cumplir los trámites propios de un ingreso en prisión. Informes y evaluaciones. Durmió solo ese fin de semana y fue trasladado de recinto a Brians 2. Esta instalación es más moderna y podía permitir al 'preso estrella' más privacidad.

Su aterrizaje se produjo en el módulo 13 en el que están otros reclusos con causas similares por agresiones sexuales. Tuvo como compañero de celda a un viejo conocido de Alves, un 'puertas' de discoteca que responde al nombre de Coutinho. Este preso fue guardaspaldas de su compañero en Brasil Ronaldinho y también trabajó para establecimientos como 'Sutton', donde presuntamente el futbolista habría cometido la agresión sexual. Este 'colega' abandonó Brians 2 y ya se encuentra en la calle.

"Un preso más"

"Actúa como un preso más, se compromete con los trabajos en la cárcel y se relaciona con el resto de internos", enfatiza fuentes consultadas por Vozpópuli. Durante los primeros días algunos de sus compañeros le pidieron autógrafos y llegó a firmar pósters en los que salía con la camiseta del Fútbol Club Barcelona. Estas imágenes ya estaban en la prisión antes de su llegada.

También disputó un partido de fútbol con el resto de presos. Fue mucha la expectación y los funcionarios tuvieron que diseñar cortinas para que no se repitieran algunas escenas de 'mirones' en las gradas. Alves no habla del hecho que le ha enviado a prisión pero mantiene su inocencia. Siempre repite que las relaciones fueron consentidas y no hubo agresión. Un mantra que reitera cada jornada.

En algunas circunstancias, Alves compra comida a sus compañeros ya que dispone de más poder adquisitivo que el resto. No tiene un trato especial en Brians 2 pero es cierto que los primeros días tuvo una vigilancia estrecha por parte de los funcionarios como marca el protocolo de adaptación.

Riesgo de fuga

Mientras tanto Dani Alves se mantiene a la espera de que la Audiencia Provincial de Barcelona resuelva sobre su petición de salir de prisión. Este mismo jueves se celebró la vista en la que su letrado Cristóbal Martell pidió que se le deje en libertad provisional y que se acuerden para él medidas menos gravosas como una pulsera telemática. Frente a su criterio se encuentra el de la Fiscalía y la acusación particular que ejerce la víctima.

De hecho, el Ministerio Público expuso que se oponía a la petición del futbolista dado que existen "indicios suficientes" de que violó a la joven en los baños de la discoteca así como de un alto riesgo de fuga. En relación a este último punto sostiene que Alves, aunque ostenta la nacionalidad española, no tiene arraigo en nuestro país. Ello unido al "muy elevado patrimonio" eleva la sospecha de que pudiera fugarse de la Justicia si le dejaran en libertad.

Además, la Fiscalía mantiene que en apenas un mes y medio de causa cuentan con "múltiples indicios" que corroboran la versión de la joven. La abogada de la víctima, Esther García, se adhirió también a lo manifestado por la fiscal. En declaraciones a la prensa al término de la vista recordó que se opusieron al recurso de apelación de Alves debido a la celeridad de la causa y también a que apenas lleva cuatro semanas en prisión.

Celeridad del caso

"Ponerle en libertad supondría una vulneración a la integridad psicológica de mi clienta porque mientras él estuviera en libertad ella se ve obligada estar encerrada. Su sintomatología no es de una mujer que ha sufrido una agresión sexual ya que aquí se suma una presión mediática. Es un plus y, por lo tanto, entiendo que debe mantenerse la medida cautelar", expuso la letrada.

Así pues ahora la respuesta está en manos de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Barcelona. Fuentes jurídicas consultadas por este medio explican que no tardará en pronunciarse en relación a esta cuestión en tanto se trata de una causa con preso, lo cual implica que el asunto tiene más prioridad que aquellos casos en los que no hay investigados en prisión preventiva.

Además, las mismas fuentes explican que tanto la titular del Juzgado de Instrucción número 15 de Barcelona como la Fiscalía quieren dar celeridad a la instrucción. Los investigadores cuentan con múltiples pruebas que vendrían a refrendar el testimonio de la víctima, tales como el ADN de Alves encontrado en su ropa o lo recogido por las cámaras de la discoteca. Ello, unido a la presión mediática que acarrea esta investigación, induce a instruirla con cierta premura en aras a dilucidar si se archivan las diligencias o si, como todo apunta, se le envía a juicio.