Quantcast

Economía

Putin frena la salida de Rusia de la española Fluidra un año después de la invasión a Ucrania

La cotizada en el Ibex 35 se encuentra 'atrapada' en el país, pese a haber acordado la venta de su filial a otra empresa privada

Eloi Planes, presidente de Fluidra
Eloi Planes, presidente de Fluidra Fluidra

Casi un año y medio después de la invasión ordenada por Vladímir Putin a Ucrania, Fluidra sigue siendo una de las 225 empresas extranjeras que operan actualmente en territorio ruso. La reina mundial del negocio de las piscinas privadas permanece vinculada comercialmente al país más señalado por la comunidad internacional, pero contra su voluntad según reivindican desde la cotizada en el Ibex 35.

De hecho, su principal fuente de ingresos actualmente es Estados Unidos, que acapara ya el 52% de su negocio. Es allí donde la empresa quiere crecer y no en Rusia, según aseguran desde Fluidra.

"Como otras muchas empresas a las que les gustaría salir lo antes posible, estamos en un proceso de aprobación por parte de las autoridades rusas que es muy lento", señalan a Vozpópuli desde la compañía con sede en Barcelona y accionistas como los gigantes americanos y mundiales de la inversión como BlackRock, Fidelity o T. Rowe Price Associates.

Fluidra ha acordado la venta de su división en Rusia a un inversor privado, una circunstancia que acumula meses sin consumarse por la falta de autorización del Gobierno ruso

Según corroboran fuentes próximas, Fluidra ha acordado la venta de su división en Rusia a un inversor privado, una circunstancia que acumula meses sin consumarse por la falta de autorización del Gobierno ruso, que habría endurecido las condiciones desde el estallido de la guerra -más arduas que las que permitieron a Inditex, por ejemplo, vender sus activos a la emiratí Daher-.

Así las cosas, Fluidra se ha visto obligada a advertir de este factor en su último folleto de emisión de pagarés en el Mercado Alternativo de Renta Fija por 150 millones de euros con vencimiento en junio de 2024

De acuerdo a un listado de la Universidad de Yale, la empresa que preside Eloi Planes es hoy la única empresa cotizada en España que sigue vendiendo productos en Rusia; los investigadores de Yale también sitúan allí a otra empresa española que comparte con Fluidra a Rhône Capital entre sus accionistas: el grupo químico, minero y armamentístico Maxam. Desde la empresa que dirige José Manuel Vargas han esgrimido una prohibición impuesta por el Gobierno ruso para repatriar el capital, alegando además que se han dejado de obtener réditos económicos desde territorio ruso, avanzó ya El Confidencial.

Hace un año, los investigadores de la Universidad de Yale también incluían entre los operadores extranjeros en territorio ruso a la cotizada en el Ibex Acerinox, como informó ya Okdiario, si bien ya ha sido retirada de la lista. Atendiendo al centro educativo americano, alrededor de 1.000 empresas foráneas han logrado desvincularse de Rusia desde el inicio de la guerra a Ucrania en febrero de 2022.

50 personas y un millón de beneficio en Rusia

En Rusia, Fluidra ha reunido una plantilla en torno a las 50 personas, que reportaron un beneficio anual ligeramente superior al millón de euros al cierre de 2021 -la principal filial facturó 7,7 millones. Una cantidad nimia dentro de la facturación de la compañía, boyante durante la pandemia y ya con una cuota de negocio sobre la comercialización mundial de piscinas del 13%.

Fluidra experimentó un crecimiento "extraordinario" entre 2020 y 2021 gracias gracias al "efecto cocooning" (conocido en español como el efecto "quédate en casa"). En 2022, la compañía cerró con unas ventas de 2.389 millones de euros pero con un beneficio de caja neto de apenas 269 millones, un 20% menos que en el histórico 2021 por los crecientes costes financieros en un marco de alza de costes de construcción, precisamente, por la espiral de la energía y la crisis de suministros agravada por la guerra de Ucrania, entre otros factores. 

Fluidra ha emprendido un plan de ajuste de gastos de 100 millones, de los que 25 millones se aplicaron en 2022 y otros 75 millones deberán imputarse a los ejercicios 2023 y 2024

Tal es así que la compañía ha emprendido un plan de ajuste de gastos de 100 millones hasta 2025, de los que 24 millones deberán imputarse en 2023. Al cabo del presente año, la empresa que dirige Eloi Planes prevé una "normalización" de su negocio, con unas ventas entre los 2.000 y los 2.200 millones y un ebitda menor, de entre 410 y 480 millones de euros.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.