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Sale a la luz por qué la reina Sofía no estuvo en la ceremonia de Almeida y los motivos reales por los que los Reyes no fueron

La periodista Pilar Eyre ha destapado algunas mentiras que se dijeron sobre la ausencia del rey Felipe VI y la reina Letizia en la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo Moreno y desvela el verdadero motivo por el que la reina Sofía solo fue al convite y no a la iglesia

Sale a la luz por qué la reina Sofía no estuvo en la ceremonia de Almeida y el motivo real por el que no fueron los Reyes
Sale a la luz por qué la reina Sofía no estuvo en la ceremonia de Almeida y el motivo real por el que no fueron los Reyes (Gtres)

La experta en Casa Real, Pilar Eyre, ha revelado algunos detalles desconocidos hasta ahora de la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo Moreno, como el verdadero motivo por el que la reina Sofía, que se encuentra ingresada desde el martes en la clínica Ruber por una infección, no acudió a la ceremonia religiosa y fue directamente al convite que se celebró el la finca El Canto de la Cruz.

La periodista también ha desvelado los motivos reales por los que los reyes Felipe y Letizia no fueron a la boda del alcalde de Madrid y su ya mujer, destapando así "la gran mentira" que se dijo de su ausencia. Además, Pilar Eyre ha explicado que el rey Juan Carlos I tenía una intención oculta en asistir a la boda del alcalde de Madrid, como os hemos contado en 'Vozpópuli'.

El verdadero motivo por el que la reina Sofía no estuvo en la ceremonia de Almeida pero sí en el banquete

La ausencia de la reina Sofía en la iglesia de San Francisco de Borja de Madrid, donde se celebró la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo, el sábado 6 de abril, llamó mucho la atención ya que a la ceremonia religiosa acudió casi toda la familia real al completo: el rey Juan Carlos, I, la infanta Cristina, la infanta Elena, Juan Valentín, Froilán y Victoria Federica de Marichalar. Solo faltaron la reina Sofía y el rey Felipe VI y la reina Letizia.

Sin embargo, después se pudo ver a la reina Sofía en la finca El Canto de la Cruz, donde se celebró el banquete y la fiesta de la boda. La periodista Pilar Eyre ha desvelado el motivo de su ausencia en la ceremonia religiosa. “La reina Sofía no quiso estar en ese posado de la familia y se fue directamente al convite. La reina Sofía

no fue por indicación de su hijo. La reina Sofía no mueve un dedo sin que la autorice o consultarlo con su hijo y ella no quiso participar en eso que, en cierta manera, es como una especie de contrabalanza a lo que significa Felipe, Letizia y sus dos hijas”, ha señalado en su canal de Youtube 'Al aire de Pilar Eyre'.

La experta en Casa Real ha descartado que no quisiera ir a la iglesia por su marido, el rey Juan Carlos I, a pesar que no mantienen apenas relación desde hace años. “La reina Sofía fue directamente al convite. A mí esto me parece un poco absurdo porque ella estaba por sus hijas [la infanta Elena y la infanta Cristina], no estaba por su marido [el rey Juan Carlos I] que sabemos perfectamente que hace años que no se dirigen la palabra. A menos que tampoco quisiera sentarse con su marido al lado y no pudiera soportarlo, pero como he visto que en ocasiones en bodas y en funerales, estaban juntos, así que yo creo que en esto no hubieran tenido tampoco inconveniente”.

Carla Pereira y la reina Sofía en la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo
Carla Pereira y la reina Sofía en la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo(Instagram)

"La gran mentira" del rey Felipe y la reina Letizia

La periodista Pilar Eyre también ha destapado “la gran mentira” que se contó de por qué no fueron los reyes Felipe y Letizia a la boda e José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo. “Se dijo que no podían ir porque tenían la final de la Copa del Rey, que Felipe tenía que entregar la copa, es curioso porque estas cosas, estas bolas, las empieza a decir alguien y luego todo el mundo lo repite como si fuera verdad y como si fuera una fuente oficial, como si lo hubieran dicho ellos mismos. Pero bueno, mirando simplemente el horario del partido de fútbol que era en Sevilla a las 10 de la noche, la boda era a las 12 de la mañana, o sea, que a lo mejor a la iglesia hubieran podido ir perfectamente e incluso al convite".

