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Aterriza en España T. Rowe Price, uno de los gigantes de la industria de inversión en EEUU

T. Rowe Price lleva tiempo apostando por la Bolsa española

Un nuevo gigante de la industria de inversión apuesta por España. Se trata de T. Rowe Price, una de las mayores gestoras de EEUU, que ha decidido abrir oficina en Madrid y convertir, de este modo, a España en el decimoquinto país en el que tiene presencia. Con casi 775.000 millones de dólares bajo gestión, la entidad es una de las mayores gestoras del mundo.

Aunque hasta ahora no contaba con una oficina propia, España no es ni mucho menos una plaza desconocida para la gestora, fundada a finales de los años 30 en Baltimore (Estado de Maryland). Al menos, en cuanto a los mercados se refiere. De hecho, T. Rowe Price aparece como uno de los denominados “dueños” de la Bolsa española, con inversiones en compañías pertenecientes al Ibex 35 valoradas en algo más de 1.000 millones de euros. Algunas de ellas se han materializado en forma de posiciones cortas, de carácter especulativo.

T. Rowe Price mantiene cerca de un 5% en el capital de Acerinox, de la que es accionista desde 2014

Además de pequeñas participaciones en compañías como Telefónica, BBVA y Gas Natural, T. Rowe Price mantiene cerca de un 5% en el capital de Acerinox, de la que es accionista significativo desde finales de 2014. La entidad también apostó por el sector inmobiliario al adquirir algo más del 9% de la socimi Axiare. Al mismo tiempo, la gestora cuenta con un 3% de Colonial.

Vender fondos  

Todo apunta a que la entidad no se conformará con tener una destacada presencia en el parqué español sino que también apostará por la industria de inversión para colocar algunos de los más de 60 fondos que comercializa.

La compañía, que cotiza en la Bolsa de Nueva York, con una capitalización superior a los 18.000 millones de dólares, también tiene una destacada presencia en la industria de los fondos de pensiones, en la que es uno de los actores más relevantes del mercado estadounidense.

El aterrizaje de la gestora en España con oficina propia se produce en un contexto de aparente recuperación económica que debería repercutir de forma positiva en la industria de inversión.

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