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España

Los actores Verónica Echegui y Álex García, investigados por la red de pasaportes covid falsos

La Policía Nacional ha citado como investigados a la pareja de actores ya que presuntamente contrataron los servicios de la organización que proporcionaba pasaportes covid y PCR fraudulentas

Verónica Echegui Gtres

La Brigada de Información de la Policía Nacional ha citado como investigados a los actores Verónica Echegui y Álex García por presuntamente haber contratado los servicios de la red que ofrecía pasaportes covid y PCR fraudulentas en España, según han confirmado fuentes de la investigación a Vozpópuli.

Precisamente, Verónica Echegui fue una de las protagonistas el pasado sábado de la gala de los Premios Goya ya que recibió el premio al mejor cortometraje por 'Totem Loba'. Para acudir a la gala tenía que presentar obligatoriamente el pasaporte covid por orden de la Comunidad Valenciana.

Otro de los famosos investigados es Abraham García Arévalo, que fue ganador del programa Supervivientes y ha participado en otros espacios como Gandía Shore o Doble Tentación.

Los agentes de la Policía Nacional consideran que estas personas presuntamente contrataron los servicios de la red, al igual que el cantante Omar Montes, que fue citado para declarar esta semana.

Entre los 'clientes' de la trama se encuentran también dos delincuentes archiconocidos en Madrid. Uno de ellos es el conocido alunicero Rubén del Saz Ayuso, alias 'El Bosco'. Otro de los que presuntamente pagaron a la organización fue Ismael Arriero Valcárcel, conocido como 'El Troll', otro de los ladrones más peligroso y que más veces ha sido detenido por la Policía Nacional.

En la larga lista de 2.200 investigados se encuentran famosos deportistas, empresarios, actores y cantantes, aunque por el momento se desconocen más detalles de las pesquisas, según estas mismas fuentes.

En una nueva fase de este dispositivo los agentes han detenido a cuatro nuevos intermediarios de la red criminal, que llegaron a captara 600 personas investigadas por obtener ilícitamente la pauta completa de vacunación. Con ello se suman un total de 2.200 inscripciones fraudulentas en el Registro Nacional de Vacunación, resultantes de la suma anterior.

Además los agentes han determinado la utilización de nuevas claves de personal sanitario que permitían el acceso al sistema.  Los agentes prosiguieron con la investigación al objeto de identificar a nuevos implicado y la semana pasada se produjeron los arrestos. Los detenidos son dos hombres y dos mujeres de nacionalidad española que tienen entre 35 y 43 años. Una de ellas, que actuaba como intermediaria, ya estuvo en prisión por un delito contra la salud pública.

Una mujer captaba a empresarios

Entre los arrestados se encuentra una mujer, que captaba a empresarios de diferentes partes del territorio nacional y a otros colectivos antivacunas o de carácter negacionista. Asimismo, también funcionando como intermediarios, los otros tres arrestados llegaron a captar a 600 clientes para que fuesen registrados ilegalmente como vacunados. 

Como resultado de las pesquisas, se ha contrastado la utilización ilícita de otras claves distintas a las investigadas a la fase anterior, con las que se habría registrado estos nuevos clientes.

Esta segunda fase de la denominada operación “Jenner” está basada en la importancia y gravedad de la entrada ilegal en el Registro Nacional de Vacunación para inscribir como vacunados a personas que no lo están.  El nombre de la operación es en honor de Edward Jenner un médico inglés que desarrolló la primera vacuna en 1796.

Hasta el momento la investigación suma por lo tanto once personas detenidas como presuntas responsables de los delitos de falsedad documental y contra la salud pública, acumulando un total de 2.200 investigados por haber obtenido el pasaporte COVID de forma fraudulenta.  

Famosos y delincuentes

La operación, iniciada con una primera fase en la que se logró determinar la relación con organizaciones francesas por la falsificación de los códigos QR, continúa abierta con una última y tercera fase centrada en realizar las detenciones de los principales miembros de la organización. 

Entre los clientes de esta banda se encuentran presuntamente el cantante Omar Montes, que fue citado como investigado a declarar esta semana, o A.M.C., conocida como la "reina de la coca" en España, que llegó a vender en un año 100 kilos de esta droga y ha sido detenida varias veces, la última en 2014. Esta mujer, al igual que Omar Montes, negó su implicación en la trama y dijo que no había contratado en ningún momentos los servicios de esta red.

Uno de los detenidos en la primera fase de la operación fue S.R.G., apodado Moli, que trabaja con aluniceros como especialista en cajas fuertes. Este hombre cumplió condena por homicidio imprudente al atropellar en Arganzuela a una persona que murió en el hospital. Estuvo durante unos meses en prisión pero quedó en libertad.

Una enfermera implicada

Entre los implicados estaba una enfermera, de un hospital público madrileño, que presuntamente accedía las bases de datos y cambiaba los registros de vacunación. Esta mujer negó los hechos ante los agentes y dijo que le habían sustraído sus contraseñas. Una extremo que aún se está investigando por parte de los agentes de la Policía Nacional.

A principios de enero comenzaron las pesquisas cuando los agentes detectaron anuncios que ofrecían tanto pruebas PCR falsas como pasaportes covid falsificados en grupos de carácter negacionista de una aplicación de mensajería instantánea. El pago que exigía la red a cambio de las certificaciones fraudulentas era de 50 euros en el caso de emitir certificados de pruebas PCR negativas y cantidades que oscilaban entre los 200 y 1.000 euros a cambio de expedir pasaportes coronavirus en los que constaran dos o tres dosis de vacunación.

Pago en criptomonedas

En la mayoría de los casos, los integrantes de la organización exigían el pago en criptomonedas, a través de cuentas que habían abierto en terceros países para hacer más complicado el rastreo por parte de las autoridades. Una vez que los implicados percibían el pago, los interesados obtenían el código QR en el que constaba la pauta de vacunación fraudulenta. A los dos días podían obtener el pasaporte COVID en el que constaban como recibidas dos o tres dosis.

La organización habría creado dos tipos de redes clientelares. Una a la que cobraban alrededor de 200 euros para que pudieran obtener el documento fraudulento, y otra, con mayor poder adquisitivo, a la que se exigía un pago de 1.000 euros por introducirlas en el registro con la pauta de vacunación completa.

Omar Montes negó los hechos

Cuando se conocieron los hechos. Omar Montes negó en un mensaje en redes sociales que hubiera adquiridos los servicios de esta red. "Estoy vacunado. Estoy muy concienciado con el uso de las vacunas como parte de la solución de la pandemia", publicó en su cuenta de Instagram.

"No puedo controlar todo lo que se pueda decir de mi, pero si puedo demostrar cuando sea necesario todas estas falsedades. Una mentira más", criticó.

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