La experta en Casa Real continuó diciendo: “Además, pensad que los Reyes se desplazan siempre en un avión de las Fuerzas Armadas que tienen a su disposición, o sea que el tema de las prisas y que no podían hacerlo…  pues evidentemente no han ido porque no han querido y porque no les ha dado la gana”.

El rey Juan Carlos, la infanta Elena, sus hijos, Froilán y Victoria Federica, la infanta Cristina y su hijo Juan Valentín en la boda de Martínez Almeida y Teresa Urquijo
El rey Juan Carlos, la infanta Elena, sus hijos, Froilán y Victoria Federica, la infanta Cristina y su hijo Juan Valentín en la boda de Martínez Almeida y Teresa Urquijo(Europa Press)

La reina Letizia no fue para no coincidir con Juan Carlos I y por otro motivo más, según Eyre

Pilar Eyre ha continuado explicando que además, la reina Letizia no se siente cómoda con estos ambientes “pijos”. “Por una parte a la reina Letizia no le gustan los aquelarres pijos como cuando las amigas del rey Felipe hablaban de esquiar o le preguntaban si iba a Aspen o a Suiza y si le gustaba esquiar, Letizia siempre decía: ‘Oye, yo soy una chica trabajadora, yo de estos temas pijos no conozco nada’. No le gustan estos ambientes, no se siente a gusto con estas personas que ella sabe que si en una balanza ponen a Juan Carlos I y en la otra balanza la ponen a ella, van a elegir a Juan Carlos y a Sofía evidentemente. Ella creo que se siente en territorio hostil y no quería ir por este motivo”.

Además, ha explicado que el otro motivo por el que la reina Letizia no quiso acudir a la boda por su suegro, el rey Juan Carlos I. “Por otra parte estoy segurísima de que no ha querido ir para no coincidir con Don Juan Carlos, por mucho que Juan Carlos I haya puesto una demanda al periódico inglés ‘The Times’ por decir que él estaba detrás de la conjura contra Letizia. Por mucho que él se haya sentido obligado a hacerlo, yo no sé si por iniciativa propia o a sugerencias de su hijo, pero él ha tenido que hacer este gesto, de que es mentira y que demuestren que es mentira y que no es verdad que él esté detrás de esta conjura”. 

La periodista y escritora Pilar Eyre ha continuado diciendo: “Yo pienso que Letizia, en cierta manera, le debe achacar al rey Juan Carlos I de ser un poco la mano que mece la cuna. Yo creo que la hostilidad entre Felipe VI y su padre... Bueno, hablan de vez en cuando por teléfono pues es su padre al fin y al cabo, pero la hostilidad de Letizia y de Juan Carlos I no los veo coincidiendo y haciendo sonrisas”.

Eyre ha hablado después de la tensa relación que existe entre la reina Letizia y Juan Carlos I. “La reina Letizia ya ha hecho esfuerzos que se le notaban mucho desde luego, porque si algo tiene Letizia es que no sabe fingir. Pero yo creo que hubiera sido un trago demasiado duro ver como aplaudían al padre [al rey Juan Carlos I]. Además, es que se pueden encontrar también con algún feo de la gente, que es algo que no se puede controlar. También era incluso, a lo mejor, pues por motivos de seguridad, pero desde luego no han ido. A mí me parece que la familia ya estaba bastante representada, lo que pasa que es que, aunque es la misma familia, en realidad, no es la misma familia, son dos alas absolutamente distintas que no tienen nada que ver la una con la otra”.

Los reyes Felipe y Letizia, en Las Palmas
Los reyes Felipe y Letizia, en Las Palmas(Gtres)

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  • U
    Urente

    " no mantienen a penas relación desde hace años"

    Y seguro que por ello se sienten muy a penados.

    Otra perla del Libro de Estilo de VP, supongo.

    • M
      Monik

      Si mira la Fundeu, dice: Con el sentido de ‘casi no’, la preferencia actual es la escritura en una palabra: apenas. No obstante, no es incorrecto escribirlo en dos palabras (a penas), forma también recogida en el Diccionario académico, aunque la nueva edición (23.ª) señala que es poco usada (y por tanto menos aconsejable).