En el interior del zulo de los horrores del toxicómano maltratador de Madrid

La finca de Luis, conocido como El Puma, en Pezuela de las Torres (Madrid) estaba siempre concurrida por muchas personas. Eso sí, pocas sabían que escondido en el salón había un pequeño espacio oculto. Un zulo nauseabundo lleno de basura, como el resto de la vivienda, donde guardaba sus armas blancas y también retenía con bridas a su pareja Raina para violarla y agredirlas de forma salvaje. Ambos eran drogodependientes y malvivían en este lugar lleno de restos de comida y bebida donde querían pasar desapercibidos ante el resto del pueblo.

Es imposible hacer una fotografía de la finca sin describir el hedor que sale de cualquier habitación de la casa o del jardín. Los habitantes de Pezuela de las Torres (821 habitantes) han visto como su pueblo ha sido protagonista en un año de dos sucesos escabrosos. A principios de febrero de 2023 una 'madame' fue asesinada a tiros en un club de alterne de la localidad.

Un años después Pezuela vuelve a copar titulares con un suceso algo distinto pero también brutal. La Guardia Civil detuvo hace una semana a Luis, un hombre de 50 años. Este toxicómano local tenía antecedentes por delitos contra el patrimonio, seguridad vial, tráfico de drogas y maltrato sobre una pareja anterior.

Llevaba años con su actual pareja Raina, búlgara nacida en 1.984, con la que compartía, según los vecinos, su afición a las sustancias estupefacientes. Cuando la Guardia Civil accedió a la finca con autorización judicial se encontraron cajas, una moto sierra, una pared tirada y múltiples jaulas de perros, que vivían en unas deplorables condiciones también.

El SEPRONA retiró de la finca a diez perros

Las botellas de alcohol estaban sobre la mesa del jardín. Un paisaje rodeado de escombros con carros de la compra, motos estropeadas y cualquier 'cachivache' imaginable. Las retenciones de Raina eran habituales pero duraban unas horas. Pocos días antes de este suceso acudió a la venta del pueblo para pedir hilo para coser a un perro herido. El SEPRONA también retiró del lugar a diez perros, uno de ellos muerto. Por este hecho se le atribuye un delito de maltrato animal. Los canes se encuentran en dependencias de la Comunidad de Madrid.

Así, a los vecinos de Pezuela no les ha sorprendido el destino de esta pareja. La mujer manifestó haber sido retenida con bridas en una finca, lugar donde fue agredida sexual y físicamente por su compañero sentimental en un zulo. Cuando consiguió desprenderse de las ataduras y fue a pedir ayuda a la gasolinera que estaba delante de la finca. Tenía heridas y marcas en diferentes partes de su cuerpo.

Desde ese establecimiento, la víctima fue a denunciar al cuartel de la Guardia Civil de Villalbilla (Madrid). Ante la gravedad de los hechos, los especialistas en Policía Judicial se desplazaron hasta el hospital donde se encontraba la mujer y corroboraron la versión de la víctima. Los agentes descubrieron además que, días antes, la víctima había sufrido un aborto, que según el médico forense podía ser compatible con los golpes recibidos. 

Dado el alto grado de violencia empleado por el presunto autor, el mismo viernes los guardias civiles solicitaron al juzgado competente la entrada en la finca en Pezuela de las Torres, donde habían sucedido los hechos, accediendo esa misma tarde a la casa para ubicar los delitos y zulo del que hablaba la víctima.

El zulo de los horrores

En el registro, los agentes localizaron en el suelo de unas habitaciones un acceso a un pequeño habitáculo soterrado con escaleras que coincide con la descripción facilitada por la víctima. Los agentes encontraron numerosas bridas, armas blancas y una escopeta de aire comprimido. Era zulo con un entorno totalmente insalubre, con mucha suciedad acumulada y abarrotada de objetos y basura.

A Luis El Puma ahora se le acusa de los delitos de agresión sexual, detención ilegal, lesiones, malos tratos físicos, psicológicos y contra la integridad moral, dentro del ámbito de la violencia de género. Tras ser puesto a disposición del juzgado de instrucción número 3 de Alcalá de Henares, la autoridad judicial decretó su ingreso en prisión. Uno de sus amigos acudió este jueves a la finca a recoger sus cosas. Invitó a los medios a que accedieran al interior de la vivienda. La atención de todos los focos era la basura de las dependencias, solo había un espacio que destacaba por encima de todo: el zulo de los horrores donde retuvo a su pareja.