Hacienda tiene más de 1.000 millones de margen para rebajar los impuestos de los carburantes

El Gobierno tiene un colchón para acometer la rebaja fiscal a los carburantes que prepara de al menos 1.000 millones de euros. De entrada, la recaudación tributaria se está comportando de forma excepcional, con un crecimiento del 15,1% en 2021, tendencia que compensa las rebajas fiscales a la luz en vigor que acaba de prorrogar hasta el 30 de junio. Pero es que además el aumento del mercado de los derechos de emisiones ha generado unos ingresos extra para las arcas públicas, y precisamente la Comisión Europa ha instado a los gobiernos a utilizar esta partida para ayudar a los consumidores.

En concreto, según estiman los Presupuestos Generales del Estado de 2022, esta partida se elevará este año hasta los 2.000 millones de euros, una cifra que engorda un 61% a los 1.240 millones de euros que recaudó Hacienda en 2020, según consta en los últimos Presupuestos. Y una cifra estimada en octubre en una coyuntura ya inflacionaria pero muy alejada de la actual. De hecho, los expertos a los que ha consultado Vozpópuli calculan que este año el Estado va a recaudar al menos 1.000 millones más de los previstos, y reunirá más de 3.000 millones.

Este periódico ha preguntado a Hacienda cuánto ha recaudado finalmente en 2021 y cuánto lleva en 2022, pero no ha recibido respuesta.

Hasta agosto de 2021, la recaudación por los derechos de emisión de gases de efecto invernadero fue de 1.557 millones de euros, un 25% más que en todo el ejercicio anterior. Los PGE pronosticaban en octubre que, a cierre de 2021, esta vía de ingresos patrimoniales engordaría hasta los 2.335 millones de euros y se moderaría, aunque levemente, hasta los 2.000 millones de euros en 2022."Las causas del crecimiento son el aumento del volumen de derechos distribuidos por España, pero, sobre todo, la fuerte subida de los precios (el precio medio en 2021 casi duplica el de 2020)", informan los Presupuestos Generales del Estado de 2022. En la Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2021, las previsiones eran ingresar 1.200 millones de euros.

El Gobierno consideraba que 2021 se iba a cerrar con un precio de 25 euros/tonelada de CO2. Pero el mercado se ha descontrolado en ese periodo y ha duplicado la previsión hasta cerrar el ejercicio con el precio de 53,55 euros/tonelada. Y para 2022 la previsión se queda aún más corta. La media para los dos primeros meses de este año es de 84,79 euros/tonelada. Se espera que la recaudación para este año supere con creces a 2021.

La recaudación se incrementó en 2021 un 15,1%, hasta situarse en los 223.382 millones de euros frente a los 194.051 de 2020, lo que significa que se obtuvieron 1.275 millones más de los estimados en las cuentas públicas de 2021 y supone una mejora del 0,6% respecto a las previsiones. De hecho, los ingresos tributarios totales de 2021 se colocan por encima de los de 2007, de 200.676 millones, como ya hicieron en 2018 (208.808 millones) y 2019 (212.808). La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha sacado pecho de estos datos de recaudación, cuya presentación en sociedad adelantó a finales de enero, a la espera de que el resto de datos de la ejecución presupuestaria del año pasado se publiquen a finales de marzo.

La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha cifrado entre "10.000 y 12.000 millones" de euros el impacto fiscal de todas las medidas anunciadas para amortiguar el impacto de la subida de precios energéticos en empresas y familias. "Un mínimo de 12.000 millones", ha dicho también. Un análisis de las medidas rebaja el impacto de las medidas en vigor hasta el momento en más de 5.000 millones.

De momento, las medidas que se han puesto encima de la mesa en 2021 han ascendido a cerca de 2.200 millones, 2.000 las rebajas de impuestos y 200 millones el bono social. El impacto de la prórroga fiscal hasta junio sería en el mismo escenario de otros 2.000 millones, cuantía que ahora se incrementará por la subida de precios. Pero que también se verá aumentada por la parte del mercado de derechos de emisiones, y con el incremento de la recaudación derivada del aumento de las bases imponibles del Impuesto Especial sobre la electricidad y del IVA de aquellos consumidores que no puedan beneficiarse de la bonificación fiscal por su tarifa, que compensará las pérdidas de recaudación.

Además de defender que sus medidas tienen gran impacto, la prudencia con el margen fiscal que tiene el Gobierno para acometer más rebajas de impuestos trata de cubrir un escenario complicado en el que no se descarta que haya que habilitar partidas excepcionales para una nueva entrada masiva de trabajadores en ERTE, por ejemplo.

Feijóo: El Gobierno se está "forrando"

En este sentido, Alberto Núñez Feijóo, futuro líder del PP,  ha pedido una bajada de impuestos "de una intensidad excepcional ante una situación excepcional". "El Gobierno se está forrando con el incremento de la luz y la gasolina, porque el 50% de su precio son impuestos. Cuando el megavatio costaba 30 euros, el 21% eran impuestos; ahora que cuesta 500 euros, el 21% son impuestos. Imaginaos”, ha destacado.

Núñez Feijóo arrancó a Pedro Sánchez el compromiso de una rebaja de impuestos en la Conferencia de Presidentes celebrada el domingo en La Palma. Una rebaja que el Gobierno tiene encima de la mesa y que de momento no había activado, ya que de entrada ha preferido prorrogar las rebajas del IVA de la electricidad del 21% al 10% y del Impuesto Especial a la Electricidad, y la suspensión del Impuesto de Generación hasta al 30 de junio. Así lo anunció Pedro Sánchez en el Congreso hace casi dos semanas.

En ese momento se esperaba ya una rebaja de hidrocarburos a la que aludió veladamente en una entrevista en TVE. Finalmente se asumió el compromiso de que haya "rebajas fiscales" para mitigar los precios de la energía y que se va a trabajar con los sectores afectados. Tanto Montero como Sánchez prometieron ayer rebajas fiscales. La ministra de Hacienda apuntó a hidrocarburos y al IVA. Sánchez no concretó, en función de que consiga arrancar a la Comisión Europea el desacople del gas de la electricidad.