El PP maniobra para evitar que Vox se presente a las elecciones gallegas

Las elecciones autonómicas en Galicia, que se celebrarán en el primer semestre del año próximo, constituirán probablemente la primera prueba de fuego en la que los diferentes partidos con representación nacional podrán conocer con datos ciertos cómo ha reaccionado el electorado a las polémicas alianzas urdidas por Pedro Sánchez para mantenerse en el poder.

En este contexto político de enorme confrontación, en el que el PSOE teme haber perdido muchos apoyos debido a las cuestionadas concesiones que ha brindado a las fuerzas independentistas y el PP aspira a captar los votos del electorado que deplora la negociación de la amnistía, los comicios gallegos se perfilan como una ocasión de oro para conocer el alcance real del cisma existente entre los bloques de derechas e izquierdas. No es de extrañar, por lo tanto, que Galicia se haya convertido ya, a muy pocos meses de la cita electoral, en un gran tablero de estrategias y de alianzas que marcarán el futuro de la política nacional según el resultado que arrojen las urnas.

Dentro de este escenario, el Partido Popular ya ha pedido a Vox que se abstenga de presentarse a las elecciones gallegas para evitar que el voto conservador se disgregue en un momento tan clave como el actual, en el que lo más importante es hacer un frente común contra el PSOE y sus socios de legislatura. La petición la cursó hace unos días, de una forma informal, el nuevo portavoz del grupo parlamentario popular en el Congreso, Miguel Tellado, pero todo indica que las negociaciones entre ambos partidos irán mucho más allá en las próximas fechas. Sobre este particular, fuentes de la Xunta consultadas por Vozpópuli aseguran que no hay nada nuevo a mayores de lo que expuso Tellado sobre la conveniencia de no fragmentar al electorado de centro y de derechas. Sin embargo, a buen seguro la maquinaria del PP no cejará en su objetivo de intentar convencer a la formación de Santiago Abascal para que desista de su idea de presentarse a las elecciones.

Menos de 27.000 votos

Las razones que exponen los populares son contundentes, en el sentido de que Vox tiene nulas opciones de conseguir ni un solo escaño en el ‘feudo’ de Alfonso Rueda, o eso al menos es lo que indican de forma incuestionable las encuestas internas y externas que manejan en la Xunta. En este sentido, recuerdan que en las pasadas autonómicas de 2020 Vox se metió un sonoro batacazo al conseguir menos de 27.000 papeletas y el apoyo de poco más del 2% de los votantes, dando como resultado que la formación se quedó fuera, una vez más, del Parlamento autonómico. En lo tocante a los últimos comicios autonómicos, el partido de Abascal tuvo que conformarse con arañar un único concejal en el pequeño municipio orensano de Avión.

Pese al escaso tirón que la formación ultraconservadora tiene en Galicia, en el PP son conscientes de que los votos que coseche Vox, por pocos que sume, serán a costa del electorado conservador, con las consecuencias que eso puede acarrear de cara a revalidar la mayoría absoluta que Alfonso Rueda necesita para permanecer al frente del Gobierno gallego. En esta ocasión, las elecciones gallegas tendrán un matiz diferente debido al estreno de Rueda como candidato. Aunque la confianza en él es plena, a nadie se le escapa que la incertidumbre es mayor que en la etapa liderada por un cabeza de lista tan asentado como Alberto Núñez Feijóo.

El propio presidente nacional del PP confesaba hace unos días que ganar las elecciones gallegas es algo “fundamental” para el partido y que todos los esfuerzos serán pocos para lograr ese objetivo. De momento, las encuestas sonríen a los populares, pero no tanto como en anteriores contiendas. Rueda, según esos pronósticos, tiene asegurados 40 de los 75 escaños del Parlamento gallego y, por lo tanto, el Partido Popular cosecharía su quinta victoria consecutiva por mayoría absoluta. Feijóo, en las elecciones de 2020, logró 42 escaños.

Frente común con Sumar

Mientras la formación líder en Galicia intenta convencer a Vox de la “tontería” que supondría concurrir a los comicios de 2024, pues sus votos se irían directamente a la papelera, ciertas voces indican que en el PSOE están haciendo un tanto de lo mismo con Sumar, aunque el partido de Yolanda Díaz ha desmentido este miércoles de forma rotunda que vayan a presentar una candidatura única. Según la vicepresidenta segunda del Gobierno, Sumar tiene un “proyecto propio” en todo el país y rechaza que haya posibilidad de concurrir junto al PSOE en las próximas elecciones gallegas.

Las encuestas, de momento, sonríen poco al PSOE, que quedaría de nuevo por detrás del Bloque Nacionalista Galego. Según los cálculos de la empresa Sondaxe, los socialistas gallegos, con José Ramón Gómez Besteiro al frente, conseguirían 15 asientos en el Parlamento autonómico, cuatro menos que el BNG, y Sumar se estrenaría con un escaño.