El Ministerio del Interior ha puesto en marcha un proyecto para reforzar el perímetro de seguridad del Palacio de la Moncloa -que entre otros alberga el lugar de residencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez- con un nuevo vallado más robusto, al detectar algunas deficiencias en las actuales instalaciones, tal y como consta en la documentación a la que ha tenido acceso Vozpópuli. Para ello ha reservado una partida superior a 230.000 euros.
El estudio elaborado por un equipo de arquitectos detalla las debilidades en un tramo del actual vallado del complejo de la Moncloa. Por razones de seguridad no se detallarán los puntos específicos; no obstante, se reflejan problemas estructurales como fisuras en el muro de hormigón donde se asientan los postes de sujeción de la valla, desconchones, agujeros sin cubrir o desprendimientos en su recrecido. Asimismo se destaca la ausencia de iluminación de presencia y que las luminarias sorpresivas “no son de tecnología led”.
“La actuación pretende dotar de mayor seguridad el recinto en esta zona y mejorar las condiciones estéticas y de representatividad del mismo. Para ello el vallado en mal estado será sustituido por otro nuevo siguiendo el mismo trazado”, reza el pliego de prescripciones técnicas del proyecto.
El Ministerio dirigido por Fernando Grande-Marlaska pretende poner fin a esas deficiencias gracias a un nuevo proyecto de reforma del vallado en torno al Palacio de la Moncloa, en un trazado repartido en dos tramos de 165 y 171 metros, cada uno de ellos. Sobre ellos se aplicarán las mejoras de forma progresiva y escalonada, para evitar problemas de seguridad durante el desarrollo de las obras. También se incluirán otras labores de desbrozado en zonas cercanas al perímetro del Palacio.
El proyecto
Los documentos detallan que el proyecto contempla el desmontaje del vallado metálico actual y la instalación del nuevo sobre el muro de hormigón existente, previamente reparado. La solución propuesta es un cerramiento tipo empalizada, realizado con postes verticales a base de tubos metálicos huecos de sección rectangular, coronados con una bayoneta con ángulo hacia el exterior y alambre de púas: “Al ser una pantalla de tubos en vertical hace que sea difícil trepar por ella”.
Además, en las zonas adyacentes a la puerta de acceso y en la puerta misma se combinarán tubos de distinta sección que se dispondrán más próximos entre sí “y de forma aparentemente aleatoria o irregular” para señalar la entrada, “al tiempo que se dota de mayor ocultación y se satisfacen los requisitos estéticos con los que ha de contar el vallado del recinto”. La documentación añade: “Se dispondrán otras medidas técnicas de seguridad que no son objeto de esta memoria”.
Interior ya dispone de un proyecto inicial elaborado por un equipo de arquitectos donde se han analizado las deficiencias, plasmadas en el informe consultado por este diario. La Secretaría de Estado de Seguridad busca ahora una empresa que lleve a cabo las reformas en un periodo máximo de cuatro meses.
Para ello ha destinado fondos por valor de 234.582,03 euros, impuestos incluidos. Las empresas interesadas deberán presentar sus ofertas antes del próximo 25 de abril. Se trata de un procedimiento abierto, donde primará principalmente la propuesta económica (80% del valor de la oferta), y se tomarán en consideración aspectos como la ampliación del plazo de garantía (15%) y la acreditación de tener implantado un sistema de gestión medioambiental (5%).
Seguridad en Moncloa
La gestión de determinadas medidas de seguridad en el Palacio de Moncloa corresponde al Ministerio del Interior, que en fechas recientes ha puesto en marcha otras iniciativas para blindar las instalaciones ante posibles amenazas. Una de ellas, como contó Vozpópuli, fue una adjudicación a una empresa privada para el rastreo de cámaras y micrófonos que pudieran estar ocultos en el Palacio de Moncloa.
De acuerdo a la documentación adjunta al procedimiento, la licitación se adjudicó a la pyme General Comunicaciones y Seguridad S.A. (GECOMSE), mediante un procedimiento de contratación negociado sin publicidad, a la que se presentaron dos empresas. En total se abonaron 236.633,65 euros, impuestos incluidos.
