Más ajustes en Telefónica: el hacker Chema Alonso integra en su división a 36 empleados de otra filial

Continúan los ajustes en Telefónica. Si este verano Telefónica I+D y Telefónica Digital se integraban en una nueva filial denominada Telefónica Innovación Digital, ahora casi una cuarentena de trabajadores de Telefónica S.A. serán integrados en esta nueva división.

Al frente de la misma se encuentra el mediático hacker Chema Alonso, Chief Digital Office (CDO) de la compañía de telecomunicaciones, que recibirá concretamente 36 perfiles que pasarán a formar parte de la recientemente creada área de negocio. En la actualidad Telefónica S.A. cuenta con un total de 1.111 empleados.

Telefónica ha declinado hacer declaraciones al respecto al ser preguntada por Vozpópuli. El área de actividad de esos perfiles será la misma que en Telefónica S.A. El objetivo de este movimiento de ficha se orienta, según otras fuentes consultadas por este diario, a la reestructuración para simplificar las distintas razones jurídicas de la compañía. Los 36 empleados mantendrán exactamente las mismas condiciones y derechos adquiridos hasta la fecha.

En cuanto al proceso legal de integración de ambas filiales, fuentes cercanas al operador de telecomunicaciones dirigido por José María Álvarez-Pallete aseguran a este diario que se producirá a finales del presente año.

Telefónica Innovación Digital

Dos son los objetivos principales de Telefónica Innovación Digital. Por un lado, y bajo la batuta de Alonso, desarrollar de nuevas tecnologías, productos y servicios digitales para impulsar la transformación del sector de las telecomunicaciones. Es una suerte de laboratorio en el que se generarán productos innovadores que agilicen la evolución del mercado.

Por el otro, Telefónica Innovación Digital pretende convertirse, precisamente para la consecución de los objetivos arriba de estas líneas descritos, en un polo de atracción del mejor talento disponible tanto en nuestro país como en el extranjero.

El plan de bajas incentivadas

Telefónica España prepara el cuarto plan de bajas incentivadas voluntarias de los últimos nueve años. Afectaría a un máximo de 5.000 empleados, aunque las previsiones de los sindicatos es que se acojan a él unos 2.500 trabajadores. Este plan será muy parecido a los tres anteriores que la compañía ha puesto en marcha desde 2015, con un coste de alrededor de 6.800 millones de euros.

Los nacidos en 1967 recibirán el 68% del salario hasta su jubilación, mientras que los alumbrados con anterioridad a ese año percibirán el 65%. Además, Telefónica les abonará las cuotas a la seguridad social y el seguro médico, entre otras cosas

La teleco pactó con los sindicatos su último Plan de Suspensión Individual (PSI) de empleo en diciembre de 2021. Supuso la salida de unos 2.300 empleados con un coste de unos 1.400 millones de euros. A este plan pudieron adherirse un máximo del 75% de trabajadores de más de 54 años con más de 15 años en la empresa de las áreas denominadas como no críticas (2.285 empleados), el 38% de las críticas (483 empleados) y el 100% de los mandos (214).

Así, los nacidos en 1967 recibirán el 68% del salario hasta su jubilación, mientras que los alumbrados con anterioridad a ese año percibirán el 65%. Además, Telefónica les abonará las cuotas a la seguridad social y el seguro médico, entre otras cosas.

La dirección de la compañía quiere finiquitar el PSI antes de que acabe el año por dos motivos. El primero es comenzar a negociar el nuevo convenio colectivo que expira el 31 de diciembre de este año, y el segundo, con la negociación firmada, celebrar el centenario del nacimiento de Telefónica con la mayor tranquilidad posible

Recorte de la plantilla a la mitad

El operador de telecomunicaciones ha reducido a la mitad su número de empleados en España. Si en 2016, momento en el que José María Álvarez-Pallete alcanzaba la presidencia de Telefónica, la plantilla estaba formada por 33.440 personas, cuando se ejecute el reciente Plan de Suspensión Individual, esta cifra quedará fijada en unos 18.500 puestos de trabajo, lo que supone un recorte prácticamente del 100%.

La dirección de la compañía quiere finiquitar el PSI antes de que acabe el año por dos motivos. El primero es comenzar a negociar el nuevo convenio colectivo que expira el 31 de diciembre de este año, y el segundo, con la negociación firmada, celebrar el centenario del nacimiento de Telefónica con la mayor tranquilidad posible.