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Comunidad Valenciana

La deuda de cada valenciano escala hasta los 12.218 euros

La cuenta general de la Generalitat cerrada a 31 de diciembre de 2022 sitúa el déficit de la Administración autonómica por encima del 3%, el más alto de España

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La deuda de cada valenciano por la gestión, entre otros factores, de los sucesivos Gobiernos valencianos alcanza ya la cifra de 12.218 euros por lo que una familia media de cuatro miembros acumula en su debe casi 50.000 euros de deuda.

El déficit reflejado por la cuenta general de la Generalitat a 31 de diciembre de 2022 constata que el acumulado por el entonces Ejecutivo de Ximo Puig durante el pasado ejercicio se elevó hasta los 3.847 millones de euros.

Esa cifra, según ha explicado hoy la portavoz del Gobierno valenciano y consellera de Economía y Hacienda, Ruth Merino, supone superar el 3% respeto al Producto Interior Bruto (PIB) regional y "lleva aparejado el incremento continuo de la deuda".

Más de 55.000 millones

Esa deuda que individualizada sale a 12.218 euros por cada ciudadano de la Comunidad Valenciana es en su conjunto superior a los 55.000 millones de euros aunque "en los últimos meses se ha visto incrementada de manera sensible" (en algo más de 600 millones), ha explicado Merino.

"Estas son las cuentas que nos encontramos" ha advertido la portavoz del Consell "lo que sitúa a la Comunidad Valenciana a la cabeza de España en términos relativos y en primer o segundo lugar en términos absolutos".

Feijóo estaba preocupado

Esta radiografía de las arcas autonómicas confirma las afirmaciones de Alberto Núñez Feijóo durante su último mitin en Valencia, la semana pasada, y donde aseguraba que "la Comunidad Valenciana es la que más preocupa desde punto vista financiero. El déficit es algo inaceptable".

Feijóo, que se veía como presidente en ese momento, se comprometió a resolver el problema de la infrafinanciación en la Comunidad Valenciana y a estudiar la condonación de parte de la deuda histórica acumulada porque, decía, «la Generalitat no puede tener estas cuentas públicas, más de 50.000 millones de euros de deuda».

Ese diagnóstico ha sido compartido por la portavoz del Gobierno valenciano quien ha destacado que "la Comunidad Valenciana no merece estas cifras". Ha reconocido que "es verdad que estamos injustamente infrafinanciados y revertirlo es uno de nuestros principales objetivos porque no se puede mantener durante muchos más tiempo".

La infrafinanciación no es lo único que ha dado lugar a estas cifras escalofriantes porque hay una parte de gestión ineficaz, con el gobierno más caro de la historia, lo que ha contribuido a que se haya generado un déficit alto y la deuda sea todavía mucho mayor Ruth Merino

Ahora bien, ha querido dejar claro que "la infrafinanciación no es lo único que ha dado lugar a estas cifras escalofriantes porque hay una parte de gestión ineficaz, con el gobierno más caro de la historia, lo que ha contribuido a que se haya generado un déficit alto y la deuda sea todavía mucho mayor".

Aumento de recursos sin efectos

Ruth Merino ha recordado que la Generalitat ha pasado de "Presupuestos de 17.000 millones de euros a uno en el presente ejercicio de 30.000 millones" y esa elevación tan acusada de las cuentas autonómicas "no ha servido para que el aumento de los recursos haya revertido en la prestación de unos servicios públicos de calidad en sanidad, educación y servicios sociales".

Preguntada sobre si van a pedir al Gobierno de España que modifique el reparto autonómico con un cambio en el modelo de financiación ha recordado que "todavía no tenemos a nadie enfrente como interlocutor" pero ha garantizado que "nuestra intención es trabajar para revirar estos datos y acabar con esta deriva irresponsable porque no puede ser que cada valenciano tenga esa deuda".

"Los servicios públicos fundamentales que salen de cada euro que pagan de impuestos los ciudadanos se deben ver reflejados en una prestación de calidad", ha asegurado la portavoz del Ejecutivo valenciano.

En cuanto a cómo van a conseguir recortar el gasto sin que afecte a la prestación de servicios públicos fundamentales, Merino ha detallado que "vamos a cambiarlo desde del rigor, la eficiencia y la optimización de los recursos. Lo único que se va a recortar por parte del Consell es la ineficiencia, el gasto político y los gastos superfluos y afrontaremos una optimización del sector público".

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