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Economía

El Banco de España presiona a Hacienda para subir los impuestos verdes pese a la inflación

La institución advierte de que una subida gradual en los próximos años de la tributación medioambiental es necesaria para consolidar las cuentas públicas y cumplir los objetivos climáticos asumidos por ley

Banco de España
Imagen de archivo del Banco de España.

El Banco de España ha instado al Gobierno a elevar los impuestos 'verdes' después de que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, desoyera a sus expertos y anunciara el pasado jueves, antes de la presentación del 'libro blanco' de la reforma fiscal, que no habrá subidas en el corto plazo. De esta forma, confirmaba lo que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, avanzó el lunes: el informe se ha quedado obsoleto tras la invasión de Ucrania y no se darán las subidas de carburantes comprometidas.

Tras esta declaración, la subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, apuntó que "existe margen para la elevación gradual en los próximos años de la tributación medioambiental, que incluye los impuestos sobre la energía, el transporte, la contaminación y la extracción o uso de los recursos naturales y que generó en España unos ingresos sensiblemente inferiores a los del promedio de la UE".

Según la subgobernadora de la institución pública, "esto no sólo contribuiría al cumplimiento de las metas trazadas en relación a la lucha contra el cambio climático, sino que, como efecto colateral deseable, ayudaría al necesario proceso de consolidación de las cuentas públicas". Así se pronunció en un evento en el que participó en la tarde del jueves, justo después de la presentación del 'libro blanco'.

Margarita Delgado recordó que la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, aprobada el año pasado, tiene como objetivo movilizar un volumen de inversión que supera los 200.000 millones de euros a lo largo de esta década, y una parte importante de esa inversión deberá ser ejecutada por las Administraciones Públicas.

En este contexto, apuntó que los fondos europeos constituyen "una pieza esencial" para alcanzar los "ambiciosos objetivos climáticos que España ha asumido en el medio y largo plazo" bajo el paraguas de dicha ley, en línea con el resto de miembros de la Unión Europea. Sin embargo, "la contribución del gasto público ha de verse complementada por la utilización de los instrumentos impositivos", sentenció.

De hecho, en el Plan de Recuperación, España se compromete a realizar una serie de subidas de impuestos verdes y a la creación de otros, algunos ya comprometidos para el tramo que ahora se desarrolla y cuyo plazo vence en junio.

La batería de los expertos

Pocas horas antes de esta intervención de Delgado, los expertos de Montero presentaron sus propuestas. A más de 15.023 millones de euros ascienda la subida de la fiscalidad del diésel y otros carburantes que proponen los expertos que ha designado el Ministerio de Hacienda para que el asesore en la reforma fiscal. Además de la armonización fiscal al alza para obligar a la Comunidad de Madrid a subir impuestos, es la única medida clara que plantean los expertos y por lo tanto la única cuantificable, lo que no puede decirse de lo que plantean en Sociedades, IVA o IRPF.

El Libro Blanco de los expertos plantea una subida total de impuestos medioambientales de 15.023,6 millones de euros. Ofrecen una horquilla para estas alzas, que podrían hacerse con una intensidad menor y recaudar sólo 5.941,1 millones. Recomiendan un alza del diésel y la gasolina de 6.850,2 millones. Según han explicado, proponen una equiparación de diésel y gasolina y una subida adicional.

A esto se añade un incremento de 1.960,6 millones de la accisa del gas natural; una modificación del Impuesto de Circulación que supondrá 610,8 millones más y otra del de Matriculación para reunir 2.335,1 millones más; la tributación de combustibles de la aviación, marítimos y agrarios, con un objetivo de recaudar 1.701 millones; el pago por uso infraestructuras viarias, por 1.397,9 millones, y la creación de un impuesto a los billetes de avión, que reportará 951,8 millones.

Asimismo, recomiendan una reforma de la tributación municipal de los residuos, que reuniría 294,6 millones; un impuesto a la extracción de áridos, por 426,4 millones; un impuesto sobre fertilizantes nitrogenados que calculan que logrará 279,9 millones, y la extensión de la fiscalidad de las emisiones, por un total de 932,3 millones. Las Cortes ya tramitan la creación de un impuesto a residuos estatal en este sentido.

Nuevos impuestos

Pero no acaba aquí la batería de impuestos verdes. Más allá del cuadro en el que cuantifican lo que suponen las subidas y nuevos impuestos que recomiendan acometer, en las propuestas enumeradas e identificadas de forma cerrada se incluye la creación de otros dos impuestos: uno municipal a la congestión de las ciudades y otro a la extracción de recursos hídricos, además de la regulación de la tributación municipal de residuos. Estas tres nuevas medidas no se cuantifican, tarea que le dejan al Gobierno analizar, pero engrosarán la recaudación de más de 15.000 millones prevista.

También son nuevos el impuesto a billetes de avión, que llegó a estar en audiencia pública antes de la pandemia y luego se cayó, el de extracción de áridos y sobre fertilizantes nitrogenados. Asimismo, en los nuevos negocios digitales, se plantea gravar las impresoras en 3D.

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