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Economía

Así convirtió Competencia a Telefónica en una presa fácil para Arabia Saudí

STC se hizo con un 9,9% del control de Telefónica a un precio muy reducido. La incidencia de la alta competitividad en el valor de la acción del operador es muy alta

Telefónica
El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete Europa Press

El asalto de la familia de Arabia Saudí a Telefónica a través del operador local del país, STC Group, cogió por sorpresa tanto a Gobierno como a Telefónica, si se dan por buenas las declaraciones del propio Ejecutivo y el operador. Sin embargo, tanto el de Sánchez como anteriores gobiernos de otro color han allanado mucho el camino para que la entrada de Arabia Saudí fuera un paseo triunfal. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha sido el instrumento que ha permitido, con el aval de los diferentes gobiernos, que todo fuera más fácil para STC Group.

Los árabes decidieron ir a por Telefónica porque el precio de la acción del operador es sumamente atractivo. Los títulos de la corporación presidida por José María Álvarez-Pallete se mueven entre los 3 y 4 euros desde marzo de 2020. Un descenso en el valor de la acción que no solo es cosa de Telefónica. El sector de las telecomunicaciones, en general, se encuentra con los ingresos a la baja o congelados, atendiendo siempre a lo que son las grandes corporaciones, caso también de Orange y Vodafone.

Este Gobierno y los anteriores han ido empujando paulatinamente a la baja el sector, impulsando una guerra de precios que ha llevado a las grandes corporaciones a la situación actual. ¿Cómo lo han hecho? Básicamente catapultando la competitividad, es decir, permitiendo la entrada de más y más compañías de telecomunicaciones. Son los llamados Operadores Móviles Virtuales (OMV).

Esta figura puede dar servicio a los usuarios utilizando las redes de los grandes operadores. Sí, tienen que pagar por ellas, pero los precios de arrendamiento los marca precisamente la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.

En España existen entre 600 y 800 operadores, tanto virtuales como de corte más tradicional. Un mercado que se ha desarrollado al amparo de la CNMC y sin que este Gobierno ni los anteriores dijeran esta boca es mía

En este sentido, los precios establecidos para los OMVs son considerados demasiado 'populares' para los incumbentes -las compañías con red propia-. Las cuentas de resultados de los últimos años son un claro ejemplo de ello. Su negocio principal, vender datos y llamadas, no es rentable. Una situación que les ha obligado a abrirse a otros negocios. Internet de las Cosas (IoT), Big Data o ciberseguridad son un claro ejemplo de ello, cuando no otras actividades menos ligadas al ámbito digital, como la venta de alarmas o de seguros de salud.

El Gobierno permite que haya centenares de operadores

En total, y según fuentes del sector, en España existen entre 600 y 800 operadores, tanto virtuales como de corte más tradicional. Un mercado que se ha desarrollado al amparo de la CNMC y sin que este Gobierno ni los anteriores dijeran esta boca es mía. Por ello sorprende, y mucho, que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, se rasgue ahora las vestiduras pidiendo que se bloquee la entrada de STC Group en el gigante español. Lo cierto es que todos han puesto su granito de arena para que se produjese una situación como la que se ha dado.

Pese a que la fusión entre Orange y MásMóvil debería contraer el mercado y limitar un poco más la competitividad, son muchas las voces del sector que aseguran que para que todo llegue a buen puerto Bruselas, juez de la operación, establecerá una serie de condiciones o remedies que harán que Digi Mobil o Avatel se conviertan en poco tiempo en uno de los grandes, como en su día pasó con MásMóvil, con lo que la historia se repetiría y el mercado seguiría siendo demasiado competitivo. Entre las condiciones que se barajan estaría la obligatoriedad de ceder o vender a terceros operadores la red de telecomunicaciones que resulte duplicada en el caso de que Orange y MásMóvil se fusionen.

Arabia Saudí pagó un total de 2.100 millones de euros por el 9,9%, lo que le da derecho a dos sillones en el consejo de administración. En la actualidad es el accionista con más porcentaje de títulos, por delante de BBVA, BlackRock y Caixabank.

Una operación que le permitirá ingresar unos 180 millones de euros anuales en concepto de dividendo. Telefónica es una de las compañías que mejor remunera al accionista, con 0,30 euros por acción repartidos en dos pagos anuales.

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